DALLAS -- Para Dez Bryant, JasonWitten, Sean Lee, Travis Frederick y otros veteranos establecidos más, el último partido de pretemporada es totalmente intrascendente.
Por otro lado, para una veintena de jugadores de los Dallas Cowboys, el juego contra los Houston Texans representa demasiado, pues puede cambiar su vida si maximizan la última oportunidad de quedarse en un equipo de la NFL.
Otros intentarán demostrar al coach Jason Garrett y a sus asistentes que son dignos de dejar la banca o, al menos, ser activados el día del partido.
Para muchos de los Texans y de los otros 30 equipos de la Liga, la situación es similar. Es la última llamada para enseñar que tienen talento suficiente; jóvenes y veteranos que están casi en desuso.
“Es una gran oportunidad para varios jugadores de dar el último empujón”, afirma el vicepresidente de los Cowboys, Stephen Jones. “Hay peleas por esos cuatro o cinco lugares disponibles en cada roster; hay competencia por el equipo de prácticas y algunos otros que quieren mostrarle al resto de la Liga que pueden jugar en este nivel”.
Los equipos de la NFL tienen que entregar el sábado el roster de 53 jugadores con los que comenzarán la temporada regular la próxima semana.
“Es muy bueno ver esas competencias por el roster al final, por alcanzar un sueño y un cambio de vida total para muchos”, agregó Jones. “Hay mucho que ver, ya sea en el roster activo o en el equipo de prácticas. Todos sabemos que el equipo de prácticas alimenta el roster del día de juego durante toda la temporada”.
Los Cowboys tienen mucho más que evaluar que la posición de quarterback, donde la suerte ya está echada. El titular será Dak Prescott, al menos mientras Tony Romo se recupera de la fractura en la espalda que sufrió en el tercer partido de pretemporada.
Este jueves representa la mejor oportunidad en la vida para Jameill Showers, quien busca demostrar que puede ir a la banca el día del partido, tras pasar todo el 2015, su año de novato, en el equipo de prácticas.
A la ofensiva, Garrett y compañía también deben evaluar la posición de receptor y ala cerrada.
Atrás de Bryant, Terrance Williams y Cole Beasley hay poco. Así pareció la campaña anterior cuando se lastimó Bryant. Brice Butler y Lucky Whitehead parecen tener un lugar en el equipo. Devin Street quizá tenga su última oportunidad de ganarse un puesto ante Houston.
Igual sucede atrás de Jason Witten. Su principal suplente los años más recientes, James Hanna, estará fuera al menos los primeros seis partidos por lesión. Gavin Escobar, reclutado en la segunda ronda del Draft 2013, se recupera de una fractura de talón de Aquiles y ha cooperado poco.
Para muchos, Escobar puede ser pieza de cambio en la búsqueda de quarterback; similar al corredor Darren McFadden.
El novato Ezekiel Elliott, reclutado como la cuarta selección global en el Draft pasado, verá acción entre 12 y 20 jugadas ante los Texans, aunque sus acarreos serán menos en su segundo partido de pretemporada.
A la defensiva aún hay lugares por definir entre suplentes, tanto en la secundaria como en los linebackers.
En la línea defensiva es donde parece que más contará el partido contra los Texans. Los recién llegados Benson Mayowa y Maliek Collins se equiparon por vez primera en el tercer encuentro de pretemporada y necesitan actividad este jueves previo al arranque de la campaña.
Ryan Russell y Jack Crawford compiten aún por los lugares de DeMarcus Lawrence y Randy Gregory, suspendidos en el arranque de temporada.
“Aún falta por definir el plan de juego exacto para el partido y los jugadores con tiempo y tareas específicas”, dijo Garrett. “Pero es un hecho que el último juego de pretemporada cuenta mucho más de lo que la mayoría afuera de estas paredes considera”.