Chile cayó 3-1 contra Uruguay en Montevideo en la primera fecha de la Eliminatoria. Dio ventajas desde lo físico, tuvo poca reacción para recuperar la pelota y la pasó mal cuando lo atacaron por la derecha. La solidez de Colombia puede afectarlo en casa.
El debut fue desolador. La celeste le pasó por encima. El descuento de Arturo Vidal para disimular la goleada en el estadio Centenario fue apenas un accidente desafortunado en el área. La superioridad de fútbol mereció más ventaja en el resultado.
El próximo rival de la la Selección dejó una floja impresión en ese arranque del torneo. Se sostiene en los referentes Gary Medel, Erick Pulgar, Charles Aranguiz y Vidal; bajos de nivel y sin respuestas físicas fueron superados por la intensidad de los mediocampistas uruguayos.
Perdió la pelota por la presión en diferentes zonas de la cancha e hizo poco por recuperarla. Nicolás De La Cruz y Federico Valverde se impusieron ante tanta fragilidad de Aranguiz y Pulgar. Avanzaron con balón o filtraron pases para habilitar a Darwin Núñez.
Cuando fueron interiores llegaron fácil a los centrales en el área. Guillermo Maripán quedó expuesto en el primer gol. Núñez complementó la pared sin marca y habilitó a De La Cruz que desde atrás apareció para anotar.
Medel intentó recomponer el desorden con oficio. Fue insuficiente. Las constantes pérdidas en salida de Aranguiz por su costado dejaron descompensada el lateral y tuvo que cerrar de urgencia en el lateral, también descuidado por Gabriel Suazo.
Colombia tiene fortaleza por las bandas con Luis Díaz y Jhon Arias. El segundo tiempo contra Venezuela dejó claro que el atacante de Fluminense debe ir abierto por la derecha. Será importante para lastimar ese sector como lo hicieron los uruguayos.
También tiene volantes con presencia física para ayudar con la presión en bloque. Jefferson Lerma es especialista en recuperar y acompañar por carril central. Matheus Uribe también tiene salida para hacer superioridad. Los interiores fueron protagonistas en la victoria en Barranquilla.
La aplicación de Rafa Borré para apretar arriba puede complicar esa defensa. Núñez los minimizó por sus movimientos y su control de pelota para atraer compañía. El barranquillero lo hace la perfección. Presiona, incomoda, fija marcas y además, viene con gol.