Por la cuarta jornada del Rugby Championship 2025, los Springboks se recuperaron de la derrota de la semana pasada frente a los All Blacks y los derrotaron 43-10 con una goleada histórica para dejar el torneo con chances para todos los equipos. Lo mejor del rugby, en Disney+ Plan Premium.
Se ponía mucho en juego en la noche de Wellington. Para Nueva Zelanda siginificaba la chance de cerar la serie contra los sudafricanos y sacar ventaja en la tabla de posiciones, mientras que del otro lado, debían ganar para buscar nuevamente la corona.
Y en ese marco, con todo el público a su favor, fueron los locales quienes comenzaron mejor. Tras una jugada espectacular, en la que la movieron de lado a lado, Leroy Carter terminó apoyando en su debut con la camiseta negra.
Sin embargo, y con los All Blacks dominando el juego por completo, Cheslin Kolbe hizo su gran aparición al cortar una jugada de ataque rival y con una gran intercepción se fue solo al try recorriendo toda la cancha.
El partido se volvió más friccionado, las oportunidades empezaron a escasear, y solo un penal de Damian McKenzie logró mover el resultado antes del descanso.
En el segundo tiempo fueron los Springboks los que comenzaron mejor. Con la energía habitual que le da su recambio, comenzaron a imponerse en el contacto, y desde allí aparecieron nuevamente los espacios.
Una de sus figuras, Kolbe, volvió a tomar la pelota cerca del ingoal y no perdonó para darlo vuelta, pero un rato después, debió abandonar la cancha con un fuerte golpe.
Otro que ingresó bien fue Manie Libbok, quien acertó a los palos la conversión y un penal para que su equipo se escape 17-10.
Sudáfrica, poco a poco, comenzó a imponerse en cada sector de la cancha ante unos All Blacks que bajaron el rendimiento. Damian Willemse la tomó dentro de los 22 metros y se llevó puesta a toda la defensa para seguir sacando diferencias.
Ya no había vuelta atrás. Los sudafricanos dominaban todos los puntos de contacto, y Kwagga Smith primero y RG Snyman después terminaron de sentenciar la historia.
El Rugby Championship llega a sus últimas dos jornadas con una paridad impresionante.