Johnny Manziel está en un punto de su vida donde está listo para conceder que su carrera de fútbol americano está probablemente "en el pasado".
El ex quarterback de los Cleveland Browns hizo la declaración en entrevista con el Lubbock Avalanche-Journal para una historia que fue publicada el sábado.
"En el pasado, probablemente, sería como yo la caracterizaría", dijo Manziel al diario cuando se le preguntó sobre su carrera de fútbol americano. "He llegado al punto donde intento alcanzar la felicidad en la vida, no la felicidad sobre el campo de fútbol americano.
"Sé que muchas personas probablemente desean que regrese y juegue y le dé otra oportunidad, pero no lo sé, por lo que respecta a ser una persona y descifrando la vida como adulto joven --tratando de lograrlo y comprenderlo-- si alguna vez he estado en un mejor lugar del que estoy ahora. Honestamente, puedo decir que estoy contento y haciendo las cosas correctas para intentar poner una sonrisa en mi rostro todos los días, y eso significa más para mí que salir allá a desgastarme en un campo de fútbol americano".
Manziel, de 27 años de edad, jugó por última vez con el Memphis Express en la Alliance of American Football, en el 2019, antes de que la liga se viniera abajo. Se unió a la AAF tras ser cortado por los Montreal Alouettes de la Canadian Football League. Esa liga determinó que no podía jugar para otro equipo de la CFL.
Cleveland seleccionó al ganador del Trofeo Heisman con el turno N° 22 global en el draft del 2014. Pero luego de dos campañas tumultuosas, los Browns lo liberaron en marzo del 2016; consiguió marca de 2-6 como su titular.
"Durante ese tiempo cuando fui reclutado, no invertí el tiempo que necesitaba para ser un gran jugador, y creo que mi corazón no estaba en ello", explicó Manziel al diario. "Y pienso que cuando fui a Canadá, fue lo mismo. Realmente creía y realmente pensaba que era lo que deseaba hacer, y mi corazón no estaba en ello, y las cosas resultaron así".
Manziel ha tenido varios problemas fuera del campo. En el 2016, un cargo por agresión doméstica en su contra en Dallas fue desechado luego de que se sometiera a un curso para el control de la ira, y que se integrara al programa de abuso de sustancias de la NFL. En una entrevista de febrero del 2018, dijo que había sido diagnosticado con desorden bipolar, y que había dejado de beber.
Ahora viviendo en Scottsdale, Arizona, Manziel dijo al periódico que el fútbol americano lo hizo "humilde", y que está agradecido por ello.
"Agradezco a Dios por haber tenido la oportunidad de haberme hecho humilde, porque cuando crees que estás en la cima del mundo, es un sitio peligroso", dijo.
Reveló al diario que está agradecido por el impacto de Kliff Kingsbury, su ex coordinador ofensivo con Texas A&M. Dijo que Kingsbury, ahora head coach de los Arizona Cardinals, es un "tipo que cambió mi vida para mejorarla, y con quien siempre estaré agradecido".
Manziel disfrutó una histórica campaña del 2012 con los Aggies, culminada cuando se convirtió en el primer freshman en ganar el Heisman. También se convirtió en el primer freshman en la historia de la NCAA en pasar para 3,000 yardas y correr para 1,000 yardas en una temporada.
Su éxito colegial no se tradujo al fútbol americano profesional, y la etiqueta de ser un fracaso de NFL se ha quedado con él, pero dijo al Avalanche-Journal que está contento con lo que pudo lograr.
"La gente me puede decir lo que quiera, pero al final del día, estoy orgulloso con lo que hice. Estoy orgulloso de lo que logré. Me hice mejor. Mejoré la vida de mi familia. Tuve la oportunidad de jugar a un nivel increíble el fútbol americano colegial, y no funcionó en la NFL, y está bien", expresó.