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Nalbandian perdió con Nadal

MIAMI -- Fue un gran choque y quedó en manos del español. Es que el argentino David Nalbandian empezó muy bien, pero se diluyó y terminó siendo presa de la mayor regularidad de Rafael Nadal en la tercera rueda del Masters 1000 de Miami, en el choque estelar de la jornada dominical.

Nalbandian, invitado especial, perdió 6-7 (8-10), 6-2 y 6-2 con Nadal, el cuarto cabeza de serie, y así se despidió de este tradicional certamen estadounidense, que reparte 3.645.000 dólares en premios y se desarrolla en las canchas de cemento del Crandon Park de Key Biscayne.

El argentino, operado hace 10 meses de la cadera, reapareció hace poco más de un mes en el circuito de la ATP y esta vez no pudo vencer al aguerrido y sólido español.

Ahora ubicado en el 161° puesto del ránking internacional, Nalbandian subirá algunas posiciones tras sus dos victorias en Miami. Y se ilusionaba con derrotar a Nadal, luego de reconocer que el español, N° 4 del mundo y ex rey, "no está en su mejor nivel".

El encuentro comenzó muy parejo y el argentino, con mejor pulso, arriesgando con su gran revés de dos manos, logró adjudicarse el set inicial. Lo definió tras estar casi siempre arriba en el tie-break, con la salvedad de que debió levantar un set-point.

En el arranque del segundo set, la cara de Nadal era de desesperación. Su primer servicio no entraba, las dobles faltas, hasta tres, se sucedían, y la derecha no funcionaba cometiendo demasiados errores no forzados.

Nalbandian seguía llevando las riendas del encuentro, con grandes tiros y definiciones oportunas y vistosas en la red, a pesar de que todavía se le nota falta de ritmo en la más alta competencia internacional, producto de su inactividad y de que sólo jugó siete partidos desde la citada operación.

El momento clave llegó en el quinto juego del segundo parcial, cuando Nalbandian dispuso de dos puntos de rotura, con el zurdo sacando 15-40. Nadal ya parecía estar pensando en la arcilla de Monte-Carlo, en la siguiente gira, pero su mentalidad ganadora surgió como un rayo, al ganar ese game y crecer mentalmente.

Y no sólo abortó esas posibilidades de quiebre del argentino, sino que embolsó cuatro juegos seguidos, a la vez que se empezó a notar cierto desgaste físico y mental de Nalbandian, quien nunca más volvió a entrar en el partido, porque el tercer set se decantó en favor del español en el cuarto juego (quebró y se puso 3-1).

Nadal, con su gran defensa, forzó en los dos últimos sets al argentino a que se equivocara pegando de derecha y evitando que no golpeara con su genial revés. Así fue inclinando la balanza en su favor.

Los 48 errores no forzados de Nalbandian terminaron siendo su cruz. Y salvaron a Nadal, que a pesar de que no logró colocar su primer saque con regularidad, sí mostró mejor condición física y anímica para sentenciar el partido, en un total de dos horas y 25 minutos.

Con la presencia de Gabriela Sabatini en las tribunas, el partido se le esfumó entonces al argentino, ex 3° del ránking, que se quedó con las manos vacías. Pero es consciente de que tiene nivel para dar pelea contra los mejores y de hecho dio cátedra en varios pasajes, con destellos de su gran calidad. Su punto a mejorar es sin dudas el físico, para poder resistir más en partidos extensos.

Nalbandian aventajaba 2-1 a Nadal en los enfrentamientos personales, al haberlo superado en los dos primeros partidos. El argentino se impuso en 2007 en los cuartos de Madrid y en la final de París, en ambos casos en dos sets, con facilidad, sobre canchas rápidas y bajo techo.

Hace un año, en los octavos de final de Indian Wells, sobre cemento, el argentino no aprovechó cinco match-points en el segundo parcial y terminó perdiendo 6-0 en el tercer set con el español. Luego el europeo avanzó en los cuartos de Barcelona, en arcilla, por la baja por lesión de Nalbandian.

De esta manera, Nadal evitó ser el tercero de los cuatro primeros favoritos en quedar eliminado en tres días consecutivos. El viernes perdió el serbio Novak Djokovic, el segundo preclasificado y finalista aquí hace un año, y el sábado se marchó el escocés Andy Murray, el tercero, que además era el defensor del título.

El rival de Nadal en los octavos de final será su compatriota David Ferrer (15°), quien superó al gigante croata Ivo Karlovic (24°), el hombre récord en cantidad de aces, por 7-6 (7-5) y 6-3, en una hora y 26 minutos de juego.

Ferrer se sobrepuso a los 10 saques directos del cañonero Karlovic y, a base de buenas devoluciones y una gran movilidad, sacó el partido adelante sin ceder por su parte un solo punto de rotura.

La clave del español fue resolver el desempate a su favor, y ahí cimentó luego su victoria, la segunda que consigue sobre Karlovic, a quien también venció en 2007 en el torneo de Tokio, también sin ceder un set. Así, por lo tanto, se aseguró la presencia de un jugador español en los cuartos de final.

Otro español sigue adelante en Miami, ya que Nicolás Almagro (33° preclasificado) venció al francés Jeremy Chardy, tras desaprovechar algunas pelotas para el partido en el segundo set, con parciales de 6-2, 6-7 (9-11) y 6-3.

En el sector inferior del cuadro, el brasileño Thomaz Bellucci (27° cabeza de serie) eliminó al belga Olivier Rochus, el verdugo de Djokovic, por 6-3 y 6-4. Y aguarda por Almagro en octavos de final.

Así, Bellucci, el N° 32 del mundo, de 22 años, logró su mejor actuación en un certamen Masters 1000, la categoría inmediata a los Grand Slam. Hace recién un año y medio que este zurdo que reside en San Pablo empezó a disputar esta clase de campeonatos.

El que sorprendió en parte fue el alemán Benjamin Becker, que se recuperó tras un mal comienzo y finalmente dejó afuera de carrera al español Tommy Robredo (18°) al ganarle por 1-6, 6-4 y 7-6 (7-1).

El ídolo local Andy Roddick, sexto favorito, derrotó al ucraniano Sergey Stakhovsky por 6-2 y 6-1 y será el rival de Becker en los octavos de Miami.

También avanzó con una clara victoria el francés Jo-Wilfried Tsonga (8°), al vencer al alemán Philipp Kohlschreiber (28°) por 6-2 y 7-5. Y su próximo adversario será el español Juan Carlos Ferrero (12°), que superó al local John Isner (17°) por 6-2, 3-6 y 6-3.

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