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Terrassa, esa ciudad que vio brillar al hockey argentino por primera vez

El 18 de julio de 1993, el seleccionado femenino sub 21 comandado por Rodolfo "Chiche" Mendoza asistió a España, más precisamente a Terrassa, para participar de la quinta edición de la Copa del Mundo de la categoría. Allí sembraron la semilla que floreció, finalmente, siete años después, en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 con la obtención de la medalla de plata y el nacimiento de Las Leonas.

Hubo un tiempo en el que el hockey argentino no era lo que es hoy. Y hubo un tiempo en el que un puñado de 16 jugadoras hicieron realidad un sueño y comenzaron a gestar la ya reconocida mística de Leonas. Casi sin pensarlo, colocaron a la Argentina en la cima del mundo. Y ese fue solo un indicio y un inicio de lo que vendría años después.

Y no fue casualidad que cinco jugadoras dijeran presente en ambas competencias. Magdalena Aicega, Vanina Oneto, Anabel Gambero, Ayelén Stepnik y María Paz Ferrari estuvieron en Sydney, pero también fueron artífices del primer título del mundo para el país en la disciplina, junto a Sofía Mac Kenzie, Mariana Arnal, Jorgelina Bertoni, Gabriela Borio, Ximena Camardon, Julieta Castellan, María Paula Castelli, Silvia Corvalan, María Grandoli, Laura Perrone y Silvia Previgliano. Allí nació todo, con una sólida victoria en la final ante Australia por 2 a 1. Fue el primer título del mundo.

Casi tres décadas después, Las Leonas dirán presente en las mismas tierras, porque Terrassa será una de las sedes (la otra será Amstelveen) de la Copa del Mundo que se desarrollará del 1° al 17 de julio. Casualidad o causalidad, las dirigidas por Fernando Ferrara buscarán volver a hacer historia, respirar la esencia que quedó impregnada hace 29 años y, por qué no, repetir los títulos conseguidos en Perth 2002 y Rosario 2010.