<
>

Suiza deja en evidencia las debilidades de Alemania que podrían terminar asediando a los anfitriones de la Eurocopa

FRANKFURT, Alemania – Ahora sabemos que Alemania tiene un Plan B, y se llama Niclas Füllkrug. Después de que el delantero de Borussia Dortmund marcó en el tiempo suplementario para lograr un empate 1-1 ante Suiza y dejar a los anfitriones de la Eurocopa 2024 del lado más beneficioso de la llave en la fase de eliminación, la gran duda con respecto al equipo de Julian Nagelsmann es si todavía pueden confiar en el Plan A.

El cabezazo de Füllkrug tras el centro de David Raum en el segundo minuto del alargue fue el caso de dos suplentes combinando para rescatar a Alemania de una derrota que los hubiese visto perder el primer lugar del Grupo A en manos de Suiza. Si eso hubiese sucedido, hubiesen encarado su viaje a Berlín para su partido de octavos el sábado, posiblemente ante los campeones reinantes italianos, y luego hubiesen tenido potenciales enfrentamientos contra Inglaterra y Francia antes de poder pensar a quién podrían terminar enfrentando en la final el 15 de julio.

Antes de arrancar la Eurocopa 2024, Nagelsmann comentó que tenía un " plan de emergencia" listo para activar cuando Alemania se encontrase en problemas. Con el tiempo del partido llegando a su fin, pareció que había hecho eso, pero el exentrenador de Bayern Munich dijo que Füllkrug simplemente hizo lo que se esperaba que hiciera.

"No usé este plan [de emergencia]", dijo Nagelsmann en la conferencia de prensa post partido. "Nuestros sustitutos eran obvios y anotamos el gol del empate.

"Hay momentos en los que realmente lo necesitamos [a Füllkrug] y él siempre logra los resultados esperados, pero nos ha proporcionado buenas razones para abrir y para entrar desde la banca. Esa es una suerte buena y mala para él, en realidad.

"Hemos corrido riesgos, pero si no corres riegos, no conseguirás nada. Nosotros nos arriesgamos y conseguimos un empate”, agregó.

Alemania y su futuro en la Eurocopa 2024

Al quedarse con el punto, Alemania ahora enfrentará al segundo del Grupo C en Dortmund y luego probablemente seguirá un choque con España en los cuartos de final, por lo cual, encabezar su grupo, sólo le dará un breve respiro antes de tener que enfrentar a un favorito. De todas maneras, el impulso es importante en un torneo internacional debido a la necesitad de disputar tantos partidos en un período tan corto de tiempo y el gol de Füllkrug aseguró que Alemania pudiese seguir avanzando con ímpetu.

Está bien, no lograron ganar en el Grupo A con un record 100% y tampoco lograron superar a sus vecinos por primera vez desde 2008, pero Füllkrug ha tipificado el espíritu de lucha de este conjunto alemán. Nagelsmann aprovechará esto lo próximos días mientras que comienza a planificar el camino hacia la final.

Viendo el lado positivo, el joven entrenador alemán apuntará a dos de sus suplentes capaces de producir un impacto decisivo. Hará hincapie en la profundidad de su escuadrón y en cómo su equipo ahora está en medio de una racha de siete partidos invictos después de terminar 2023 con cinco derrotas en ocho encuentros, incluyendo derrotas en casa ante Japón y Turquía.

Cuando revise su actuación contra Suiza con su staff, sin embargo, Nagelsmann tendrá algunas cuestiones por las cuales preocuparse ya que el equipo de Murat Yakin dejó al descubierto algunas debilidades de la alineación alemana y sugirió que los dos triunfos cómodos ante Escocia y Hungría dieron una falsa impresión de la verdadera fortaleza de los anfitriones.

Esta fue una noche en la que los jóvenes astros alemanes, Jamal Musiala y Florian Wirtz, no lograron doblegar al rival. Ambos fueron sustituidos en el minuto 76, con Alemania abajo y con Nagelsmann necesitando encontrar un nuevo camino hacia el gol, por lo cual, sumó a Füllkrug y Leroy Sané.

En la defensa, se jugó con la selección de Jonathan Tah y Antonio Rüdiger a pesar de que ambos se encontraban a una tarjeta amarilla de perderse el partido de octavos, y Nagelsmann vio a los delanteros suizos, Breel Embolo y Dan Ndoye, complicarles las cosas a sus hombres con su velocidad, fortaleza y movimiento.

Ndoye marcó el gol de Suiza en el primer tiempo cuando logró desmarcarse de Tah para disparar desde las 6 yardas, mientras que Embolo les dio a Rüdiger y Tah una noche llena de golpes debido a su tenacidad. Para cerrar una mala noche de los dos defensores alemanes, Tah sumó la falta que lo dejará fuera del próximo partido.

En el mediocampo, Toni Kroos e Ilkay Gündogan se vieron superados y dominados por los impresionantes Granit Xhaka y Remo Freuler.

Si no hubiese sido por el offside del minuto 84, cuando Ruben Vargas vio su definición anulada, Suiza hubiese sellado el triunfo y se hubiese asegurado el primer lugar independiente de la gran hazaña de Füllkrug al final del partido.

Los principales jugadores de Alemania no aparecieron --Kai Havertz fue otro de los jugadores que tuvo una noche frustrante-- pero a pesar del no-show colectivo, de todas maneras, se las arreglaron para sumar un punto y evitar la derrota. Algo que es realmente importante, porque la manera en la que termina un partido y cómo logran el resultado, puede significar que a veces los empates logran dar más confianza a los equipos que los triunfos.

Por ahora, al menos públicamente, Nagelsmann está enviando el mensaje que todo avanza según lo planeado.

"El punto es bien merecido porque hemos arriesgado mucho durante la última parte del partido”, dijo. "Fue un muy buen partido, nosotros hicimos nueve intentos al arco y ellos dos, por lo cual nuestra remontada fue bien merecida", concluyó.

Tal vez sí, pero Suiza mostró que Alemania no es tan fuerte como nos han hecho creer en los primeros dos partidos, y quizá Nagelsmann se pueda ver obligado a usar ese plan de emergencia antes de lo esperado.