El Tiburón de Mazarrón partirá en punta en el sprint y la carrera principal de la 16ª fecha del Mundial. El bicampeón ocupará el segundo cajón y Jorge Martín deberá remar, y mucho. La bronca, para Marc Márquez.
Una montaña rusa de emociones fue la clasificación del GP de Japón, 16ª fecha del de MotoGP. El paneo de cámara mostraba caras en todos los estados. Intensamente, la película de Disney, se apoderó del paddock del Mundial. Por ahí andaba Alegría, más allá estaba Furia, un poco más acá Tristeza… No faltó nadie a la cita. Alegría era la que tenía Pedro Acosta; ¡y cómo para no tenerla! El Tiburón de Mazarrón se quedó con la pole position, su primera en la categoría mayor.
“Estoy muy feliz. No alcancé a ver que estaba primero. Hicimos algunos cambios y estamos en el camino que pretendemos”, dijo el actual campeón de Moto2 después de estrecharse en abrazos interminables con cada integrante del equipo que se cruzaba. Logró la pole con 1m43s018, nuevo récord del trazado japonés.
¿Y Furia? Marc Márquez. El español había logrado un tiempo memorable para quedarse con la pole en Motegi. Había destrozado los relojes: a 2m30s para el final de la clasificación consiguió un impactante 1m42s868. En el equipo Gresini estaban listo para la celebración, pero cuando el reloj llegó a cero, ¡le cancelaron la vuelta! El catalán se excedió del límite de pista y le sacaron la marca. El primer cajón de partida se convirtió en noveno y Marc se recluyó en su box. El agua que tomaba era para apagar el fuego interno de la bronca. No tuvo más tiempo para intentar algo más.
Por ahí había alguien más con una mesurada alegría: Pecco Bagnaia. El bicampeón se metió segundo en la clasificación y firmó un negocio genial para el resto del fin de semana. La batalla del italiano no es con Acosta, es con Jorge Martín. Y el madrileño fue Tristeza en la clasificación. Porque nunca encontró el ritmo para poder cerrar un buen giro y, para colmo, ¡se fue al suelo! Ya no le quedaba margen para ir a su box a buscar la otra GP24 del Pramac, el tiempo se había consumido. El líder del Mundial deberá remontar desde el 11º lugar en ambas competencias.
El mal ajeno le dio más alegría a Bagnaia. El representante del equipo Ducati de fábrica llegó a Japón a 21 puntos de Martín y con un panorama complicado. Pero todo puede revertirse en Japón. “Es muy importante esto. Al principio estaba húmedo y pensé que había algo malo en la moto. Paré en boxes y vi que estaba todo bien. Perdí la última vuelta por muy poco, pero sabemos que hay una muy buena oportunidad para el sprint y la carrera para seguir sumando puntos”, dijo el italiano.
Eso sí, el personaje que no apareció fue Aburrimiento. Porque de eso, nada, en la emotiva clasificación de Japón. Habrá que ver si los protagonistas de Intensamente cambian de intérprete en el resto del fin de semana.