Le tomó apenas tres juegos a la nueva regla de deslizamientos en segunda base para que fuera aplicada y provocara uno de los finales de partido más extraños de la historia.
La llamada 'regla Chase Utley' fue decretada en el tercer encuentro de la temporada entre los Azulejos de Toronto y los Rays de Tampa Bay en el Tropicana Field y justo para el out 27.
Los Rays ganaban 3-2 en el noveno, cuando los Azulejos llenaron las bases con un solo out y en turno venía el cuarto bate Edwin Encarnación.
El dominicano bateó una rola por tercera y el antesalista Evan Longoria buscó la doble matanza por la vía 5-4-1. José Bautista, quien corría de primera a segunda, se deslizó en la intermedia, aunque el tiro llegó con tiempo para ponerlo fuera.
Pero en el deslizamiento buscó con su mano izquierda la pierna derecha del camarero Logan Forsythe, lo cual le hizo tirar mal a primera.
La pelota se escapó y entraron dos corredores que pusieron la pizarra 4-3 favorable a los visitantes.
Pero el manager de Tampa Bay, Kevin Cash, reclamó la jugada y tras revisar el video, los árbitros decretaron out a Encarnación por interferencia de Bautista, a tenor de la regla 6.01, emitida tras la brutal entrada a segunda de Chase Utley sobre el campocorto panameño Ruben Tejada en los playoffs del 2015.
La interferencia fue clara, clarísima, intencional o no, podría haber sido decretada incluso si no existiera la regla Utley, que busca proteger a los defensores de la intermedia de entradas grotescas para romper dobles matanzas.
Pero el director de Toronto, John Gibbons, no lo vio así.
"Es una vergüenza. Entiendo la intención de la regla, pero eso es cuando un corredor busca intencionalmente a un fildeador para dañarlo. Esto es béisbol y no sé qué es lo que realmente quieren".
Ahora bien. ¿Qué hubiera pasado si en vez de Bautista agarrar por el tobillo a Forsythe con la mano, lo derribaba con el impacto del deslizamiento dentro del rango de tres pies de ancho alrededor de la almohadilla?
Utley se salió de su camino unos cuantos pies en busca de las piernas de Tejada, pero ¿cuál sería la decisión arbitral si el choque entre corredor y defensor se produce justo sobre la base y eso le impide el tiro a primera para completar una doble matanza?
Ahí no habría interferencia, por mucho que le haya dolido el golpe al jugador a la defensa.
Esto apenas comienza y ya veremos unas cuantas decisiones polémicas en torno a la intermedia, de la misma manera que ocurrió en su momento con la regla 7.13 y los bloqueos del plato por los receptores, que entró en vigor de manera experimental en el 2014.
Por cierto, ¿alguien se enteró cuando esa regla dejó de ser experimental y pasó a definitiva? ¿O es que siguen experimentando?
Mientras tanto, Bryce Harper sigue abogando en su campaña de hacer divertido el béisbol nuevamente.