No cabe duda de que el 2019 dentro del ring dejará muchos recuerdos para los fanáticos del boxeo. Y es bien probable que la imagen de Andy Ruiz Jr. noqueando a Anthony Joshua para sorprender al mundo sea el momento inolvidable del año para archivar en los anaqueles del deporte.
Con Ruiz y Joshua en cuenta regresiva para la revancha del sábado en Arabia Saudita, veamos algunos detalles y cifras de CompuBox que nos brindan mejor perspectiva de lo que fue una de las peleas de peso pesado más memorables en reciente memoria.
Joshua llegó a la pelea clasificado primero en el ranking de peso pesado de ESPN, listo para hacer su debut en Estados Unidos y cómodo favorito de los expertos y las apuestas (-2000) para defender con éxito sus tres títulos mundiales.
Se suponía iba a ser una noche fácil para Joshua contra un rival mayormente desconocido en Ruiz, quien venía de pelear el 20 de abril antes de aceptar la pelea tarde como sustituto de Jarrel Miller.
Cabe señalar que ese lapso de 42 días antes de retar por el cinturón de peso pesado fue el quinto más corto en los últimos 50 años, según información proveída por ESPN Stats & Information.
En otras palabras, Joshua tenía todo en sitio para ganar y mantenerse entre el trío de peleadores notables en el peso (Deontay Wilder, Tyson Fury) rumbo eventualmente a una pelea unificatoria, quizás en el 2020.
Y entonces sonó la campana. Todos sabemos lo que pasó después.
Ruiz se recuperó de ser derribado en el tercer round para enviar a Joshua cuatro veces a la lona, dos en el tercer asalto y dos más en el séptimo decisivo para ganar y convertirse en el primer mexicano en ser campeón de los pesos pesados.
CompuBox nos dice que Ruiz superó a Joshua 56-47 en golpes conectados, incluyendo 39-23 de poder.
Nos podemos remontar a ese tercer asalto (cuando Ruiz superó a Joshua 15-10 en golpes de poder) para quizás reconocer el momento en que Ruiz comenzó a crecer en confianza y a pensar que sí, tenía una oportunidad real de ser campeón del mundo.
Claro, fue también en ese asalto que Joshua habría sufrido una conmoción que alteraría su desempeño el resto de la pelea, aunque eso a última hora habla más de la salud de los boxeadores en el ring que de la victoria merecida de Ruiz.
Ya en los rounds seis y siete, Ruiz parecía el peleador más fuerte. Una ventaja de 14-6 en golpes de poder en esos dos asaltos terminaron sentenciando el resultado como una de las sorpresas más memorables en la historia del boxeo.
Joshua, quien se vio letárgico a través de la pelea, inclusive antes de sufrir la conmoción, terminó conectando solo un promedio de siete de 25 golpes por asalto. Su primera derrota como profesional fue como un balde de agua fría al rostro, considerando las expectativas para la pelea y lo que hubiera sido el resto del 2019 para el peleador británico.
No obstante, la reyerta será recordada por muchos por la presencia de Andy Ruiz como protagonista. Desde esa mágica noche en la ‘Gran Manzana’, Ruiz ha vivido su vida deportiva como campeón y su realidad fuera del ring como una figura querida e inspiradora.
Ahora veremos en Arabia Saudita si puede consolidarse como monarca de los pesados, evitando en el proceso ser el próximo Hasim Rahman o Buster Douglas.