El presidente Donald Trump se encontró con fuertes y continuos abucheos y cánticos de "¡Enciérrenlo!" de los fanáticos en Nationals Park cuando se lo mostró en la pantalla de video en el estadio después de la tercera entrada del Juego 5 de la Serie Mundial.
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Los abucheos terminaron solo después de que la pantalla de video se redujo a una toma de miembros del servicio estadounidense saludando a la multitud y luego mostró un mensaje agradeciendo a los militares. Trump asistió al juego de los Houston Astros-Washington Nationals con cinco veteranos.
Luego, cuando el abridor de los Nationals, Joe Ross, subió al montículo para calentarse para la cuarta entrada, los fanáticos comenzaron a cantar, "¡Enciérrenlo!", en una aparente referencia a los procedimientos de juicio político en curso contra el presidente. Las multitudes pro-Trump con frecuencia corearon "¡Enciérrenla!" sobre Hillary Clinton en las manifestaciones de campaña del presidente.
Trump asistía a su primer juego de Grandes Ligas desde que asumió el cargo en enero de 2017. No hizo el primer lanzamiento ceremonial y llegó sin fanfarria justo cuando comenzó el juego.
El séquito de Trump en un palco en el nivel inferior a la izquierda del plato incluía a dos senadores republicanos, Lindsey Graham, de Carolina del Sur, y Marco Rubio, de Florida. También en el grupo esaba el congresista Kevin Brady, de Texas.
"Creo que todos están emocionados", dijo el lanzador estrella de los Nacionales, Stephen Strasburg, antes del partido. "Es el presidente de los Estados Unidos. Entonces obviamente hay seguridad reforzada. Por lo general, los perros que olfatean en nuestro clubhouse son súper amables. Y hoy había un pastor alemán que realmente no me sentía cómodo acariciando''.
El mánager de los Nationals, Dave Martínez, dijo: "Él viene al juego. Es un fanático. Espero que anime a los Washington Nationals, y espero que disfrute el juego".
El comisionado de Grandes Ligas, Rob Manfred, dijo que discutió con Trump si le gustaría hacer el primer lanzamiento ceremonial, pero el presidente se negó al mencionar la interrupción que provocaría que los fanáticos llegaran al estadio.
El propietario principal de los Nationals, Mark Lerner, le dijo al Washington Post que Trump debería estar en el juego, pero dejó en claro que no invitó a Trump a tirar el primer lanzamiento, diciendo que había muchos otros candidatos que deberían considerarse antes de Trump. José Andrés, un destacado propietario de restaurante local y humanitario, hizo el primer lanzamiento a una ovación rugiente y sostenida.
The Associated Press contribuyó con este reporte.