Durante la última media hora, Colombia jugó con el capitán James y Juan Fernando Quintero juntos ante Ecuador. Terminó tirando centros desesperados en Barranquilla.
Con el resultado en llamas, el técnico Néstor Lorenzo se animó con los dos cracks al tiempo. La urgencia en el Metropolitano motivó ese experimento para intentar solucionar con la pelota lo que gobernaba el desespero.
Quintero entró a los 58' por Jhon Arias. Se ubicó por la zona en que juega en Racing tirado por la derecha, con 10 más centralizado. También hubo doble nueve con Jhon Durán compañero del nervioso pero voluntarioso Jhon Córdoba.
Colombia aumentó la posesión al 67 por ciento con ellos dos. Sin embargo, pocas veces pudo conectarlos. El capitán sintió el rigor de la marca atlética de Ecuador. El antioqueño falló en controles fáciles que complicaron la continuidad de su intención ofensiva.
Desde el costado, JuanFer lanzó centros para Durán, incómodo por la fortaleza física de los defensores. El delantero apenas ganó uno de los tres duelos aéreos. Intentó con cambios de orientación a Johan Mojica o Luis Díaz, contenidos por el orden del rival.
Buscó con algunos pases de su estilo. Dio cuatro en el último tercio. En el final, sus lanzamientos al área perdieron efecto y precisión.
James compensó su merma física con chispazos de su técnica que animó al equipo en el primer tiempo. Le faltó más apoyo de otros volantes. Fue de los pocos que propuso con ideas entre la desesperación. Hasta fue de nueve a cabecear. El DT reivindicó su partido.
“James hizo un buen partido. Jugamos en el último cuarto del campo en el área de ellos todo el segundo tiempo y fue el jugador más preciso tanto centrando como filtrando pases y estoy contento y conforme del partido que hizo. Mientras él estuviera para correr ese espacio del campo, lo mantuve hasta el final igual que a 'Lucho' y a Portilla que hizo un gran partido. Vi bien a James y estoy conforme con su rendimiento”, explicó.
La desesperación nubló a Colombia y perdió la oportunidad de reaccionar a partir del talento. No funcionó la prueba.