GLENDALE, Arizona -- Jerry Jones no sólo se convirtió en un miembro más del equipo la noche del lunes. El dueño de los Dallas Cowboys fue quien tuvo la idea de que todos los jugadores salieran al campo con los brazos entrelazados y se hincaran en la ceremonia del himno.
El receptor Brice Butler reveló a ESPN Digital que luego de tres días de reuniones, los jugadores ya habían tomado la decisión sobre cómo manifestarse previo al duelo ante los Arizona Cardinals.
“Después vino Jerry y habló con nosotros antes del partido y nos dijo, ‘Sólo confíen en mí en esta (ocasión). Vamos a hacerlo juntos’. Fue plan de Jerry. De hecho, me gustó, porque todos los hicieron“, relató Butler.
“Así que para toda esa gente que estuvo circulando el mensaje falso en redes sociales que escuché todo el día de ayer, fue como una bofetada“, agregó el receptor en referencia a rumores que indicaban que el dueño del equipo le tenía prohibido a su equipo manifestarse.
“Eso fue mentira. No crean en todo lo que se dice en internet“, advirtió el receptor.
El receptor Dez Bryant dijo que una de las manifestaciones que más agradeció fue la de Jones al unirse a los jugadores, hincarse frente a todo el estadio y soportar los abucheos y rechiflas de un sector del público.
“Jerry es lo máximo. "Siempre nos apoya en lo que considera que hacemos de manera correcta. Representa la parte principal de esta organización y ahí estuvo con nosotros como uno más del equipo. Es algo que no se olvida. No hay palabras para agradecerle“, destacó Bryant.
Un proceso complicado
Para los kjugadores de los Cowboys fue complicado el proceso emotivo para decidir la manera en la que manifestarían su unidad como equipo, pero, sobre todo, como mostrar su hermandad con toda una nación.
“Fue algo muy complicado con lo que tuvimos que lidiar los últimos dos días. Creo que esta organización, jugadores, entrenadores, todos, hicieron lo correcto”, aseguró Dak Prescott, quarterback de los Cowboys. “Venimos juntos. Tuvimos mucho diálogo. Hablamos respecto a qué queríamos hacer como equipo, como símbolo de la unidad que queremos traer a este país y creo que hicimos un buen trabajo“.
Los jugadores tuvieron diversas reuniones desde el sábado y otra antes de salir al University of Phoenix Stadium el lunes para decidir cuál sería su reacción a las declaraciones del Presidente Donald Trump, quien, con lenguaje agresivo, dijo que cada jugador que no permaneciera de pie durante la ceremonia del himno debería ser despedido.
“Fue un diálogo abierto“, mencionó Prescott. “Tampoco es que haya sido tan difícil. Nadie está aquí para juzgar a nadie. Cierto que hubieron pláticas más apasionadas que otras, porque todos somos libres de expresar lo que pensamos y en lo que creemos“.
Jason Witten, ala cerrada de los Cowboys, coincidió con Bryant.
“En 15 años que he estado en la liga he visto muchas formas de unidad, pero lo que he visto estos días y esta noche con mis compañeros es increíble. Significa respeto y justicia para todos. Honor y respeto para nuestra bandera y país. Representa lo más puro de una sola nación”, sentenció Witten.