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Kyler Murray espera que sus piernas se conviertan en "un lujo" para la ofensiva de Cardinals

El quarterback Kyler Murray no quiere que el ataque de Arizona deba depender demasiado de su capacidad para correr con el ovoide

TEMPE -- Después de que los Arizona Cardinals perdieran un partido que debieron haber ganado ante los New England Patriots en noviembre pasado, el quarterback Kyler Murray dijo lo que tenía que decir como líder de Arizona y rostro de la franquicia de los Cardinals.

Desvió y elogió.

"No creo que yo tenga que correr para que nosotros seamos exitosos", dijo Murray después de la derrota por 3 puntos en que lanzó para 170 yardas y corrió para 31, 15 de las cuales llegaron en una sola jugada.

Lo que no se sabía entonces, es que Murray había sufrido su segunda lesión de hombro de la campaña una semana antes en una derrota ante los Seattle Seahawks, causándole mostrarse más protector hacia su cuerpo. Y eso, lo hizo más cauteloso como corredor.

Murray sabía que tenía que correr para que los Cardinals ganaran. Sabía que, si no podía correr, la ofensiva de los Cardinals sufriría a lo largo del resto de la campaña. Tuvo razón, y ahora sabe que las cosas necesitan cambiar.

"Honestamente, el modo en que lo veo, mis piernas deben ser un lujo", explicó Murray durante el minicampamento de Arizona a mediados de junio. "Y no fue así el año pasado. Era más algo como yo obligado a correr en cierto sentido, y una vez que mi hombro quedó lastimado o lo que sea, y no estaba intentando arriesgarme allá afuera y recibir esos golpes y cosas así, nos caímos en un hoyo".

Murray se lastimó en primera instancia el hombro durante una derrota de la Semana 9 ante los Miami Dolphins. Se lastimó de nuevo 11 días más tarde en contra de los Seahawks.

Esas dos derrotas comenzaron una caída estrepitosa para Arizona, que perdió tres en fila y cuatro de cinco, y hubieran sido cinco consecutivos de no haber sido por un pase 'Ave María' de Murray al receptor abierto DeAndre Hopkins.

Con la ayuda de seis meses de perspectiva, Murray mira atrás a la segunda mitad de la campaña, en que Arizona se fue con marca de 3-6 y quedó fuera de playoffs, como una bendición disfrazada.

"Honestamente, creo que fue bueno para nosotros", dijo Murray. "Pienso que fue una lección para nosotros de que no podemos ser unidimensionales. Debemos ser mejores en todas las áreas, todos los aspectos del juego y hacer las cosas pequeñas bien porque, como les dije el año pasado, comenzamos encendidos y hacia el final, estábamos perdiendo partidos que no debimos perder, y esa es una señal de inconsistencia y no hacerlo todo bien, dentro y fuera del campo. Así que, como dije, es una lección para nosotros. Creo que seremos mejores por ello".

La producción de Murray cayó en esos nueve partidos finales. Pasó de correr para 62.4 yardas por juego en los primeros siete a 42.1 en los nueve finales, y de lanzar para 263.9 yardas por encuentro a apenas 236.

"Cualquiera puede ver dónde empezaron a cambiar un poco las cosas, estilo de juego y producción, cosas de esa naturaleza", dijo el head coach Kliff Kingsbury. "Esa es parte de jugar en esta liga y creo que él hizo un buen trabajo de seguir adelante. Esa es parte de jugar en esta liga y creo que hizo un buen trabajo de empujar hacia adelante. Estuvo muy incómodo a lo largo de la campaña, y siguió saliendo y dándolo todo lo que tenía para tratar de ganar partidos.

"Esperamos, podamos mantenerlo sano y mantenernos en el camino, pero aprendió algunas lecciones valiosas en todo ello".