La visita de Boca Juniors a Defensa y Justicia por la sexta fecha del Torneo de la Liga empezó con todo y, en apenas 35 minutos, el Halcón ya ganaba 2-1, con la particularidad de que los tres goles implicaron leyes del ex.
El encargado de abrir el marcador fue Santiago Ramos Mingo, quien a comienzos de 2020 se negó a renovar y se fue al Barcelona por la patria potestad, sin llegar a debutar en la Primera División del Xeneize.
El defensor de 22 años, con experiencia en el Barcelona B y el OH Leuven II belga, se encontró con la pelota en el área tras un córner y, aprovechando la tibia salida de Sergio Romero, anotó el 1-0 a los 13 minutos. Inmediatamente, el cordobés le pidió perdón al club que lo formó.
La herida pudo ser peor para Boca, ya que en la jugada siguiente Aaron Molinas, otro surgido del club, estampó el 2-0, pero el árbitro Leandro Rey Hilfer lo anuló por considerar que la pelota había salido por la línea de fondo (como la jugada fue interrumpida antes, no podía ser revisada por el VAR).
Y justamente la tecnología actuó poco después para sancionar la clara mano de Ayrton Portillo. Miguel Merentiel, que entre 2020 y 2022 la rompió en el Halcón de Varela, ganando los históricos títulos internacionales y anotando 27 goles, se hizo cargo y no falló. Su compatriota Cristopher Fiermarín fue para el otro lado y la Bestia anotó el 1 a 1, para realizar el segundo pedido de perdón de la noche.
Todo parecía calmarse en el Tito Tomaghello, pero Molinas volvió a aparecer en acción a los 35 minutos y no perdonó: el ex Boca, cuyo pase fue comprado este año por Defensa, sacó un gran remate de afuera del área y venció a Chiquito Romero.