La dura derrota de los All Blacks frente a los Sprinboks en Wellington por la cuarta fecha del Rugby Championship aun resuena sobre Scott Robertson, que no dudó en reconocer las críticas que recibió por parte los especialistas y aficionados. Lo mejor del rugby, en Disney+ Plan Premium
La caída por 43-10 en el Sky Stadium fue la más dura para Nueva Zelanda en toda su historia y aumentó la presión sobre el head coach, que buscará reponerse ante Australia en su partido por la Bledisloe Cup. Los All Blacks recibirán a los Wallabies nada más y nada menos que en el mítico Eden Park de Auckland, donde llevan una racha de 52 partidos sin perder.
Los aficionados inevitablemente dejaron en claro sus sentimientos y el entrenador insistió en que tienen razón en expresar su frustración. “Hay muchos accionistas en nuestro país a los que servimos, definitivamente nos dejan saber lo que piensan y así deben hacerlo. Hemos hablado de eso; nuestro trabajo es servir a nuestra gente y siempre ha sido nuestro enfoque, y ahora podemos hacerlo de nuevo el sábado”, dijo Robertson.
Además, agregó que utilizarán el mal trago de Wellington como motivación para la Bledisloe Cup y mencionó: "Fue muy doloroso, fue muy claro. Lo hemos discutido, revisado y sido lo más honestos posible. Uno quiere aprovechar eso, y esos momentos, para fortalecer la disciplina y la pasión por el juego, y luego el rendimiento. Pero lo aprovecharemos"
