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          Boca no pudo con Riestra y La Bombonera reaccionó: las cinco postales que dejó el empate del equipo de Gago

          • Mariana Barasoain
          28 de oct, 2024, 06:34 ET

          Boca recibió a Riestra, en lo que fue el primer partido de Fernando Gago como DT en La Bombonera, y ESPN.com estuvo ahí para presenciar una jornada que dejó mucho más que los recortes deportivos de un flaco 1-1. Recibimientos estelares, abucheos lapidarios y mucha tensión fueron parte del intenso domingo que se vivió en el Alberto J. Armando.

          El partido ya arrojaba titulares desde la previa: el cruce entre el Xeneize y el Malevo iba a significar el debut en el banco de La Boca de un ídolo del club, otro de los tantos que después de colgar los botines volvieron a Boca para agarrar la pizarra. Además del estreno de Gago, Chiquito Romero se reencontraría con los hinchas después del polémico episodio ante River, que terminó en sanción y pérdida del puesto (con un intervalo fatídico en el que volvió para la goleada 3-0 en Victoria ante Tigre).

          Como ya se hizo costumbre, en Boca hace tiempo que no hay semanas tranquilas. Entre cuestionamientos a la dirigencia, mercados de pases conflictivos y el opaco presente futbolístico, el clima se fue tornando irrespirable en el club de la Ribera. Y allí apareció Gago, aún sin saber si llegó para renovar las energías de un equipo golpeado o para embarrarse con un proyecto maltrecho.

          En ese contexto tocó en el calendario el cruce con Riestra, el equipo que conduce un exenemigo como el Ogro Fabbiani. El partido era la oportunidad para hacer borrón y cuenta nueva, pero las cosas no salieron según lo planeado.

          Estos son cinco recortes de una tarde de domingo tan hermosa como eufórica en La Bombonera.

          1- La voz del estadio, el "aplausómetro" y un veredicto irreversible de los hinchas

          Después de que Romero reaccionó violentamente contra un hincha de Boca al perder el Superclásico algo se rompió entre Chiquito y la gente. Al tiempo de que su desempeño comenzó a generar murmullos, Gago llegó desde Chivas de México y decidió respaldar al exarquero de la Selección.

          En su primer partido como DT, Pintita puso a Romero en el arco y Tigre le metió tres goles. Después de eso, Brey se quedó con su lugar y, para colmo, tuvo una actuación soberbia en la tanda de penales ante Gimnasia, a quien eliminó de la Copa Argentina. Ante Riestra, el DT ratificó al joven guardamenta como titular y mandó a Chiquito al banco.

          Había expectativa por conocer con qué escenario se iba a encontrar el ex-Venezia y qué tan duro sería el careo con La Bombonera. ¿Qué pasó? Cuando los arqueros salieron a realizar los movimientos precompetitivos, la cancha se vino abajo para ovacionar al pibe del club, que caminó con el pecho inflado hasta el arco de Casa Amarilla y saludó a la gente.

          Cuando Brey apareció en la formación titular, los hinchas xeneizes dieron su veredicto y dejaron en claro que ya no quieren que nadie le quite los guantes al pibe.

          Sin embargo, con Romero no hubo hostilidad. Al parecer, el público respetó al responsable de que Boca haya jugado la final de la CONMEBOL Libertadores 2023 y tuvo piedad. Incluso durante los ejercicios precompetitivos algunos socios intercambiaron saludos desde los palcos y prácticamente no hubo silbidos o murmullos para él cuando la voz del estadio mencionó su nombre entre los suplentes.

          2- Cálido recibimiento para Gago, en su "regreso a casa"

          En un club que valora como pocos a quiénes supieron defender con orgullo los colores, el reencuentro con Gago no podía dejar más que emotivas postales. Primero, el DT fue aplaudido en el anuncio del partido. Luego, fue ovacionado con su aparición en el césped de La Bombonera.

          Desde la tercera bandeja de la zona de plateas bajó una bandera inmensa que rezaba "Bienvenido a tu casa, Fernando" y el DT se emocionó. Caminó perseguido por cámaras, iluminado por flashes y cruzó el campo de juego hasta tomar posesión de ese banco que supo comandar, entre otros, Carlos Bianchi o Alfio Basile.

          3- Los méritos de Riestra: un gol para encuadrar y un arquero brillante

          Riestra fue a La Boca a jugar de contra, sin intenciones de volver con las manos vacías: defendió con oficio y supo pegar cuando tuvo la chance. Al equipo de Cristian Fabbiani le alcanzó para llevarse un punto en el primer cruce de la historia del club con el Xeneize y, encima, lo hizo en la mística La Bombonera.

          ¿Quiénes fueron los principales responsables de la hazaña? En primer lugar, Brian Sánchez, que hizo un gol premium: la controló de pecho y se la picó a Brey, que nada pudo hacer. Y en segundo lugar, Ignacio Arce, la figura indiscutida de la cancha.

          El arquero de Riestra dio una clase magistral de atención, timing y personalidad. Se hizo enorme en un estadio difícil y se ganó el respeto de todos los presentes. Solo Edinson Cavani pudo quitarle la valla invicta, pero después de que le ahogaron el grito en reiteradas ocasiones (a él y a varios de sus compañeros).

          4- La particular reacción de La Bombonera con Pol Fernández

          Después de confirmar que saldría del club y por su rendimiento dentro del campo, Pol desgastó aceleradamente su vínculo con los hinchas xeneizes. Este domingo, el mediocampista fue silbado por una parte del estadio pero también fue protagonista de una curiosa situación.

          Cuando se acercaba el final del encuentro, Riestra obtuvo una contra inmejorable y, como Alonso ya había desparramado a las marcas y se iba solo, Pol Fernández tiró una falta durísima para cortar el juego. Yael Falcón Pérez no dudó y le mostró la tarjeta roja y la gente reaccionó de una forma muy peculiar. Por un lado, despidió al jugador con abucheos. Pero, por otro y en simultáneo, lo aplaudió camino al vestuario por evitar la caída sobre el final, mientras él pedía disculpas. Fue una escena llamativa y por demás confusa.

          5- Empate con gusto a poco y llamado de atención para los jugadores de Boca

          El público de Boca interpretó que el equipo estaba buscando activamente el resultado y acompañó con aliento incansable durante la totalidad del encuentro. Como es costumbre cuando el Xeneize no juega bien, se escucharon algunas canciones pidiendo mejorar en la actitud, pero no pasó a mayores.

          Sin embargo, una vez terminado el encuentro con el frustrante 1-1, aparecieron los insultos para los jugadores. No fue unánime el repudio, se trató de un sector del estadio. Pero esas voces fueron suficientes para que el mensaje se oiga fuerte y claro: la camiseta de Boca no la puede vestir cualquiera.

          Fue un llamado de atención importante para un equipo que pende de un hilo y deposita todas sus ambiciones deportivas del año en ganar la Copa Argentina y así clasificarse a la próxima Libertadores.

          Los mejores momentos de Boca vs. Riestra, en imágenes

          SportsCenter repasó todas las acciones destacadas del empate 1-1 entre Boca y Riestra en La Bombonera.