El defensa brasileño Leonardo Coelho, que dejó Peñarol para fichar por Amazonas de Brasil, reveló que jamás imaginó el dolor que le provocó la partida de los aurinegros, lo que vivió cuando tomó la decisión de pasar de un grande al otro, y recordó a Juan Izquierdo.
En una nota con el programa La mañana del fútbol de El Espectador, Coelho comenzó diciendo: “Yo no sabía pero extrañaba mucho a mi país. Las costumbres, el clima, la música, hacía seis años que había salido de Brasil. Me sentí muy bien en el debut (en Amazonas), en un partido difícil porque el equipo no había ganado de visita y pudimos ganar en la hora. Me pareció más difícil jugar con la pelota porque vengo de Peñarol donde los equipos te respetan, no te presionan tanto, y acá es al revés. Me costó un poco entrar en el partido, pero en la marca fue más fácil porque en Uruguay es un juego más directo, los delanteros te chocan, son de contacto y acá no”.
El dolor de la partida
Coelho contó los motivos que lo llevaron a tomar la decisión de dejar Peñarol.
“Fue algo difícil, fue algo que desde hace un tiempo venía sintiendo que era necesario. En diciembre se terminaba mi contrato, jugué la primera parte del año, pero en el Intermedio dejé de jugar y hablé con mi representante que era el momento justo para salir porque de junio a diciembre iba a jugar pocos partidos y después para negociar iba a ser más difícil. Estaba tranquilo, pero cuando llegó el momento de salir fue muy difícil”.
El zaguero explicó: “¿Por qué fue difícil? Porque soy agradecido a Uruguay, un país divino, mi familia sigue ahí. Peñarol me dio todo, pero se terminó el ciclo en Uruguay. Cuando terminó el partido con Racing, por la Copa (CONMEBOL Libertadores) y llegó el momento de irme, viví sensaciones que son difíciles de explicar”.
Consultado sobre si terminó siendo hincha de Peñarol, el defensa respondió: “Sí, tengo un sentimiento, fueron dos años y medio viviendo muchas cosas lindas, sufriendo, entrenando, el sentimiento de los hinchas que me apoyaron. Fue el equipo en el que estuve más tiempo y me quedó ese sentimiento”.
Los problemas en la calle
Coelho habló de lo que significó pasar de Nacional a Peñarol y las situaciones que le tocó vivir en la vida cotidiana.
“Quien conoce mi historia sabe que yo llegué a Fénix a prueba, que venía de un momento muy malo en el fútbol y recién cuando fui a México empecé a hacer una diferencia económica. Mi mayor compromiso es con mi familia y entendí que luego del año en Nacional tenía que aprovechar para asegurar el futuro de mis hijos. Fue una decisión muy difícil, pero fue la mejor que pude tomar para cuidar de mi familia”, comenzó diciendo el jugador.
Sobre la diferencia económica que hizo al pasar de un grande a otro, el brasileño comentó: “Existía la posibilidad de renovar con Nacional, pero me ofrecían dos años de contrato y Peñarol tres. Parece chica pero mensualmente hace tremenda diferencia. Y yo no podía pensar en lo que quería personalmente sino por mi familia”.
Coelho reconoció que en determinado momento no quería salir a la calle para evitar problemas: “Hubo momentos en que no salía de casa, mi esposa quería salir a una plaza con los niños y yo no quería salir para evitar pasar por situaciones feas. Siempre que salía me tenía que estar cuidando, mirando, era incómodo. Siempre tenía que estar atento y eso está mal”.
Sobre su pasaje por los tricolores, el zaguero brasileño dijo: “Nacional me dejó que fue mi mejor año en lo personal, compartí con buenos compañeros, la experiencia de jugar con (Luis) Suárez, salir campeón Uruguayo. Hoy soy hincha de Peñarol, pero no puedo decir que no tengo cariño por Nacional y su gente. A pesar de todo lo que pasó, que muchos dirigentes salieron a decir cosas, de los hinchas que me amenazaron o me decían cosas en la calle, yo sé lo que viví, por qué lo hice, y el cariño que tengo por Nacional”.
El dolor por Juan Izquierdo
En la nota, Coelho fue consultado por la pérdida de Juan Izquierdo con quien compartió un tiempo en Nacional y en San Luis de México.
“Juan sufrió mucho ese año que estuvimos juntos en Nacional porque tuvo una fractura y me acuerdo que tardó cuatro meses para recuperarse, y como no se quería operar, se perdió todo el año. Luego tuvo la revancha porque salió campeón con Liverpool y volvió a Nacional. La verdad que me tocó mucho (el fallecimiento)”.
Coelho narró lo que pasó la noche en la que Izquierdo se desvaneció en la cancha: “Fue raro porque, claro, uno en Peñarol disfruta cuando las cosas en Nacional salen mal y Nacional disfruta cuando salen mal en Peñarol. Justo Nacional pierde en San Pablo y yo público algo porque no sabía la situación de Juan. Y cuando me enteré, borré. No tenía idea de lo que había pasado. Me tocó muy profundamente y comenté con mi esposa que todo es muy rápido… una persona joven, con hijos, fue un golpe duro. Por eso hay que valorar la vida, porque no sabemos lo que puede pasar mañana”.
El problema con Javier Méndez
Leo Coelho terminó la nota haciendo referencia al audio, que se filtró y se hizo viral, donde criticaba a su compañero Javier Méndez.
“Fue algo muy ingrato, fue el día después de un partido y hablando con una persona de confianza. Lo sufrí mucho porque soy una persona de bien y sentí vergüenza de la situación”.
El defensa narró cómo se manejó el tema a nivel interno en el plantel aurinegro diciendo: “Yo me enteré de noche y lo primero que hice fue llamar a Camilo Mayada, con quien tengo buena relación, y le dije, mirá pasó esto, ¿qué hago? Luego le mandé un mensaje al capitán Maxi Olivera y le dije pasó esto y mañana quiero hablar con todos los compañeros en el vestuario antes del entrenamiento. Y fue lo que pasó, hablaron los referentes diciendo que nos teníamos que cuidar, y luego le pedí disculpas a Méndez, que en ese momento dijo no sé y no las aceptó. Yo lo entendí como algo normal por la calentura, pero quedó en eso, fueron dos días -porque luego de la charla tuvimos libre- y luego no pasó nada. Fue un señor, un crack, y a partir de ahí pude ver a otro Javier Méndez, un hombre con valores, un capitán para el equipo. Me perdonó y cuando me fui del club lo saludé y le dije que estaba muy contento por su momento”.