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¿Son Los Angeles Rams el nuevo "Dream Team" de la NFL en el 2018?

LOS ANGELES -- La creciente emoción y las pesadas expectativas que rodean a estos Los Angeles Rams han sido mesuradas, parcialmente, por la desvanecida pero reciente presencia de una moraleja reciente.

Los Philadelphia Eagles del 2011, quienes llevaron el lastre de la etiqueta de "Dream Team" a través de una campaña desastrosa, han sido ocasionalmente vinculados a un cuadro de los Rams del 2018 que repentinamente está repleto de talento estelar.

En un lapso de seis días, del 28 de julio al 2 de agosto, esos Eagles sumaron siete jugadores de impacto a un equipo que venía de un título divisional. El quarterback Vince Young les concedió el sobrenombre que los acompañaría por el resto del año. Ellos pensaron que los llevaría hasta el Super Bowl. En lugar de eso, comenzaron con marca de 4-8 y al final se quedaron fuera de playoffs por primera ocasión en cuatro años. Reforzaron lecciones valiosas --que la agencia libre es riesgosa, que la química del equipo es frágil, y que el concepto de súper equipo podría no funcionar en la NFL.

Entonces, ¿qué nos dice eso respecto a los Rams de este año?

Bueno, nada... todavía.

Comparativas entre aquellos Eagles y estos Rams no pueden hacerse genuinamente hasta que se juegue la campaña. Pero existen algunas obvias similitudes, lo mismo que algunas notables diferencias. Vamos a repasar algunas, por pura diversión.

SIMILITUDES

Circunstancias: los Eagles ganaron la NFC Este, perdieron en la Ronda de Comodines, y luego, motivados por la idea de un resurgimiento en la posición de quarterback con Michael Vick, decidieron apostarlo todo. Añadieron a dos esquineros de élite --Nnamdi Asomugha y Dominique Rodgers-Cromartie-- así como el ala defensiva Jason Babin y el tackle defensivo Cullen Jenkins. También incluyeron al corredor Ronnie Brown, quarterback Young y al liniero ofensivo Evan Mathis.

Los Rams ganaron la NFC Oeste, perdieron en la ronda de comodines, y luego motivados por la idea de un quaretrback en desarrollo con Jared Goff, decidieron apostarlo todo. Sumaron a dos esquineros de élite corners --Aqib Talib y Marcus Peters--, un liniero defensivo dominante en Ndamukong Suh, y un genuino receptor abierto N° 1 en Brandin Cooks.

Incertidumbre en la posición de apoyador: los Eagles solidificaron a su secundaria con la esperanza de mejorar una unidad que permitió una entonces marca para la franquicia, 31 touchdowns, por aire en el 2010. Pero eso llegó a expensas de la posición de linebacker, donde integraron a un novato de cuarta ronda, Casey Matthews, y acarreaban interrogantes respecto a los titulares Jamar Chaney y Moise Fokou). Los Rams liberaron espacio bajo el tope salarial para sumar a Talib y Suh desprendiéndose de un par de piezas clave en el apoyador externo Robert Quinn y el apoyador interno Alec Ogletree, ambos siendo reemplazados internamente. En términos generales, esperan armar la unidad de linebackers de modo similar a lo que intentaron los Eagles.

Talento de impacto: sumar talento probado de alto impacto también significa la inyección de personalidades fuertes en un ecosistema volátil. Es una propuesta riesgosa que no funcionó bien con los Eagles (ejemplo: Asomugha supuestamente comía su almuerzo en el auto en días de prácticas en lugar de hacerlo con sus compañeros).

El reportero de los Eagles para ESPN, Tim McManus, quien cubriera al cuadro del 2011 para una filial de ESPN Radio en Philadelphia, no encuentra demasiadas similitudes obvias entre los Eagles del 2011 y los Rams del 2018.

"Pero ciertamente creo que la parte de la química puede ser aplicable", dijo McManus. "Es riesgoso siempre que juntas agentes libres caros de gran renombre y los sumas a un grupo que ya mostró cierta armonía, al menos desde lejos, como hicieron los Rams el año pasado. Se corre el riesgo de romper eso".

DIFERENCIAS

El recambio de coordinadores: los Rams perdieron a su coordinador ofensivo cuando Matt LaFleur emigró para unirse a los Tennessee Titans en enero. Pero para los Rams, el head coach Sean McVay manda las jugadas ofensivas. Buscará reemplazar a LaFleur por comité, con el coach de línea ofensiva Aaron Kromer sirviendo como coordinador del juego terrestre, y Shane Waldron fungiendo como coordinador de juego aéreo. Pero no mucho, en el peor de los casos, cambiará respecto a la ofensiva. Muchas cosas cambiaron, no obstante, cuando los Eagles cambiaron coordinadores defensivos en el 2011.

Sean McDermott fue despedido del puesto e inmediatamente reemplazado, inexplicablemente, por Juan Castillo, un veterano coach de línea ofensiva. Castillo no estaba listo para guiar a la defensiva. Convirtió al joven Matthews en su apoyador medio y encargado de las señales defensivas, un rol para el que no estaba preparado. También convirtió a Asomugha en un rover, forzándolo a aprender las jugadas para posiciones múltiples en el nuevo esquema. Ambos movimientos costaron a los Eagles. Los Rams cuentan con un coordinador defensivo legendario en Wade Phillips, quien solamente debe ayudar.

Cambios a lo largo de la línea ofensiva: en la lista de motivos por los que falló todo para los Eagles del 2011, la línea ofensiva se colocó casi en el fondo. Mathis fue quizás el menos reconocido de las nuevas adiciones, pero fue uno de los más productivos. Del 2010 al 2011, los Eagles mejoraron en porcentaje de capturas (8.0 a 5.5) y generaron casi tantas yardas por acarreo (5.4 contra 5.1). Pero integrar a una nueva línea ofensiva se convirtió en uno de múltiples ajustes de cara a la campaña, específicamente por el interior.

Los Eagles tenían a un nuevo guardia izquierdo en Mathis, además de un centro novato en Jason Kelce y un guardia derecho novato en Danny Watkins. Los Rams regresan con sus cinco titulares de la formidable línea ofensiva del año pasado --el tackle izquierdo Andrew Whitworth, guardia izquierdo Rodger Saffold, centro John Sullivan, guardia derecho Jamon Brown, tackle derecho Rob Havenstein--. Es una de las muchas razones por las que existe tanto optimismo.

El paro patronal: esta parte no se puede olvidar. Una disputa entre los jugadores y propietarios causó unparo patronal de 130 días de marzo a julio en el 2011. No se permitió a jugadores y coaches interactuar en ese momento. Las actividades organizadas del equipo nunca se celebraron, el campamento de entrenamiento fue abreviado, y los Eagles se apresuraron para integrar a varios jugadores nuevos en posiciones importantes. Eso les perjudicó. Los Rams no sufrirán ese problema. De hecho, McVay solamente estará más cómodo en su segunda campaña como entrenador en jefe de la NFL. Se puede decir lo mismo de Goff como quarterback de tercer año, ahora completamente adaptado a la ofensiva, y toda una defensiva que ahora está mucho más apegada a los principios de Phillips de esquema 3-4.

Si hay una cosa que los Rams pueden aprender de los Eagles, es lo siguiente: mantengan silencio.

La temporada de los Eagles podría haber dado el giro el 30 de julio durante lo que hubiera sido una rutinaria conferencia de prensa de campamento de entrenamiento. En una improvisada carpa cerca del campo de prácticas aquel día, Young portó un jersey rojo y visor en verde, y se le preguntó sobre todos los movimientos realizados por los Eagles en el abreviado receso de temporada. "Dream team", dijo, y echó a reír.

La frase, tan inocua como pudo parecer, llegó a los titulares a lo largo del país y colocó un blanco innecesario en la espalda de los Eagles, elevando la presión para una campaña que ya tenía suficiente. Los Rams no han hecho tales proclamaciones, pisando firmemente en el espacio entre la confianza y la humildad.

McVay espera que así se mantengan.

"Existe una confianza en este grupo que te hace sentir bien", dijo el coach, "pero creo que también debe existir humildad y entendimiento de que se debe ganar todos los días... es una liga muy competitiva. Hay otros 31 grandes equipos en esta liga que intentan conseguir lo mismo que nosotros. Sabemos que tenemos confianza en el personal que está aquí, pero también sabemos que ellos deben empezar desde cero todos los años. Ninguna parte del éxito que disfrutamos el año pasado no nos ganará encuentros este año, y pienso que nuestros jugadores respetan y comprenden eso".