El "Cebolla" Cristian Rodríguez habló este domingo sobre su salida de Peñarol y aseguró que le hubiera gustado irse mostrando otra imagen. En declaraciones al programa Polideportivo, el excapitán carbonero repasó las charlas con el presidente Ignacio Ruglio, les dejó un mensaje a los hinchas aurinegros y afirmó que seguirá jugando en Uruguay.
Mientras disfruta de un fin de semana libre en Flores junto con su familia y con la familia de Gonzalo "Chory" Castro (ambos bromearon con que jugarían juntos en el club Porongos de ese departamento), el Cebolla confesó que aún no sabe en qué equipo jugará y que tampoco tiene claro porqué Peñarol demoró en anunciar oficialmente su salida.
“No sé porqué se estiró la decisión, capaz querían una despedida diferente. Finalmente tuve que salir y seguir mi camino; yo quería por lo menos jugar el Torneo Apertura y demostrar otra cosa e imagen, pero es muy difícil mantenerse en un equipo cuando no se sale campeón”, aseguró.
El excapitán del Mirasol comentó que en su última charla con Ruglio le manifestó al dirigente que su idea era quedarse tres meses en Peñarol y que el club abonara únicamente los gastos mínimos personales, sin ninguna ganancia para el futbolista: “Ruglio me decía firmemente que mi ciclo ya estaba terminado, que era una decisión de la mayoría de los directivos y uno debe aceptarlo. Se me terminó el contrato y acepté la decisión, obviamente no estoy contento, no me tocó irme de una buena manera y lamentablemente tiene que ser así y debo aceptarlo”, dijo el futbolista.
Y agregó: “Fue una decisión de los dirigentes, no de todos. Algunos dirigentes me dijeron que no estaban de acuerdo con mi salida. Pablo Bengoechea no me llamó en ningún momento, Gabriel Cedrés sí está hablando todo el tiempo conmigo y eso lo aprecio. Tal vez Bengoechea por ahí está esperando el momento para llamarme, que pase todo esto y seguramente se comunique más adelante”.
El Cebolla remarcó en la entrevista que no quería irse de esta forma, sino que pretendía que su fin en Peñarol fuese con más minutos en cancha y jugando de mejor manera: “Uno quiere irse con gente en las tribunas y bien visto, lamentablemente no se me dio por un tema de lesiones que me jugaron en contra pero yo solo quería que al club le vaya bien”.
El jugador de 35 años destacó que siempre fue positivo e intentó ayudar al club y a sus compañeros "por ahí no estando al 100%". Y aseguró: “Yo voy a seguir jugando, quiero demostrar que todavía estoy para jugar”.
El futbolista indicó: “Peñarol es un mundo aparte, empatar es como perder. Y las lesiones generan muchas dudas, dolores musculares, muchas veces fui al banco con algún problemita físico y eso me jugaba en contra, no tener la tranquilidad de ponerme bien físicamente no me ayudó, siempre tenía algún problema en el gemelo pero quería estar y apoyar en todo momento. Todavía no sé qué va a pasar, hoy estoy en el campo, me vine con la familia lejos de todo, lejos del ruido; la semana que viene me voy a poner ya en campaña para encontrar equipo, me han llamado algunos clubes. Agradezco a todos mis compañeros que me mandaron mensajes de apoyo, al igual que todos los funcionarios de Los Aromos; vamos a seguir jugando un tiempito más”.
Respecto a su futuro, el Cebolla señaló: “No manejo la idea de irme a otro país, mi familia no quiere que me vaya. El que me llama todos los días es el ‘Lolo’ Estoyanoff para que vaya a Fénix, pero por ahora del club no me ha llamado nadie”.
El ex PSG, Benfica, Porto, Atlético de Madrid, Parma, Gremio e Independiente, calificó al Lolo "como un hermano" y consultado sobre la fuerte personalidad que tiene Juan Ramón Carrasco, DT de Fénix, respondió: “A Carrasco ya lo tuve (en la Selección), es complicado pero somos gente grande y nos podemos entender bien”.
El futbolista se manifestó muy satisfecho y agradecido por la carrera profesional que ha realizado hasta el momento, y volvió a enfocarse en Peñarol, club del que se marchó en el 2005 siendo declarado en rebeldía junto a Joe Bizera y Carlos Bueno, y al cual regresó en el 2017: “Cuando vine a Peñarol me miraban diferente y pude cambiar eso, ganando clásicos y campeonatos”, dijo.
Y aseguró: “Hay mucha gente que te quiere y otra que no te quiere tanto, es obvio que cuando se gana las cosas malas no se ven, y que cuando ya no ganas se ve todo mal y te tienen que cambiar. Obviamente no estoy contento por lo que pasó en estos últimos años porque a mí me gusta ganar en todo, lamentablemente no me voy con esa buena imagen que quería, no se pudo dar, quería estar estos tres meses donde por lo menos podría jugar más minutos, no se pudo dar y a seguir mi camino”.
Tras el bicampeonato conseguido en 2017 y 2018, siendo una pieza permanente y clave del equipo, el Cebolla tuvo menos participación en las últimas dos temporadas, donde además Nacional se impuso ganando ambos campeonatos uruguayos.
El Cebolla consideró que puede ser arriesgado para Peñarol tratar de evitar un tricampeonato tricolor sin tantos jugadores referentes, pero destacó que aún no se cerró el período de pases e indicó que tal vez la dirigencia mirasol pueda incorporar a algún futbolista con experiencia en los próximos días.
Respecto al trabajo del entrenador Mauricio Larriera, Rodríguez sostuvo: “Tiempo por ahí le falta, viene trabajando muy bien y le gusta trabajar mucho. En Peñarol siempre se manejó por resultados, si trabajas divino pero no ganas al tercer partido te están echando; si ganas las cosas malas no se ven, pero si perdés se empiezan a buscar peros y se hacen cambios”.
Por último, el volante le dejó unas palabras a la hinchada aurinegra: “(Es un mensaje) de agradecimiento por el apoyo de siempre conmigo, por ahí hay algunos hinchas del resultado, pero la mayoría siempre estuvieron conmigo apoyándome en los buenos y malos momentos. Que me disculpen por la última etapa que no fue tan buena, sin poder ganar este campeonato que todos queríamos ganar porque llevaba el nombre del capitán de capitanes (Néstor Gonçalves), lo siento por eso. Siempre voy a estar con ellos para lo que necesiten”.