FOXBOROUGH -- Cuando Julian Edelman fue nombrado Jugador Más Valioso del Super Bowl LIII, se convirtió en apenas el séptimo receptor abierto en obtener ese honor en el escenario más grande de la NFL.
El ex receptor abierto de los New England Patriots, Deion Branch, también forma parte de ese grupo, habiendo registrado 11 atrapadas para 113 yardas en una victoria por 24-21 sobre los Philadelphia Eagles en el Super Bowl XXXIX. Branch, resulta, también estuvo en el campo de prácticas de los Patriots como asistente voluntario a inicios de este mes, lo que le permitió observar de cerca a Edelman. Fue muy diferente a lo que recordaba Branch de sus tres campañas finales con el equipo (2010 al 2012).
"Simplemente ser capaz de ver crecer a Julian desde el Julian de aquellos días cuando yo estaba aquí, al Julian del 2019, ahora es el que manda en la sala de los receptores", dijo Branch. "Siempre le dije eso, 'Solo sé paciente. Comprende el proceso. Tu tiempo llegará'. Es ahora".
¡Vaya que lo es!
Uniéndose a algunos de los más grandes en la historia de la NFL en la fraternidad de JMV del Super Bowl --un grupo que incluye a su mejor amigo Tom Brady y a los jugadores de los San Francisco 49ers que creció admirando, como Joe Montana, Jerry Rice y Steve Young-- sirve como recordatorio de que la estrella de Edelman, de 33 años de edad, nunca ha brillado más.
Recibió el tratamiento de estrella de rock mientras desfiló por la alfombra roja del Genesis Prize 2019 en Jerusalén la semana pasada, antes de obligar al anfitrión Martin Short a abandonar el escenario como parte del programa preestablecido en la noche. Short estaba bromeando sobre cómo había solamente unos cuantos atletas judíos notables en la historia deportiva, antes de que Edelman llegara Edelman, tomara control del show, e invitara a la audiencia de unos 600 a observar un video de ellos.
Edelman, por supuesto, fue parte del video. Más tarde, cuando alguien lo felicitó por su ascenso como jugador y una extensión de contrato que incluye 12 millones de dólares en garantías, Edelman compartió lo que parece ser su lema para el 2019: "Simplemente hay que seguir adelante".
Está haciendo justamente eso, tanto sobre el campo, donde fue una de las presencias líderes en el minicampamento obligatorio, como fuera de él, donde desfilará sobre otra alfombra roja este jueves en Foxborough para presentar su documental en Showtime, el cual tiene programado debutar este viernes.
Pese al incremento en la atención, aquellos que le rodean insisten en que Edelman no ha cambiado.
"Julian se lo ganó y merece todo lo que recibe. Es un joven muy trabajador, y sigue siendo el mismo", señaló Branch. "Una cosa que diré sobre Julian no cambiando, es que se sigue frustrando sobre el campo: siempre está impulsado a ganar. En un punto [a inicios de este mes] estábamos sobre el campo y la defensiva hacía tan buen trabajo --aunque Julian sabía que el coach [Bill] Belichick estaba haciendo algunas cosas para anularlo-- lo que insistía era, 'Chicos, tenemos que empezar a funcionar. No estamos luciendo bien y debemos hacer algunas jugadas'. Esa es una posición en la que podría hallarse esta temporada: enfrentando doble y triple cobertura".
Si es el caso, Edelman podría enfrentar un obstáculo adicional cuando se trata de elevar su nombre en la discusión de los mejores receptores.
Edelman suma 115 recepciones de postemporada, detrás únicamente del miembro del Salón de la Fama, Jerry Rice (151). Edelman ha promediado 6.3 atrapadas por partido en playoffs, y si mantiene ese paso, necesitará jugar en seis encuentros más para alcanzar a Rice. No es una idea descabellada para Edelman, cuyo contrato ahora se extiende hasta la campaña del 2021.
Su marca de 1,412 yardas en recepciones de postemporada ranquean segundo en la historia de la NFL, pero a Edelman le costará trabajo alcanzar a Rice (2,245) en esa categoría.
Otra categoría en la que tiene mejores posibilidades de alcanzar a Rice es en partidos de 100 yardas en playoffs. Edelman suma, que lo empata con Michael Irvin detrás de los ocho de Rice. Pero Rice jugó en 29 encuentros de postemporada para alcanzar esa marca, mientras que Edelman ha participado en 18.
Edelman ya es el líder de todos los tiempos en la NFL para postemporada con 443 yardas en devoluciones de despeje, una parte de su juego que a veces se olvida y contribuye para que los Patriots prevalezcan en la batalla por la posición de campo. Ningún jugador ha devuelto más patadas de despeje (39) en los playoffs.
"He logrado metas en el pasado, y cuando haces eso, te pones nuevas metas", dijo Edelman. "He sido bendecido y afortunado por lograr muchos de mis sueños, pero todavía hay cosas que quiero alcanzar".
Ha recorrido un largo camino para llegar hasta este punto, un recluta de séptima de ronda del 2009 que debió hacer la transición de quarterback universitario a receptor abierto profesional.
Y ahora, Jugador Más Valioso del Super Bowl.
"Ser parte de este sistema actual y saber cuál es la expectativa por lo que respecta a la posición de receptor abierto, pienso que la versatilidad de Julian es como la de los tipos que pasaron antes que él", precisó Branch. "Aquí hay otro tipo que es versátil dentro de la ofensiva, en cada una de las posiciones, desde la X, la Z, la Y, y la F. Simplemente ser intercambiable, y al vuelo, ser capaz de procesar y ejecutar cada posición. Creo que es tan importante para tu conocimiento y crecimiento. Tu coeficiente intelectual de fútbol americano. Es lo que veo de Julian".