Pasó apenas un mes desde que Noel Barrionuevo anunció su retiro de Las Leonas. Rápidamente cambió las tartaneras por grampones, el palo por la piqueta, y emprendió una misión solidaria impulsada por la ONG Puentes de Luz. ¿El objetivo? Alcanzar el pico del volcán Lanín en San Martín de los Andes. En la previa, la ex defensora argentina había anticipado el miedo de no hacer cumbre.
No fue un ascenso habitual. El grupo, que estuvo encabezado por Miguel Manriquez, atleta ciego y abanderado de la expedición "Volcán de Superación", concretó su cometido en apenas 13 horas, sin pernoctar.
Ya en tierra firme, después de haber logrado superar los 3776 metros, y en diálogo con ESPN.com, expresó que a pesar de los miedos que la acompañaron durante la travesía "fue un logro personal importante. Llegar a la cumbre fue algo increíble y enriquecedor porque sos una miniatura en medio de una inmensidad de la naturaleza. Faltando 100 metros me largué a llorar de la emoción al ver cómo Miguel llegaba pese a sus dificultades".
Ni el título mundial de Rosario 2010 como así tampoco las tres medallas olímpicas que tiene en su haber -entre otros logros- servirán como punto de comparación, ya que aseguró que es diferente a un logro deportivo en conjunto donde detrás hay todo un equipo. Sin embargo, sus casi 15 años de experiencia en el alto rendimiento le ayudaron a sortear las adversidades en las alturas, sobre todo las emocionales. "Estar en la montaña es un desafío interno y personal donde necesitás mucha cabeza. Mi entrenamiento con el seleccionado me permitió tener la fortaleza mental para no abandonar; el objetivo era llegar como sea", afirmó.
Con las emociones, todavía a flor de piel, no descartó volver a repetir la misión y por qué no, compartirla con sus seres queridos. Colgó el palo, pero... ¿encontró un nuevo pasatiempo?