FOXBOROUGH -- Los New England Patriots han trasladado su atención a los preparativos para el Super Bowl LIII frente a Los Angeles Rams, donde se destaca una dramática vuelta-en-U desde donde se encontraba el equipo hace apenas algunas semanas, a mediados de diciembre.
El quarterback Tom Brady y otros jugadores identificaron una derrota de visita por 17-10 ante los Pittsburgh Steelers, en que el equipo totalizó 14 castigos aceptados, como el punto en que la campaña dio vuelta para los Patriots. Fue la segunda derrota al hilo, siguiendo un colapso en la última jugada frente a los Miami Dolphins en la semana previa, para dejar la marca del equipo en 9-5.
"Fue como, 'Se nos estaba agotando el tiempo'", dijo el safety Devin McCourty, uno de los capitanes del equipo.
Tras enfocarse más en el juego terrestre y apretar las tuercas en partes de su defensiva, repentinamente habían cambiado de velocidad.
Semana 16: Patriots 24, Buffalo Bills 12
Semana 17: Patriots 38, New York Jets 3
Ronda Divisional: Patriots 41, Los Angeles Chargers 28
Juego de Campeonato de la AFC: Patriots 37, Kansas City Chiefs 31 (Tiempo extra)
"Encontramos el modo de jugar a nuestro mejor nivel en los últimos cuatro partidos", dijo Brady. "Buffalo, Jets, tuvimos la semana libre, gran partido ante los Chargers, jugamos realmente bien [ante los Chiefs]. Vamos a necesitar un partido grande más".
Una de las cosas que destacó para Brady fue cómo renació el ataque terrestre, lo que ayuda en un sitio como Arrowhead Stadium. Fue revelador que en la primera jugada del encuentro del domingo, los Patriots emplearon personal pesado, con los alas cerradas Rob Gronkowski y Dwayne Allen, y el fullback James Develin. El corredor Sony Michel consiguió ganancia de 11 yardas, y de cierto modo, impuso el tono.
"Juegas de visita, va a ser duro. Lo que viaja es correr el balón. Jugar duro. Eso sirve para cualquier clima, cualquier condición, cualquier ambiente, cualquier estadio", explicó Brady. "Esa fue parte importante de nuestro juego".
Los jugadores nunca renunciaron a la esperanza de que encontrarían su ritmo, incluso si eso tardó más de lo que anticipaban.
"Nos hubiera gustado que todo diciembre, y después del Día de Acción de Gracias, comenzáramos a caminar", aceptó McCourty. "Pienso que tuvimos destellos como equipo --ya sea frente a Minnesota [el 2 de diciembre], Green Bay [4 de noviembre], pero luego salimos y no jugamos nuestro mejor fútbol americano en Miami [9 de diciembre], y después Pittsburgh [16 de diciembre]".
Por eso el encuentro en casa ante Buffalo del 23 de diciembre fue tan importante.
"Buffalo fue como, 'Bien, chicos, esto es lo que se necesita'. Jugar en casa, ganar el campeonato de la división, fue como, 'Chicos, este es fútbol americano con nivel de campeonato. Es lo que necesitamos hacer'", señaló McCourty. "Y luego esencialmente jugar otro partido de playoffs la semana siguiente ante los Jets, salimos con ese tipo de mentalidad".
No han dejado de caminar desde entonces, ganándose el respeto del head coach Bill Belichick.
"Hay muchos jugadores mentalmente fuertes en ese vestidor, muchos jugadores físicamente fuertes en ese vestidor, muchos tipos que salen y compiten y no se rinden, simplemente te pelean, sin importar cuál sea la situación, y dejan que las fichas se acomoden como deben", explicó Belichick. "Creo que es un buen modo de hacerlo".
Esa fortaleza mental fue definida por la habilidad de ejecutar bajo presión.
"Pienso que hay un número de cosas pequeñas que cambiaron, pero al final, lo más importante que ha cambiado es cómo ejecutamos bajo presión", declaró el capitán de equipos especiales, Matthew Slater. "Sufrimos esas dos derrotas y no creo que nuestra mentalidad haya cambiado para anda. Seguíamos con la creencia, fe en nuestro proceso, mantuvimos la fe uno en el otro, per entendimos, que 'Ey, en algún punto esto debe reflejarse en el partido'. Debemos ser capaces de ejecutar bajo presión.
"Así que, creo hemos hecho un mejor trabajo de eso las últimas cuatro veces que hemos saltado al emparrillado, entendiendo que necesitamos jugar con un sentido de urgencia y no más 'Mi error', o 'Lo haré a la próxima'. Debíamos empezar a ejecutar allí".