Los dos errores consecutivos le pasaron factura a Jorge Martín y empeñaron su deseo de ser campeón de MotoGP. En Indonesia, fecha 15, el español dominaba con absoluta claridad la carrera principal (ya había ganado en sprint) y se iba con un colchón de puntos en la cima del Mundial. Pero increíblemente cometió un yerro y terminó el piso. Una semana después, en Phillip Island, lideraba cómodamente, pero falló en la elección del neumático trasero (puso blando), en concordancia con su escuadra, la apuesta no aguantó y el éxito casi firmado se convirtió en un quinto puesto final con sabor muy amargo. Los dos fallos encadenados dejaron a Pecco Bagnaia, campeón reinante, con 27 unidades de ventaja sobre el madrileño. Así llegaron a Tailandia, 17ª fecha que se vive por Star+. Para Martinator el margen se acortó tremendamente, teniendo en cuenta que apenas quedan cuatro citas para el cierre (148 unidades en disputa). Y el arranque fue netamente favorable al lograr la pole position.
El español se aseguró así partir en punta, tanto en el sprint como en la competencia principal. Ahora bien, para Martín no hay un mañana, deberá acertar en todo. No podrá cometer errores conductivos ni de estrategia, porque el panorama parece alentador al tener a Pecco en el sexto lugar. Pero si hay un rubro en el que el turinés se destaca es en el ritmo de carrera y a en eso se apoya.
“Es importante esta clasificación quedar adelante. Pude hacer una muy buena vuelta”, dijo Martín tras su cuarta pole position de la temporada. En la previa aseguró que no quiere obsesionarse con el título, pero, claro, lo quiere. Para eso no hay más lugar para errores.
El español picará en punta, con Luca Marini y Aleix Espargaró completando la primera fila. Bagnaia cerrará la segunda línea, detrás de Marco Bezzecchi y Brad Binder. El espectáculo está asegurado.