Una de las primeras cosas que ha hecho la directiva encabezada por Laporta es conseguir un préstamo de 525 millones de euros
Barcelona alcanzó un principio de acuerdo con Messi, por lo que deberá presentar los números a LaLiga, que luego deberá verificar que el club no este incumpliendo su límite de gasto. Efectivamente, hay dos formas en que el Barcelona puede hacer suficiente espacio para registrar el nuevo contrato del argentino la próxima temporada: aumentando los ingresos y reduciendo la masa salarial.
Una de las primeras cosas que ha hecho la directiva encabezada por Laporta es conseguir un préstamo de Goldman Sachs por valor de 525 millones de euros. Ese dinero no se utilizará para pagarle a Messi su nuevo contrato, pero se utilizará, en parte, para reestructurar parte de la deuda del club. Los pagos a corto plazo serán reemplazados por pagos a más largo plazo, lo que significa que los pagos de la deuda no afectarán tanto al límite de gastos del club como lo harían para la siguiente campaña. El préstamo también se ha utilizado para pagar a los jugadores sus salarios retroactivos después de que acordaron aplazamientos en noviembre pasado.
El área principal donde el Barcelona puede dar cabida a inscribir a Messi -y esta es también una situación que aplica para los nuevos fichajes como Agüero, Depay, García y Emerson Royal aunque en menor medida- es a través del mercado de fichajes. El club ya ha traspasado a un puñado de jugadores marginales, incluidos el extremo estadounidense Konrad de la Fuente, Jean-Clair Todibo, Carles Alena y Junior Firpo, por unos 35 millones de euros. El salario de Francisco Trincao también se ha ahorrado con su cesión al Wolverhampton Wanderers, mientras que el club de la Premier League tiene la opción de fichar al extremo de forma permanente el próximo verano por unos 25 millones de euros.
Matheus Fernandes, mientras tanto, terminó su vínculo por correo electrónico. Un fichaje de 7 millones de euros del Palmeiras durante la era Bartomeu, que ahora ha regresado a su antiguo equipo, dijeron fuentes que el centrocampista brasileño está considerando demandar al club por la forma en la que rescindieron su contrato. Sin embargo, eso no es suficiente negocio. Tebas dice que por cada cuatro euros que ahorre el Barcelona, podrá invertir un euro. Ese seguirá siendo el caso hasta que se adhieran a su nuevo límite de gasto.
"Por ejemplo, si los jugadores que tiene el Barça en este momento, Agüero y otros, van a costar 50 millones de euros la próxima temporada, significa que hay que recortar 200 millones de euros en salario o en terminos de traspasos", dijo Tebas.
Podría reducirse a dos opciones. La opción más fácil, a nivel financiero, podría ser aceptar que Messi se vaya. El complicado recorrido, el que sigue Laporta, están abriendo las puertas a ofertas para la mayor parte de la plantilla en un intento por mantener a Messi como líder de un equipo emergente con jóvenes como Frenkie de Jong, Pedri y Ansu Fati.
La forma más rápida de ahorrar dinero es a través de Antoine Griezmann. Barcelona no podría aspirar a obtener los 120 millones de euros invertidos que hicieron por Griezmann en 2019 cuando llegó procedente del Atlético de Madrid, pero ahora es el jugador del club con el salario más alto. Según los informes, se embolsa alrededor de 30 millones de euros brutos anuales, con Messi ya no recibiendo un salario al ser jugador libre.
Fuentes del club no confirmaron si es tan simple como que Messi o Griezmann deban irse para que los números funcionen, pero sí dijeron que el Barça quiere que Messi se quede y que estarían abiertos a escuchar ofertas por Griezmann. Por su parte, el francés ha declarado públicamente que quiere seguir en el Camp Nou, pero fuentes cercanas al delantero francés admiten a ESPN que, si el Barça le pide salir, no vería con malos ojos regresar al Atlético de Madrid.
Mientras tanto, el Barça está luchando cuando se trata de los otros grandes ingresos. Las fuentes dijeron que esperan que las cosas se aceleren ahora que la Eurocopa 2020 y la Copa América han terminado, pero también admiten que está resultando difícil encontrar clubes dispuestos a asumir los salarios pagados a jugadores como Samuel Umtiti y Philippe Coutinho. Un agente le dijo a ESPN que todos los clubes de Europa saben lo "desesperado" que está el Barça. Umtiti gana alrededor de 12 millones de euros brutos y el Barça espera encontrar una cesión para el defensa francés. Por su parte, una fuente cercana a Coutinho, que gana alrededor de 20 millones de euros brutos, dijo que está dispuesto a salir si llega la oferta adecuada con el AC Milan interesado, pero el brasileño no juega desde diciembre por una lesión en la rodilla y eso complica cosas.
A Miralem Pjanic, que firmó el verano pasado procedente de la Juventus por 60 millones de euros como parte de un truco contable en el que Arthur Melo se marchó a la Juventus por 72 millones de euros, también se le ha dicho que saldría de la institución. Las fuentes le dijeron a ESPN que Pjanic está hablando con "grandes clubes" en Inglaterra, Italia, Francia y Alemania y está abierto a moverse, ya que apenas ha tenido minutos bajo Ronald Koeman. El portero suplente Neto y el delantero Martin Braithwaite también podrían marcharse.
El extremo Ousmane Dembélé se quedará por ahora después de lesionarse con Francia en la Eurocopa 2020, y una fuente cercana al defensa Clement Lenglet dijo que, como el lateral izquierdo Jordi Alba, no tiene intención de irse.
Mientras tanto, el Barça está suplicando a los jugadores que acepten recortes salariales. Lenglet, De Jong, Gerard Piqué y Marc-Andre ter Stegen firmaron nuevos acuerdos a fines de 2020 que fueron ajustables para ayudar al club a lidiar con su crisis financiera y la pandemia de COVID-19. El Barça espera que los canteranos Alba, Sergio Busquets y Sergi Roberto (el último tiene un contrato que expira en 2022) acepten condiciones similares.
También sobre la mesa está la posibilidad de vender una participación en Barca Corporate, una filial que alberga el proyecto Barca Academy, Barca Innovation Hub, Barca Licensing and Merchandising (BLM) y Barca Studios. Pero las fuentes admitieron que existen dudas sobre seguir esa opción porque vender derechos podría ser un caso de "pan para hoy, hambre mañana".