Wiegman, doble campeona de Europa y finalista de la Copa del Mundo como entrenadora, tres veces seleccionada como Mejor Entrenadora Femenina de la FIFA y ganadora del Premio al Entrenador de la BBC como Personalidad Deportiva del Año del año pasado, volverá a estar en una final de Copa Mundial, como lo hiciera con Países Bajos
Wiegman, que desde niña se cortó el pelo muy corto para así entremezclarse en los partidos de fútbol con su hermano gemelo, se conviertió en la primera DT en ser finalista de un Mundial con dos selecciones: en los casi 100 años de historia de la Copa del Mundo masculina y femenina, ningún entrenador había podido llevar a dos naciones a la gran definición por el título.
Cuando Wiegman fue nombrada para suceder a Phil Neville como entrenadora hace casi exactamente tres años, la asociación de fútbol de Inglaterra la describió como "de acero y una ganadora".
Resultó ser la descripción perfecta. Ella dirigió a Inglaterra a la gloria europea el verano pasado en su tierra natal y ahora están su primera final de la Copa del Mundo.
Sarina, luego de ser asistente en el equipo neerlandés, tomó el timón de Países Bajos en 2017 y lo transformó rápidamente, ganando la Eurocopa de 2017 después de que ese mismo grupo ni siquiera saliera de la fase de grupos en el torneo anterior. A continuación, las llevó a la final de la Copa Mundial de 2019, que perdió con Estados Unidos, lo que igual le valió la construcción de una estatua en su honor. Luego, Países Bajos fue eliminado en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos por tiros penales (casualmente, otr vez contra la selección estadounidense ) y a partir de allí decidió culminar su ciclo y mudarse a Inglaterra.
Wiegman, que llegó a la Copa Mundial 2023 como doble campeona europea (títulos sucesivos con Holanda e Inglaterra) fue descripta como una persona familiar: amable, leal, dedicada y con los pies en la tierra. Sin embargo, hay otro lado de ella. “Puedes sentarte y tomar un café con ella y charlar sobre la familia”, dice la ex mediocampista inglesa ganadora de la Eurocopa Jill Scott, en un vasto perfil publicado en The Athletic. Y continúa explayándose la nota..."El lado más acerado de Wiegman era el mismo cuando era profesora de educación física en el Segbroek College de La Haya, en su Holanda natal. “Era estricta, pero los niños no le temían”, dice su amigo y ex colega Ted Bruggeling, sentado en su oficina en la escuela”.
El pasado 11 de abril, Inglaterra y Australia se midieron en Londres en un amistoso. Las campeonas de Europa llegaban como favoritas tras 30 encuentros sin perder. Porque desde que Sarina Wiegman tomó las riendas de la selección inglesa en septiembre de 2021, las Lionesses no habían perdido ni un sólo encuentro. Entonces se cruzaron Las Matildas.
Australia, en plena preparación para su Mundial, logró imponerse 0-2 con tantos de Kerr y Grant, y romper así el récord de la entrenadora neerlandesa al frente de Inglaterra. De hecho, a día de hoy es la única derrota de las inglesas con ella en el banquillo en los 37 encuentros que ha dirigido. Este miércoles se tomó la revancha.
En la Eurocopa del verano pasado, Wiegman no hizo ni un solo cambio en su equipo inicial durante seis partidos seguidos. Sin embargo, a diferencia de la Eurocopa, donde todo transcurrió sin problemas, esta Copa del Mundo tuvo algunos imprevistos en el camino. Las lesiones de Beth Mead, Fran Kirby y Leah Williamson antes del torneo, dudas sobre el estado físico de Millie Bright, la lesión de Keira Walsh y la tarjeta roja de Lauren James contra Nigeria.
Wiegman tuvo que adaptarse, y lo hizo, sobre todo para el partido de la fase de grupos de China cuando sacó a Ella Toone y cambió su formación habitual de 4-2-3-1 a un 3-5-2. Incluso cuando James fue expulsada, Inglaterra tenía un plan simple pero efectivo, pasando a un 4-4-1, y mantuvo la tensión para imponerse en la tanda de penales.
La mediocampista Georgia Stanway describió cómo Wiegman había fomentado un ambiente familiar en la Copa del Mundo que permite que el equipo de Inglaterra prospere y al mismo tiempo se relaje cuando lo necesite.Eso incluye permitir que los jugadores tengan a sus familias con ellos, en lugar de aislar al equipo.
Pero incluso para sus jugadores, hay algo en Wiegman que es casi de otro mundo."Todos tenemos familias aquí, incluso Sarina", dijo Stanway.
Cuando un reportero le pidió que aclarara qué quería decir con "incluso Sarina", Stanway miró un poco tímidamente a su entrenador sentado a su lado y se rió. "A veces no te das cuenta de que tu entrenador en jefe es en realidad humano", dijo.
Wiegman tiene un contrato con las Leonas hasta 2025, pero ya hubo rumores que Estados Unidos la querrí sentada en su banquillo para recomponer la vieja hegemonía en el fútbol femenino.
"Vamos a prepararnos para España. Queremos ganar la final"
(EFE) La seleccionadora de Inglaterra, Sarina Wiegman, afirmó este miércoles, tras la clasificación de su equipo para la final del Mundial femenino de fútbol al vencer a la anfitriona Australia (3-1), que empezarán a prepararse este jueves para enfrentar a España, y que desean ganar la final.
"Estoy muy orgullosa del equipo. Es increíble la forma como se ha adaptado en todo momento, antes del torneo, durante el torneo y en este partido (frente a Australia). Cómo salimos adelante y encontramos la manera de ganar. Mañana vamos a prepararnos para España. Queremos ganar la final", dijo.
La entrenadora de origen neerlandesa, aprovechó para destacar la evolución de su combinado desde la Eurocopa: "Este equipo siempre se ha exigido más a si mismo. Las ganas de ganar partidos son muchísimas. Han cambiado muchas cosas. Las expectativas de Inglaterra han sido altas todo el tiempo, pero después de ganar la Eurocopa subieron. La propia vida de las jugadoras cambió mucho".
"Hemos visto que podemos adaptarnos a situaciones en las que nunca habíamos estado y que las jugadoras pueden trasladar muy bien al campo lo que queremos hacer, y eso se consigue con experiencia y mucha inteligencia. Seguimos creciendo y mejorando", expresó Wiegman con orgullo.