<
>

Emociona a Christian McCaffrey receso de campaña completo con 49ers

La situación es dramáticamente distinta al año pasado, cuando CMC llegó al club a media temporada con la misión de aprender las jugadas sobre la marcha

SANTA CLARA -- En los primeros días de las actividades organizadas del equipo, el head coach de los San Francisco 49ers, Kyle Shanahan, no quiso apresurar el regreso de su equipo, Después de todo, los Niners habían llegado hasta lo profundo de los playoffs, de nueva cuenta, y aunque los equipos no pueden celebrar entrenamientos equipados durante las actividades organizadas del equipo, Shanahan realmente deseaba traer de vuelta con calma a su escuadra a la acción sobre el campo de prácticas.

Así que, cuando los 49ers alinearon para su primera sesión de trabajo de 11 contra 11, lo hicieron sin hombreras ni cascos. Es difícil extraer demasiado de algo que se asimila a un simulacro glorificado, pero hubo un jugador imposible de ignorar: el corredor Christian McCaffrey.

Para aquellos observando a McCaffrey, fue difícil precisar si se trataba de las actividades organizadas del equipo en un 23 de mayo, o un enfrentamiento de la NFC Oeste de finales de campaña. Estaba enchufado en cada paso de la práctica, logrando carreras largas y atacando con decisión cada ejercicio.

"Impone el estándar", dijo el quarterback Trey Lance. "Rápidamente ha crecido como un líder en nuestro vestidor, y pienso que muchos chicos creyeron que eso sucedería muy pronto, con base en quién es".

Podría ser complicado medir el impacto de McCaffrey en el vestidor de San Francisco después de arribar vía canje de los Carolina Panthers el 21 de octubre, pero no hay modo de negar que su desempeño sobre el campo lo convirtió en una de las adquisiciones sobre de media temporada de mayor impacto en la historia reciente de la NFL.

Antes de que McCaffrey se insertara en la alineación titular en la Semana 8, los Niners se ubicaron N° 20 en la NFL en puntos por juego (20.7), N° 13 en yardas por juego (355) y N° 18 en puntos esperados agregados (-0.04). San Francisco se fue con registro de 3-4 en ese lapso.

Incluyendo la postemporada, se ubicaron terceros (28.6), séptimos (362.5) y terceros (6.8) en esas mismas categorías, respectivamente, después de que McCaffrey asumiera como titular. Los Niners acumularon foja de 12-1, cayendo ante los Philadelphia Eagles en el Juego de Campeonato de la NFC.

A pesar de esa producción, los 49ers y McCaffrey creen que hay bastantes modos de elevar su juego --y, por extensión, a toda la ofensiva-- a otro nivel en su primera campaña completa con los Niners. Aunque McCaffrey siempre ha participado a totalidad en el programa de receso de temporada, la mayoría de sus porciones siendo voluntarias y evitadas por jugadores estelares, nunca hubo duda de que asistiría a cada fase de ello.

"Solo intento aprender tanto como sea posible", dijo McCaffrey. "Es agradable poder iniciar desde primer escalón y alinearme bien con el coach [de corredores, Bobby] Turner y cerciorarme de que no es solo aprender las jugadas, sino aprender todo detalle individual de la posición".

Eso representa un cambio drástico al curso acelerado al que se sometió McCaffrey antes de saltar al campo en contra de los Kansas City Chiefs menos de 48 horas después de haber arribado a San Francisco. A partir de allí, McCaffrey fue capaz de aprender un poco más cada semana, pero la mayor parte de eso era específico al plan de juego en turno. Eso quiere decir que este receso de campaña es su primera oportunidad para profundizar en los detalles más finos de la ofensiva de Shanahan.

Es algo que McCaffrey, quien ha jugado para cinco coordinadores ofensivos diferentes en seis campañas de NFL, no da por sentado.

"En Carolina, siempre teníamos nuevos coaches llegando...", resaltó McCaffrey. "Así que siempre estaba aprendiendo jugadas".

Todo nos lleva a la siguiente pregunta: ¿hasta dónde puede llegar McCaffrey con un receso de campaña completo en el sistema de Shanahan?

La historia de McCaffrey sugiere que hay muchos modos para que eleve su juego. Solamente una vez en su trayectoria ha estado sano para una temporada completa, y trabajó con el mismo coach al mando de jugadas que el año previo. Eso ocurrió en el 2019, cuando Norv Turner obtuvo una segunda campaña al mando de las jugadas para los Panthers. Aquel, fue el mejor año de McCaffrey, luego de acumular 2,392 yardas desde la línea de golpeo y 19 touchdowns en 16 encuentros. Eso le siguió a una temporada del 2018 en la que se apuntó 1,965 yardas desde la línea de golpeo y 13 touchdowns en 16 encuentros.

En 13 encuentros como corredor titular para San Francisco el año pasado, McCaffrey promedió 111.3 yardas desde la línea de golpeo por juego (72.8 por tierra y 38.5 en recepciones) al tiempo que anotó un combinado de 13 touchdowns en 19.5 toques por partido. Extrapolando esas cifras a lo largo de una campaña de 17 encuentros, eso resultaría en 1,892 yardas desde la línea de golpeo con 17 touchdowns, cerca de su producción del 2018.

En un equipo que también presume talento ofensivo en posiciones de habilidad como los receptores abiertos Deebo Samuel y Brandon Aiyuk, el ala cerrada George Kittle, el fullback Kyle Juszczyk y el corredor Elijah Mitchell, fue McCaffrey quien evolucionó hasta convertirse en la opción principal de los Niners en la segunda mitad de campaña, y en los playoffs. Ese elenco talentoso debe ofrecer a McCaffrey continuas oportunidades de hacer jugadas grandes, pero también significa que es improbable que regrese a una carga de trabajo similar a sus 25.2 toques por juego del 2019.

Es más probable que los 49ers busquen administrar la salud de McCaffrey; participó en un combinado de 10 encuentros entre el 2020 y 2021 por lesiones de tobillo, hombro, muslo y tendón de la corva, y debió limitar su participación al término de la pasada campaña por un tema en la rodilla, al tiempo que compartió acarreos con Mitchell y Jordan Mason. Eso significa que McCaffrey podría terminar más apegado a los 20.4 toques que promedió en el 2018, que, en caso de poder mantenerse sano, probablemente lo acercarían a las 2,000 yardas desde la línea de golpeo.

Tal temporada no sería sorpresa para el quarterback de los Niners, Sam Darnold, quien jugó con McCaffrey en Carolina y quien ha visto los resultados de su estrategia de receso de campaña en persona.

"Estoy acostumbrado a eso", relató Darnold. "Es simplemente su ética de trabajo, eso nunca va a cambiar. ... Simplemente tiene una gran ética de trabajo y creo que los chicos responden a eso muy bien y empuja a quienes le rodean".