HOUSTON -- Los Houston Texans dieron un golpe de autoridad y credibilidad en casa ante los New England Patriots, este Domingo por la Noche.
Y va mucho más allá del contundente triunfo 28-22. Los Texans mostraron actitud, carácter y, sobre todo, preparación, plan de juego de ambos lados del balón para superar a los Patriots en todos los aspectos ofensivos y defensivos.
Así, los Texans serán considerados, al menos esta semana, líderes divisionales verdaderos, por méritos propios en el Sur de la Conferencia Americana, y no por debilidad de sus rivales de grupo.
“Sabemos que aún faltan cuatro partidos de temporada”, dijo el quarterback de los Texans, DeShaun Watson. “Pero ganar ante un buen equipo siempre da motivación para seguir trabajando y para convencernos a nosotros mismos que podemos competir contra quien sea”.
“Pero también es más especial cuando notas las ganas de jugar de todos en equipo”, agregó. “De hacer jugadas, de defender tu casa, de seguir adelante. Este fue un buen juego de equipo completo”.
Watson tuvo una noche brillante. Pasó, corrió y hasta cachó como líder de una ofensiva que produjo 276 yardas y fue contundente cuando tuvo oportunidades. Su ataque convirtió 55 por ciento de situaciones de tercera oportunidad y mantuvo el dominio a pesar de que tuvo el balón casi 10 minutos menos que los Patriots; 25:25 minutos contra 34:25.
El quarterback de los Texans lanzó tres pases de touchdown y corrió para otro. Completó 18 de 25 envíos para 234 yardas. Fue apenas la segunda ocasión en toda la temporada que los Patriots reciben 15 puntos o más.
“DeShaun estuvo brillante esta noche”, consideró el esquinero de Houston Jonathan Joseph. “Hizo jugadas con el brazo y con las piernas, pero sobre todo con su cabeza. Supo reconocer lo que tenía enfrente, lo que la defensa de ellos podría darnos y ejecutó como maestro. Crece como quarterback todos los días frente a nuestros propios ojos”.
Joseph fue parte de una defensa que contuvo, por momentos permitió, pero jamás se dobló. Más importante, hizo jugadas para ayudar a su ataque. Presionó todo el juego a Brady y hasta logró tres capturas.
Tom Brady sufrió una intercepción y en el segundo cuarto apenas había completado siete pases en 20 intentos para 82 yardas, sin anotación y con esa intercepción del esquinero Bradley Roy, que puso las cosas para que los Texans tomaran el dominio desde el primer cuarto y ya nunca voltearan para atrás.
Al final, Brady compuso sus estadísticas ya con cierto permiso de la defensa de Texans cuando el partido estaba prácticamente decidido en el último cuarto. Salió del NRG Stadium con 24 de 47 pases completos para 326 yardas y tres touchdowns, su mayor cantidad de la temporada en ambos rubros. También tuvo una carrera de 13 yardas.
“Difícil ponerse tan atrás y regresar”, dijo Brady, después de que los Pats estuvieron 21-3 abajo en el tercer cuarto, y 28-9 en el último. “Nosotros mismos nos pusimos en un hoyo bien profundo. Tú no puedes hacer eso como visitante”.
“No cumplimos con el trabajo”, añadió. “Una derrota es una derrota. Hay que aprender de esto y seguir adelante”.
Los Patriots (10-2) tendrán que prolongar al menos una semana más su espera para asegurar su lugar en la postemporada de manera matemática.
La próxima jornada reciben a los Kansas City Chiefs (8-4); mientras que los Texans (8-4) se quedan en casa contra los Denver Broncos (4-8).