PHILADELPHIA -- LeSean McCoy lideró a la NFL por tierra con 1,607 yardas.
Nick Foles lanzó 27 touchdowns contra solamente dos intercepciones.
Pero ni McCoy, ni Foles, probablemente hubieran conseguido esos números para los Philadelphia Eagles sin una fuerte línea ofensiva, anclada por el centro Jason Kelce.
Jason Peters, Todd Herremans, Evan Mathis y Lane Johnson recibieron bastantes halagos la temporada pasada, pero Kelce fue el pegamento de la línea ofensiva.
"Este jugador, en mi opinión, es el jugador más subvalorado aquí", dijo el entrenador de línea ofensiva, Jeff Stoutland, al Philadelphia Inquirer. "Nuestros jugadores y entrenadores valoren lo importante que es para lo que estamos haciendo, sin embargo. Muchos jugadores le huyen a la posición, y si les pides jugarla, se ven muy incómodos. Él es perfecto para la posición".
Kelce fue recluta de sexta ronda para los Eagles en el 2011 e inició los 16 partidos como novato. Durante el segundo partido de la campaña del 2012, Kelce se rompió dos ligamentos en la rodilla. Para el final de la temporada pasada, estaba completamente sano e inició todos los encuentros en camino a una marca de 10-6 y un título de NFC Este.
"Recibo llamadas de otros entrenadores de línea ofensiva respecto a Kelce, y ellos me dicen: 'Este tipo es increíble en espacio'", dijo Stoutland al Inquirer. "Muchas veces, esos grandes linieros ofensivos lucen como vacas sobre hielo en espacios abiertos. No pueden cambiar de dirección. Jason Kelce es totalmente lo opuesto de ello. Cuando sale de la caja de bloqueo --ya sea en pase pantalla o una resbalada hacia el perímetro-- siempre toma el ángulo correcto hacia su objetivo".