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Cowboys son contendientes tras recontratar a DeMarcus Lawrence

FRISCO -- Los Dallas Cowboys necesitaban firmar a DeMarcus Lawrence.

Necesitaban a Lawrence porque como descubrieron luego de cortar a DeMarcus Ware tras la campaña del 2014, los "war daddies", como llama afectuosamente el dueño de los Cowboys, Jerry Jones, a los cazamariscales, no crecen en los árboles. Y lo hicieron, acordaron un contrato por cinco años y 105 millones de dólares con 65 millones garantizados, de acuerdo a una fuente.

Los Cowboys escalaron en la segunda ronda del draft en un canje con sus rivales de la NFC Este, los Washington Redskins, para tomar a Lawrence con la selección global N° 34 en el 2014. El movimiento no rindió frutos de inmediato, Lawrence no tuvo ninguna captura en temporada regular como novato, pero lideró al equipo en capturas en el 2015, tuvo problemas con una lesión en la espalda que requirió dos cirugías en el 2016 y registró 25 capturas combinadas en el 2017 y 2018.

Únicamente Aaron Donald (31.5), Chandler Jones (30) y Ryan Kerrigan (26) tuvieron más capturas que Lawrence en ese lapso.

Los Cowboys no iban a encontrar al reemplazo de Lawrence en el draft, incluso si tuvieran una selección de primera ronda este año. Los cazamariscales novatos casi siempre necesitan tiempo para desarrollarse y los Cowboys no están en posición de esperar.

Necesitan a Lawrence por el mensaje que manda al vestuario. Los Cowboys presumen que su objetivo es reclutar y desarrollar jugadores antes de firmarlos con lucrativas extensiones de contrato. La lista es impresionante: Terence Newman, Jason Witten, Bradie James, Tony Romo, Ware, Marion Barber, Jay Ratliff, Doug Free, Orlando Scandrick, Dez Bryant, Sean Lee, Tyron Smith, Tyrone Crawford, Travis Frederick, Terrance Williams y Zack Martin.

No todos los acuerdos salieron a la perfección. No todas las decisiones de dejar que otros jugadores se marcharan fue la correcta, tampoco. Los Cowboys no quieren jugar al fondo de los jugadores disponibles en la agencia libre. El riesgo es demasiado grande. Ellos quieren saber qué están comprando y con el historial de un jugador pueden hacer mejores suposiciones.

Es más que eso. Lawrence tuvo dos cirugías en el 2016. La primera operación de espalda no corrigió un problema de disco. Podría haberse marginado esa campaña, pero decidió seguir jugando a pesar que era evidente que no era el mismo jugador. Se perdió los últimos tres juegos de la temporada regular para estar listo para los playoffs de ese año.

¿Qué mensaje habrían enviado los Cowboys al resto del vestidor si dejaban ir a Lawrence o jugar otro año con la etiqueta franquicia, sobre todo después de demostrar que el 2017 no fue una casualidad con una segunda aparición consecutiva en el Pro Bowl? Algunos habrían apuntado al hecho que jugó lastimado y los Cowboys le dieron la espalda cuando llegó el momento de recompensarlo.

Pero primordialmente, sin embargo, los Cowboys necesitaban a Lawrence debido a lo que Jones más anhela: otro Super Bowl. La sequía está entrando a su año N° 24. Ha habido una generación de aficionados que no saben lo que se siente ver a los Cowboys ganar un Trofeo Lombardi. Todo lo que conocen son las viejas glorias del equipo con campeonatos hace muchos años y un espectacular estadio de 2,000 millones de dólares.

Los Cowboys no habrían sido un mejor equipo sin Lawrence. Sin la extensión de contrato, nadie sabe exactamente cuándo se habría sometido a la cirugía de hombro o reportado para jugar un partido. No se iba a presentar para el programa de temporada baja o el campamento de entrenamiento. Quizás se habría reportado en la Semana 1, ¿pero en qué forma habría estado?

Cuando uno ve las adiciones que los Cowboys que hicieron en la temporada baja, en lo individual, no se mueve la aguja. Llevando de vuelta a Witten, firmando a Randall Cobb y adquiriendo en canje a Robert Quinn, sumaron piezas a lo colectivo. Significan aún más porque Lawrence tiene un contrato multianual.

Los Cowboys necesitaban a Lawrence por una sencilla razón: los convierte en un contendiente del Super Bowl.