FRISCO -- Hace un año, este miércoles, los Dallas Cowboys cortaron a Tony Romo.
El ex mariscal de campo ha disfrutado unos buenos 365 días desde que perdió su empleo de NFL.
poco tiempo después de que los Cowboys cortaran a Romo, se unió a CBS para reemplazar a Phil Simms como su principal analista de NFL junto a Jim Nantz. Fue considerado un movimiento valiente porque Romo no tenía experiencia de televisión, y estaría analizando los partidos de jueves y domingo por la noche.
La semana pasada, Romo fue nominado para un Emmy como personalidad/analista destacada de deportes.
La decisión de los Cowboys de cortar a Romo no fue sorpresiva. Dado su costo contra el tope salarial y la campaña récord de Dak Prescott como novato, no había modo para que Romo regresara al equipo en el 2017. De haber cortado los Cowboys a Romo en marzo del, no obstante, quizás no se hubiera directamente el palco de televisión.
De haber llegado el movimiento en marzo, Romo podría haber seguido jugando. El destino más probable eran los Houston Texans. Pero los Cowboys siguieron esperando para realizar la movida y CBS siguió dejando una buena impresión sobre Romo, quien tomó la decisión de mudarse a un empleo en que pudiera envejecer.
Romo es diferente que otros analistas de TV. No solamente describe lo que acaba de suceder. Explica por qué sucedió. Predice jugadas de vez en vez, y es capaz de descifrar correctamente los escenarios dentro del juego. Se ha divertido con ello, también, riendo e incluso analizando las habilidades de cambio de dirección de un gato que se coló al emparrillado.
Es como si viviera en el 2006 nuevamente, cuando se convirtió en el quarterback de los Cowboys. Hubo una ola de Romo-manía. No siempre fue perfecto en lo que terminó siendo la última temporada de Bill Parcells como head coach, pero Romo era televisión obligada al tiempo que encendía a una franquicia que lideró hasta los playoffs. En el palco de televisión, no siempre es perfecto, tampoco, con algunos opinando que habla demasiado, pero es televisión obligada.
Luego del corte de Romo, pareció existir un aprecio por lo que realizó con los Cowboys como titular por una década. Dallas colocó el N° 9 en todos sus paneles digitales en The Star. El hotel Omni hotel en el centro de Dallas mostró el N° 9 en su fachada. Los Dallas Mavericks rindieron tributo a Romo firmándolo a un contrato. Disfrutó un día en la vida de los Mavs, sentado en la banca, en uniforme, durante un juego.
Los Cowboys mostraron su aprecio por Romo cuando regresó a trabajar su primer partido en el AT&T Stadium, colocando un "Gracias 9" arriba de una de las suites de las diagonales. Antes de la patada de salida inicial, Jason Witten narró una pieza resumiendo la carrera de Romo, la cual fue mostrada en las pantallas.
La historia de Romo debe ser celebrada. Pasó de ser un agente libre no reclutado procedente de Eastern Illinois hasta titular para el equipo de América. Se convirtió en el líder histórico de la franquicia en yardas aéreas y pases de touchdown. Pero solamente ganó dos partidos de playoffs y nunca avanzó al Juego de Campeonato de la NFC. Cuando sigues a los miembros del Salón de la Fama y ganadores del Super Bowl, Roger Staubach y Troy Aikman, eso es el estándar.
Lo único que no ha salido bien para Romo desde su corte sucedió hace algunas semanas en el Corales Puntacana Resort & Club Championship. Jugando bajo una exención del auspiciante que había buscado por largo tiempo, Romo no pasó el corte en su debut de la PGA, tirando un 82 en la segunda ronda.
Parafraseando a Romo luego de la derrota de final de temporada del 2008 ante los Philadelphia Eagles que impidió a los Cowboys meterse a playoffs, si eso es lo peor que le ha sucedido en los últimos 12 meses, ha sido un año bastante bueno.