Por un momento, se escuchó un ruido fuerte y metálico y brevemente, todo se fue a negro. Cuando el joven arquero del Real Madrid recobró el sentido, recuerda haber visto cómo las luces del carro aún estaban encendidas, con el humo ascendiendo y escuchaba el quejido de dolor de gente a su alrededor. Lo llevaron al hospital, donde los doctores afirmaron que probablemente no volvería a caminar. Pudo hacerlo, pero necesitó de año y medio para hacerlo y su carrera en el fútbol ya había terminado.
Fue el día antes de su cumpleaños 20, en 1963 y frecuentemente, él se preguntaba lo que pudo haber sido: formaba parte del equipo que se alzó con la Copa Europea en 1966. Pirri, Pedro de Felipe, Amancio: todos eran sus amigos.
Cuando el joven portero se encontraba en el hospital, un enfermero llamado Eladio le dio una vieja guitarra, sugiriéndole que le sería útil poner a ejercitar sus dedos. Nunca había tocado antes, pero aprendió a hacerlo. Durante su largo periodo de convalecencia, escribió una canción. Entre sus letras se encontraba el verso "siempre hay por qué vivir, por qué luchar".
La canción fue bautizada "La vida sigue igual" y en 1968, la llevó al Festival de la Canción de Benidorm y ganó. El joven exportero era Julio Iglesias y éste firmó su primer contrato discográfico poco después.
En 1969, cuando "La vida sigue igual" se lanzó al mercado, la portada lo mostraba inclinado en el poste del Santiago Bernabéu. Pueden verla en la maravillosa colección de sencillos recopilada por Pascal Claude.
Hay música en el fútbol y fútbol en la música. He aquí una advertencia: durante dos años, los mundos de la música y el balompié se combinaron en el segmento "Tócala Otra Vez" del programa radiofónico Carrusel Deportivo de la Cadena SER de España, con Filippo Ricci, una sección en la cual las canciones se mezclaron con goles y noticias de los distintos equipos de la liga ibérica.
Y algunos de esos temas son de genuina calidad. Ante la inminencia del Clásico español, es hora de meter un poco de Barcelona y Madrid en nuestros oídos, comenzando con el himno del Barça, el cual servirá de fondo a la salida de los clubes en la noche de este miércoles.
En el caso del Madrid, Plácido Domingo ha dado paso al canto de los jugadores (o bien, el playback de estos en algunos casos, en el tema "Hala Madrid y nada más" (Claro que hay un guiño al lema del Barcelona de "Más que un club").
Esperen, que esto se pone mejor. ¿Quieren oir al Dream Team rapeando? ¡Claro que sí!
¿También a Royston Drenthe rapeando? Mucho mejor. Aquí lo tienen:
Tenemos a Dani Alves con el portero culé José Pinto...
...y a Hugo Sánchez, corriendo tras el balón en 1980...
...por su parte, Cristiano Ronaldo también incursionó en las baladas:
(Y sí, "Amor mío" es un tema original de Julio Iglesias)
Hablando de ello, otro jugador madridista que no llegó lejos, sufrió una lesión y terminó incursionando en el mundo musical es Álvaro Benito. Aquí está su grupo Pignoise con "Nada que perder". También tenemos al ex DT del Barcelona Terry Venables, sacando a relucir a su Elvis interno. Oh, apuesto que no se imaginaban que David Villa podía cantar así de bien:
Estos no son los únicos futbolistas que han publicado canciones (muchos otros han "cantado") y tampoco son los únicos temas con cierta conexión con esta rivalidad. Tenemos canciones dedicadas a ambos clubes, no solo originadas por miembros o exfutbolistas de estos equipos. (Por cierto, la rivalidad Cristiano Ronaldo vs. Lionel Messi representa un ámbito totalmente diferente y la colección de canciones que giran en torno a este eterno debate contiene temas de calidad dramáticamente diferente, que van desde lo malo hasta lo muy, muy malo). Dicen que el Barcelona es más que un club y tienen razón: van más allá. Igual que el Real Madrid. En realidad, todos los clubes de fútbol lo son y eso se refleja en la música, aunque es cierto que, entre los dos gigantes del balompié español, la calidad de las producciones musicales probablemente es mejor en la capital catalana. Aquí tenemos una pequeña selección.
El trio de música cómica catalán La Trinca reflejó un cambio en la sociedad y el éxito vivido por el Barcelona después de la llegada del astro holandés Johan Cruyff en 1973 con la disfrutablemente tonta canción "Botifarra de Pagés", la cual demuestra que el fenómeno del mercantilismo no es nada nuevo. La canción insiste que "Cuando la cosa no funciona/no nos viene de cien millones (de pesetas) / y como la bolsa suena / hemos traído a Barcelona / los mejores muslos del mundo", burlándose de cómo "los culés de verdad" gastan billetes "comprando discos, muñequitos y canciones de calidad, posters, pinturas y calzoncillos".
Comienza con el final de una espera de 14 años por un título de liga en 1974 y se ufana de una victoria en particular: el 5-0 del Barça sobre el Madrid.
"Sonaron cinco campanadas / en la Puerta del Sol / cinco golpes llora la Cibeles / Madrid estaba de duelo / por las calles se comentaba: / 'En Flandes se ha puesto el sol'", dice la letra. Flandes es una referencia al poder imperial español, el corazón del imperio y "Botifarra de Pagés" cierra en una nota más política (incluso si se censura el verso de "Viva Cataluña libre", con un guiño y un dedo medio al censor): "Somos y seremos socios del Barça, ¡tanto si se quiere como no se quiere!"
Antes de eso vino Serrat. "Temps era Temps" ("Érase una vez") fue su canción más famosa, una canción nostálgica escrita en 1980 sobre una época pasada, en la que se desenrolla de la línea de ataque "cinco tazas" de Barcelona, el equipo de su infancia: Estanislau Basora, Cesar, Laszlo Kubala, Moreno y Eduardo Manchon, hombres que representaron ese lado del Barça en la conciencia colectiva. También escribió un homenaje a Kubala: "Pelé era Pelé, solo había un Maradona y Di Stéfano era una fuente de astucia", canta, "pero ninguno era como Kubala".
Hablando de nostalgia, la canción del grupo Estúpida Erikah de 2010 cuenta la historia de una pareja dispareja, que creció junta con una conexión gracias al Barcelona.
"Lo mejor de ser del Barça es tenerte a mi lado", dice, resumiendo el sentir del fútbol y la vida de la mejor forma. La canción se llama "Iturralde González", en referencia al exárbitro, lo cual es tan sorprendente como brillante. No se menciona al exjuez en las letras, pero ciertamente, estuvo a cargo de varias ediciones del Clásico. (Por cierto, Iturralde toca en su propia banda, con un estilo de rock más pesado).
Es cierto: el fútbol se mete en todos lados, como una forma de darle sentido a todo. Y sabes que estás haciendo algo bien cuando Faithless te utiliza en sus temas como una medida de excelencia, una expresión de control y elegancia. Así es el hombre que dirigirá al Madrid en la noche de este miércoles en el Camp Nou. "Equilíbrate, saca el Zinedine Zidane que hay en ti", dice un verso del tema "The Man In You".
Y esa no es la única canción dedicada a Zidane. El siguiente es un buen tema, aunque un poco tonto y muy, muy divertido. También es la forma perfecta de cerrar la presente columna: estará metida en las mentes de ustedes durante todo el día. Lo sentimos mucho, pero aquí tienen a Vaudeville Smash con el fallecido comentarista Les Murray y su éxito "Zinedine Zidane".