El quarterback de los Chargers se ha metido, por méritos propios, en la discusión por ser el mejor jugador en su posición en toda la NFL
La Semana 5 fue dominada casi completamente por corredores y receptores abiertos, con una presencia discreta de quarterbacks.
Sin embargo, fue un pasador de segundo año que condujo una espectaculr remontada de cuarto periodo, quien se lleva los máximos honores como el Coloso de la Semana.
Justin Herbert, quarterback, Los Angeles Chargers
Si alguien desea presentar el argumento de que Herbert es el mejor quarterback de la NFL en este momento, es muy complicado discutirlo.
El quarterback de segundo año de los Bolts completó 26 de 43 intentos de pase para 398 yardas con cuatro touchdowns sin intercepciones, y corrió cuatro veces para 29 yardas y un touchdown más, conduciendo la eléctrica victoria por remontada de Los Angeles sobre Cleveland, por 47-42.
En un partido con marcador de videojuego, la ofensiva no puede fallar y Herbert se aseguró precisamente de eso. Los Chargers llegaron a estar abajo por 27-13 hacia el final del tercer periodo, antes de que los angelinos, liderados por Herbert, anotaran cinco touchdowns en los últimos 21 minutos de tiempo regular, incluyendo cuatro en el cuarto periodo.
En ese punto del juego, la balanza se movió decididamente, desde favorecer a Cleveland hasta entregar el momento a los Chargers. Incluso, con un punto extra fallado cuando Los Angeles estaba por empatar a los Browns en 42, Herbert no desesperó y condujo a su equipo a una serie anotadora más, con apenas minuto y medio restante en el reloj de juego, para poner el marcador definitivo.
Hay varios quarterbacks jóvenes en la NFL que auguran un futuro brillante en la posición, y algunos veteranos que mantienen muy alto el estándar de juego semana a semana, incluyendo uno que aparece en nuestra lista más abajo, pero si me dicen que su voto por el mejor quarterback en toda la liga al día 10 de octubre del 2021 es Herbert, no tengo argumentos en contra.
Menciones honoríficas
Davante Adams, receptor abierto, Green Bay Packers. Los defensivos de los Bengals van a soñar a Adams, después de una actuación de 11 recepciones para 206 yardas y una anotación en la sufrida victoria de tiempo suplementario por 25-22. Se sabía que el estelar de los Packers iba a tener un enfrentamiento favorable ante Cincy, pero lo de esta tarde fue soberbio.
Tom Brady, quarterback, Tampa Bay Buccaneers. El Jugador Más Valioso reinante del Super Bowl no tuvo ninguna piedad contra Brian Flores, un coach defensivo al que conoce muy bien por su tiempo juntos en New England. Brady completó 30 de 41 intentos de pase para 411 yardas y cinco touchdowns sin intercepciones, humillando cualquier intento de los Dolphins de frenar la potencia del ataque de los Bucs. A este paso, ¿con cuántos pases de touchdown se va a retirar el eterno Brady?
Antonio Brown, receptor abierto, Buccaneers. Cuando está enchufado, que no es siempre, Brown hace de Tampa Bay una de las dos o tres ofensivas más potentes de la NFL, como tercera o cuarta opción en el ataque. Ante los Dolphins, se quedó con siete pases para 124 yardas y dos touchdowns en una actuación de antología, de esas que los fans de Pittsburgh recuerdan bien.
Ja'Marr Chase, receptor abierto, Cincinnati Bengals. Adams no fue el único receptor abierto que se despachó a lo grande en el encuentro entre Packers y Bengals. El novato Chase atrapó seis envíos para 159 yardas con un touchdown, aprovechando al máximo la ausencia del lesionado Jaire Alexander, el mejor esquinero de los Packers. Este domingo no fue suficiente, pero Chase está convertido en una máquina para Cincy.
Nick Chubb, corredor, Cleveland Browns. No sé si haya un corredor más confiable en la liga que Chubb, quien castigó a los Chargers con 21 acarreos para 161 yardas con un touchdown. Su escapada de anotación de 52 yardas lo tuvo todo: desde visión para encontrar el hueco, potencia para sacarse el intento de tacleada, y aceleración en campo abierto para dejar atrás a los defensivos. Su promedio de 7.7 yardas por acarreo fue impresionante.
Austin Ekeler, corredor, Chargers. ¿Hay un mejor apodo en la NFL que el de Ekeler? Para el corredor de los Bolts, 'P4P' (Pound for pound) parece adecuado, si se habla de encontrar al mejor jugador de la NFL, libra por libra. Ante los Browns, Ekeler acarreó el ovoide 17 veces para 66 yardas con dos touchdowns, y atrapó cinco pases para 53 yardas y un touchdown adicional, para lograr la remontada en casa ante unos Browns que no se guardaron nada.
Mike Evans, receptor abierto, Buccaneers. Otro de los Bucs que brilló intensamente en casa ante Miami, Evans aseguró seis recepciones para 113 yardas y dos anotaciones en la paliza de los campeones Bucs a los Dolphins, por 45-17, castigando desde todos los ángulos, y en todas las distancias, a la defensiva secundaria rival.
Derrick Henry, corredor, Tennessee Titans. ¿Cómo explicamos que la defensiva rival sabe exactamente lo que viene, y aun así es incapaz de frenar a Henry? Eso es lo que hay que preguntarnos acerca de Jacksonville, que le permitió 130 yardas y tres touchdowns a Henry en 29 acarreos durante una victoria divisional para Tennessee de 37-19.
Najee Harris, corredor, Pittsburgh Steelers. Por primera vez en lo que va del año, Harris realmente dio una muestra de lo que puede llegar a ser como arma ofensiva primaria para Pittsburgh. Corrió el ovoide 23 veces para 122 yardas con un touchdown, cargando con el peso de un juego terrestre que alivió la presión sobre Ben Roethlisberger y le dio oportunidad al juego aéreo de florecer. Esperen ver más de Harris en situaciones como la de este triunfo sobre Denver, por 27-19, en el futuro inmediato.
Alexander Mattison, corredor, Minnesota Vikings. ¿No Dalvin Cook? No hay problema. Por segunda ocasión en el año Mattison reemplazó a Cook para los Vikings como su corredor primordial, y por segunda ocasión entregó un desempeño estelar, con 25 acarreos para 113 yardas y siete recepciones para 40 yardas con un touchdown en la apretada victoria por 19-17 sobre los Lions.
Kyle Pitts, ala cerrada, Atlanta Falcons. Finalmente, llegó la primera recepción de touchdown como profesional de Pitts, y ocurrió en su mejor partido como profesional hasta el momento. Con nueve recepciones para 119 yardas en Londres, Pitts fue fundamental para la victoria de Atlanta sobre los Jets en Londres, por 27-20.
James Robinson, corredor, Jacksonville Jaguars. Los Jags no tienen mucho de qué presumir semana a semana, pero Robinson al menos es cumplidor. En contra de los Titans, corrió el balón 18 veces para 149 yardas con un touchdown. Insólitamente, con esos números y un promedio de 8.3 yardas por acarreos, Jacksonville envió a Carlos Hyde para una carrera en cuarta y 1 fue frenada por Tennessee, en lugar de insistir con Robinson.
Mike Williams, receptor abierto, Chargers. Con un gatillero como Herbert en los controles, lo increíble es no ver desempeños como el de Williams semana a semana. Esta vez, fueron ocho recepciones para 165 yardas con dos touchdowns para el receptor abierto de los Bolts, y en contra de uno de los grupos más profundos de esquineros que existen en la NFL.
Jameis Winston, quarterback, New Orleans Saints. Seguro, no tuvo el mejor comienzo del partido, lanzando una muy mala intercepción. Pero, Winston se recuperó maravillosamente. Completó 15 de 30 envíos para 279 yardas con cuatro touchdowns, incluyendo uno de 72 yardas para Deonte Harris y otro en 'Ave María' de 49 yardas para acabar la primera mitad, a manos de Marquez Callaway en una victoria de 33 por 22 sobre Washington.