Philadelphia lució más como un mal equipo en su primer encuentro de pretemporada, que como un equipo con aspiraciones reales al Super Bowl, en la derrota del pasado lunes
PHILADELPHIA -- Los Philadelphia Eagles --como todos los equipos, menos uno, en la historia de la NFL-- no iban a terminar la temporada sin perder.
Eso era inevitable.
Las derrotas ocurren, incluso para un equipo con un candidato al Jugador Más Valioso como Jalen Hurts.
Pero, ¿perder de esta manera?
Los Eagles se vieron más como un mal equipo en su primer encuentro de pretemporada que como un equipo con aspiraciones reales al Super Bowl, en la derrota el lunes por 32-21 ante los Washington Commanders.
Balones perdidos, una intercepción y otro desastre de los equipos especial, sin presión al pasador o cobertura, al parecer los Eagles cometieron todas las faltas, errores y desaciertos de una temporada en un partido.
La buena noticia.
Aún tienen marca de 8-1 y lideran el Este de la Conferencia Nacional. La mala, con esa marca de 8-1 están empatados para la mejor marca de la NFC con Minnesota, aunque los Eagles tienen ventaja en el desempate.
Ahora Philadelphia se dirige a Indianapolis (4-5-1) y tendrán oportunidad de demostrar que la mala actuación sólo fue una aberración de un partido y no una señal de preocupación de que hay grietas en la base para ser campeón.
“Perdimos juntos”, admitió el entrenador en jefe de los Eagles, Nick Sirianni. “La ofensiva, defensiva, equipos especiales, perdimos juntos. Eso nos hizo perder el encuentro”.
Hubo bastante culpa para repartir y eso incluye al equipo de oficiales que flagrantemente dejaron pasar una penalización al final que le hubiera permitido a los Eagles otra oportunidad de dar la vuelta.
LO QUE FUNCIONA
Tal vez Hurts no tuvo un gran encuentro, pero con dos pases de touchdown y otra anotación por tierra llegó a cuatro encuentros esta temporada y nueve en su carrera con al menos tres touchdowns.
LO QUE NO FUNCIONA
Casi todos los aspectos del juego. Sí, los balones perdidos fueron desastrosos, pero la derrota fue más allá.
Otra vez los Eagles no pudieron presionar al quarterback. Josh Sweat tuvo una buena captura a Taylor Heinicke al inicio del encuentro, pero eso fue todo. Los Eagles le han permitido 144 yardas por tierra a los Steelers, 168 a los Texans y 152 a los Commanders en los últimos tres encuentros. Contando la captura de Sweat, los Eagles tienen sólo tres en los últimos cinco duelos.
Hay que recordar, el ex quarterback de los Eagles, Carson Wentz, fue capturado nueve veces y golpeado 17 veces más la primera vez que estos dos equipos se enfrentaron en septiembre.