El receptor abierto de los Miami Dolphins, Kenny Stills, dijo que él y el propietario del equipo, Stephen Ross, hablaron y acordaron "quedar en desacuerdo", después de una disputa por un evento para recaudar fondos para el presidente Donald Trump.
Stills dijo a The Palm Beach Post el martes que él y Ross charlaron por teléfono para discutir los comentarios públicos del receptor abierto en el sentido de que Ross no podía presumir por un lado la lucha por la igualdad y en contra del racismo, y al mismo tiempo apoyar a Trump.
"No hay mucho qué discutir", dijo Stills al diario. "Tiene sus sentimientos al respecto y está firme con eso, y lo respeto. Pero estoy en desacuerdo y le dije que no hay resentimientos. No hay disputa, y vamos a ganar algunos partidos este año".
Stills inicialmente arremetió en contra de Ross y su RISE Foundation en una publicación por redes sociales del 7 de agosto. Le dio seguimiento, defendiendo sus comentarios el pasado jueves, señalando, "alguien tiene que tener el suficiente coraje para hacerle saber [a Ross] que no puede jugar a ambos lados de esto".
Los comentarios incitaron a la reacción de muchos, incluyendo los del head coach de los Dolphins, Brian Flores, y Diahann Billings-Burford, CEO de la fundación de Ross. Flores dijo el jueves que respetaba la posición de Stills, pero hubiera deseado que lo manejara en privado. Billings-Burford dijo a Jason Reid de The Undefeated el viernes que el evento para la recaudación de fondos creó "conversaciones difíciles", pero que Ross debe seguir como parte de RISE, que tiene como metas "eliminar la discriminación racial, apoyar la justicia social, y mejorar las relaciones raciales".
Trump recaudó 12 millones de dólares en un par de eventos celebrados el viernes, incluyendo el que ofreció Ross, de acuerdo al Republican National Committee. Previo a los eventos, el presidente elogió a Ross como "gran amigo" y "tipo muy exitoso", y dijo que el escrutinio probablemente sería positivo para el propietario del club.
Luego de los tweets de Stills, Ross emitió un comunicado señalando que ha sido amigo de Trump por 40 años, y aunque están de acuerdo en algunas cosas, "estamos en fuerte desacuerdo con otras", y que nunca ha sido "tímido" a la hora de expresar sus opiniones al presidente.
Stills, quien previamente dijo haber recibido amenazas de muerte por su publicación, dijo al Post que no haría nada diferente para dar a conocer su perspectiva.
"Definitivamente pienso desde un punto de vista profesional, lo correcto hubiera sido contactarlo primero", admitió Stills, "pero a lo largo de las conversaciones que hemos tenido y la historia que tenemos, llega a un punto donde solamente soy una persona que comparte el mensaje, dejando saber a otros lo que sucede".
Información de Cameron Wolfe y AP fue utilizada en la redacción de esta nota.