Los jóvenes quarterbacks en Texas no sueñan con alcanzar la gloria en la Canadian Football League. Si eres el mariscal de campo para Katy High School y estás conviviendo con tus receptores después de la práctica, no estas retrocediendo para lanzar mientras te dices, "Esta va por la Grey Cup ...".
Pero la vida te lleva hacia donde te llevay para Bo Levi Mitchell, el camino para salir de Katy, Texas, lo llevó a Calgary, Alberta, donde se ha convertido en un estelar genuino de la CFL.
Tres meses después de su cumpleaños N° 27, mientras Mitchell alista a los Calgary Stampeders para el 2017, viene de una campaña de 5,385 yardas y el Most Outstanding Player Award de la CFL. En el 2014, lideró a los hasta una Grey Cup y ganó el nombramiento del Jugador Más Valioso de aquel partido. Impuso una marca de la CFL por el mejor inicio en una carrera cuando se fue con marca de 12-1 en su primera campaña como titular.
Las cosas van tan bien que quizás uno pensaría que el chico de Texas ha sacado de todos esos sueños de NFL de su sistema, ¿no es así?
Error.
"Pienso en ello todo el tiempo", dijo Mitchell en entrevista telefónica a inicios de este mes. "Simplemente ahora en el campamento de entrenamiento, hubo siete u ocho visores que vinieron. Sé que ha habido alguna charla en la NFL respecto a mí. Cuando llegue mi momento, la NFL ha sido mi sueño desde que fuera un chico. Tomaré esa oportunidad".
Esa oportunidad probablemente no llegará hasta que se acabe el contrato de Mitchell, en un par de campañas. Para entonces, si su trayectoria de CFL sigue en el camino en el que va, admite que será tentador quedarse.
"Sería complicado dejar pasar la oportunidad de ser el mejor en haber jugado en la CFL", dijo Mitchell.
Pero sería más difícil dejar pasar una oportunidad real de NFL, como aquella con la que soñó cuando era un niño en Katy. Entonces, el ex entrenador en jefe de la NFL, June Jones, estaba reclutando a Mitchell para jugar con él en Hawaii, y eventualmente SMU. Una lesión en su segundo año en SMU lo llevó a pedir su transferencia a Eastern Washington, donde tuvo la oportunidad de lanzar pases a su hermano, un receptor abierto, y conocer a un número de jugadores de la CFL que le mostraron cómo podía ser la vida al norte de la frontera.
"Me sentí como en casa", dijo Mitchell de Eastern Washington. "Se sintió igual que el fútbol americano de preparatoria. Los tipos no intentaban ser de gran renombre, buscando avanzar sus carreras. Simplemente estaban allí para jugar al fútbol americano juntos. Mesa de ping pong en el vestidor, mucho énfasis en los aspectos divertidos de todo, la camaradería".
Ganó un título nacional en su primer año en Eastern Washington, y en su segundo, obtuvo el Walter Payton Award como el mejor jugador ofensivo de la FCS. Pero cuando llegó el momento de hablar de la vida después de la universidad, Mitchell y sus coaches confrontaron algunas de las realidades y las alternativas.
"Mi head coach me sentó y me lo dio directo", explicó Mitchell. "Dijo, 'Lo que se dice de ti es, mides 6 pies, lanzas con el guante puesto, no has enfrentado la mejor competencia... te aguarda una sexta, séptima ronda, probablemente no reclutado'. Habló conmigo de (el ex pasador de Eastern Washington) Matt Nichols, quien tomó el camino de CFL. Dijo, 'Pienso que la CFL sería buen sitio para ti'".
El único equipo que contactó al agente de Mitchell respecto a una prueba de verano fueron los Houston Texans. Aunque fue tentador, Mitchell dijo que no quiso simplemente irse a cualquier lado a ser "un brazo de campamento para poder decir que probé lo que era la NFL". En lugar de eso, estudió cintas de CFL. Sabiendo que los Stampeders poseían sus derechos, observó a Drew Tate, quien era entonces el quarterback de Calgary.
"Pensé, 'Soy mejor que ese tipo'", admitió Mitchell. "Digo, ninguna ofensa contra él, pero simplemente viendo el video, sabía que podía ofrecer más".
Lo mismo siente respecto a la NFL. Podría no estar todavía en el radar de la NFL, pero Mitchell cree que tiene algo por ofrecer a un equipo, como jugador, no simplemente como un reserva que nunca se saca la gorra para ponerse el casco. Ha entrenado con el ex pasador de CFL y NFL, Jeff Garcia, el actual quarterback de los Buffalo Bills, Tyrod Taylor, y otros pasadores de NFL, incluyendo a Matt McGloin, Mark Sanchez y su ídolo, Drew Brees.
Le gusta su vida en la CFL, y aunque no se muestra complaciente y desea averiguar si lo puede lograr en la NFL, jura que se requiere de la oportunidad correcta para sacarlo de Calgary.
"Si fuera la situación perfecta, si un equipo quisiera que fuera allá para darme una oportunidad legítima por un puesto, entonces sí", explicó Mitchell. "Pero no simplemente ir a la NFL para decir que sostuve la tabla de las jugadas o que fui un nómada. Quiero jugar al fútbol americano.
"Sé que no es lo más sencillo. He visto a muchos tipos intentarlo. Pero siento que puedo jugar. Siento que puedo ser un Warren Moon, un Garcia, un Doug Flutie; un tipo que viene de la CFL y juega en la liga por largo tiempo".