PITTSBURGH -- El ala cerrada Ladarius Green quiere volver con los Pittsburgh Steelers en 2017 y no está contemplando el retiro pese a sufrir secuelas relacionadas con las conmociones en dos equipos diferentes.
Green promedió 16.9 yardas por recepción con el conjunto de Pennsylvania antes de perderse los últimos cinco compromisos tras un golpe ante Cincinnati en la Semana 15. El protocolo le evitó formar parte de la derrota que sufrieron por 36-17 en el Juego de Campeonato de la Conferencia Americana ante los New England Patriots.
"Fue una temporada frustrante, pero todos tienen una. Espero que sea la única", comentó. "Entrenaré tan pronto llegue a casa y espero que la próxima campaña sea mejor".
Los Steelers firmaron a Green, procedente de Los Angeles Chargers, a un contrato por cuatro temporadas y 20 millones de dólares en marzo. Resumió su primer año como "difícil, muy difícil" después de perderse las primeras nueve semanas por una cirugía en el tobillo y posteriormente se rompió el ritmo que tenía con Ben Roethlisberger por la lesión anteriormente mencionada.
El veterano llegó a los Steelers ya con un historial de conmociones después de cuatro años con los Chargers, pero le comentó a los reporteros en marzo que no se hizo un buen diagnóstico. NFL Network reportó que no formó parte en los campos de entrenamiento por constantes dolores de cabeza; Mike Tomlin y el jugador señalaron que era por el procedimiento en el tobillo.
Terminó con 18 recepciones para 304 yardas y una anotación en seis juegos, además de añadir que podía jugar el domingo si hacían a un lado el protocolo.
"Podía jugar y mostrar un poco de lo que puedo hacer", reiteró.