MIAMI -- No se acostumbren demasiado a seguir viéndolos en rol de coordinadores. En un Super Bowl donde el enfrentamiento entre la unidad ofensiva de los Kansas City Chiefs y la unidad defensiva de los San Francisco 49ers se ha robado la mayor parte de la atención previa al juego, los dos hombres a cargo, Eric Bieniemy y Robert Saleh, trabajan diligentemente detrás de cámaras.
En algún punto del futuro, el esfuerzo se verá recompensado con un puesto de head coach.
Ambos asistentes fueron parte de los procesos de entrevista de las vacantes que abrieron recientemente en otras franquicias. No obstante, ninguno de los cinco equipos que contrataron entrenador en jefe en las semanas recientes le dio la oportunidad a Bieniemy o Saleh, a pesar de que lideran, ambos, unidades de élite para los campeones de ambas Conferencias.
Cualquiera podría decir que dirigir talento del nivel con el que cuentan facilita el trabajo. Es verdad. No todos los asistentes de la NFL cuentan con jugadores como Patrick Mahomes, Tyreek Hill, Sammy Watkins, Travis Kelce, en el lado de los Chiefs, o con Nick Bosa, DeForest Buckner, Richard Sherman o Kwon Alexander del lado de los Niners.
"Lo facilitan", admitió Saleh a ESPN el jueves. "Cuando tienes a un grupo talentoso como el que tienes, lo facilita. Te permiten jugar mucho más rápidamente en la parte de atrás, porque sabes que el reloj del quarterback se acelera, pero lo que lo hace grandioso es que son tan buenas personas. Es un placer dirigirlos. No puedo decir suficientes cosas buenas de ellos".
Un día antes, Bieniemy expresó el mismo mensaje a ESPN.
"Es una bendición tener la oportunidad de trabajar [con ellos]", dijo Bieniemy. "Y no es tanto el talento, sino las personas, y creo que eso se pierde entre todo. Tenemos una tremenda cantidad de grandes personas. El talento, obviamente habla por sí mismo. Pero las personas con las que trabajamos. No se podría pedir a un grupo con mejores personalidades, a un grupo de mejores hombres, que comprende lo que se requiere para hacerlo juntos, y ser responsables con los demás. Esas son las cosas que nos ayudan a salir allá a jugar tan bien como lo hacemos. Porque estos chicos se quieren, les gusta jugar para los demás, y esperan un estándar alto de los demás, y por eso hemos tenido el éxito que hemos tenido desde que estamos aquí.
No obstante, también supone un reto mayor, puesto que las expectativas no son tan altas con otro tipo de jugadores. Cuando Mahomes es tu quarterback, la afición espera que compitas por el título todos los años. Lo mismo sucede con nombres como Tom Brady, Drew Brees o Aaron Rodgers.
Quizás lo más interesante del duelo que nos espera el domingo tiene que ver con lo que cada equipo hace de mejor manera. los Niners fueron el equipo que utilizó cobertura de zona con la segunda mayor frecuencia en la liga, mientras que los Chiefs fueron el equipo más exitoso por aire contra coberturas de zona.
¿Qué va a ceder en el Super Bowl LIV, el objeto inamovible o la fuerza irresistible?
Si algo podemos esperar es que ambos equipos se recarguen en aquello que los llevó hasta aquí.
No obstante, ambos equipos esperan encontrarse, aquí y allá, con cosas que nunca se han visto en el año. Después de todo, qué mejor momento para estrenar una variante nueva que en el Super Bowl (¿Philly Special, alguien?).
"Siempre hay algún tipo de matiz, alguna bola curva, así que va para ambos lados", dijo riendo Saleh esta semana a Josina Anderson de ESPN. "Siempre tenemos algo".
Eso sí, con dos semanas para preparar el juego, hay que cerciorarse de no querer excederse en cuanto al plan de juego que se quiere instalar, dijo Bieniemy.
"Nosotros nos enfocamos en crear todo el plan de juego la semana pasada, como si fuéramos a jugar este domingo previo", acotó el coordinador ofensivo de los Chiefs el miércoles. "Así que nos queríamos asegurar de que mantuvimos a los chicos en la misma rutina, con el mismo calendario de instalación. No quisimos ponernos en ese predicamento [de excedernos en los preparativos]. Ahora, mantenemos el mismo calendario esta semana, pero simplemente nos aseguramos de mantener el curso, porque si confiamos lo suficiente en lo que instalamos la semana pasada, ey, eso fue suficientemente bueno. Solo queremos mantener consistencia. No queremos cambiar nada, ni desviarnos de lo que tenemos, y que los jugadores estén pensando de más. Solamente queremos que jueguen fuerte, que jueguen rápido, y que jueguen sólido".
Los dos predecesores de Bieniemy coordinando a la ofensiva de los Chiefs, bajo el mando de Andy Reid, son ahora entrenadores en jefe: Doug Pederson con los Philadelphia Eagles y Matt Nagy con los Chicago Bears.
Saleh aprendió de Gus Bradley, ex coordinador defensivo de los Seattle Seahawks y entrenador en jefe de los Jacksonville Jaguars, buena parte de los conceptos de cobertura de zona que emplea en San Francisco.
En el actual proceso de contrataciones, Bienemy y Saleh no encontraron las oportunidades que buscaron, pero incluso en un momento en que la "Regla Rooney" parece vivir una época de crisis en la liga --solamente hay cuatro head coaches minoritarios en la NFL--, parece que solamente es cuestión de tiempo para que podamos ver a Bieniemy y Saleh dirigiendo a otras organizaciones desde el puesto más alto.
Y un triunfo en el Super Bowl LIV sería la mejor carta de presentación.