Escocia le pidió a World Rugby que reconozca públicamente que los árbitros cometieron un “error que definió el juego” cuando su try de último minuto fue anulado. La situación ocurrió el pasado fin de semana en el partido ante Francia por la segunda fecha del Seis Naciones.
Según medios locales, en un correo electrónico, los representante del Cardo expresaron que “la integridad del torneo se vio comprometida por un aparente cambio de sentido por parte de los referees”.
Los hombres de Gregor Townsend estaban 20-16 en desventaja hasta el último minuto cuando ganaron ante una perdida de posesión rival y se acercaron al ingoal. Luego Sam Skinner cruzó la línea, sin embargo el árbitro Nic Berry no consiguió divisar si la pelota había tocado el piso. Paso siguiente, el australiano acudió al TMO, quien no pudo encontrar pruebas claras de que se hubiera marcado un try, aunque un ángulo de cámara parecía mostrar el balón rodando desde un pie francés hasta el suelo, el asesor televisivo Brian MacNeice seguía inseguro y afirmó que no podía anular la decisión que se había tomado desde la cancha.
“El TMO influyó más en el árbitro [con la decisión final]. Tienen una pantalla bastante grande en esa esquina, por lo que debería ser el árbitro el que decida”, dijo Townsend a los periodistas post partido y agregó: "No creo que esté siendo parcial al decir que la pelota fue puesta en la línea de try, creo que todos lo ven. Así es como llegamos a la decisión correcta. Para nosotros claramente no fue la decisión correcta la que tomaron al final".
“Realmente no importa. Ese juego continúa. Recibiremos comentarios, lo hacemos con regularidad, y ese será uno de algunos incidentes sobre los que pediremos aclaraciones, pero desafortunadamente no cambia el resultado”, sentencio el head coach.