Marcelo Gallardo y Fernando Gago volverán a cruzarse este domingo, cuando River Plate reciba a Boca Juniors en el Monumental por la decimoquinta fecha del Torneo Apertura. Y más allá del peso histórico del Superclásico, hay otro duelo que cada vez gana más atención: el de los entrenadores. Dos generaciones, dos ideas, dos trayectorias bien distintas que se miran de frente.
El Muñeco, emblema moderno de River, volvió al club para su segundo ciclo con la vara muy alta. Su primera etapa, entre 2014 y 2022, lo transformó en uno de los entrenadores más ganadores y respetados del fútbol sudamericano. Tras un tiempo de pausa, regresó para renovar ilusiones. Gallardo, sin embargo, sabe que ya no alcanza con el pasado: el presente exige resultados, juego y autoridad. Y no hay mejor escenario para recuperar todo eso que un clásico ante el eterno rival.
Del otro lado está Gago, joven, metódico, con una propuesta que prioriza la posesión y el orden. Luego de su paso por Aldosivi y Racing, asumió en Boca con la idea de modernizar el juego xeneize. A diferencia de otros técnicos que apostaron por la garra y el resultado, Gago busca otra cosa: jugar bien, ganar con estilo. Pero, claro, no siempre se puede. Y el Superclásico lo enfrenta con uno de los entrenadores más laureados del continente.
Un historial que pesa
Como entrenadores, Gallardo y Gago se enfrentaron cinco veces entre 2021 y 2022, cuando el actual DT de Boca dirigía a Aldosivi y luego a Racing. El balance es claro: cuatro victorias para Gallardo (4-1 y 2-0 ante el Tiburón y 4-0 y 2-1 ante la Acadé) y un empate, en un recordado 2-2 entre River y Racing en el Monumental.
El ciclo se cerró con la victoria millonaria por 2-1 en Avellaneda, que privó a Racing de ser campeón y coronó a Boca en la última fecha de 2022. Ironías del destino: ese día el Xeneize festejó gracias a Gallardo y a aquel penal que Armani le atajó a Galván.
Por eso, el cruce del domingo tiene sabor a revancha para Gago. Ya no con Racing, sino con Boca, y con la chance de imponerse por primera vez al técnico que tantas veces lo dejó con las manos vacías.
Como jugadores
La diferencia de edad entre Gallardo y Gago (10 años) hizo que sus enfrentamientos en el campo fueran limitados. Se cruzaron en tres Superclásicos entre 2005 y 2006, con Gago logrando una victoria (2-1 Clausura 2005) y dos empates (0-0 Apertura 2005 y 1-1 Clausura 2006).
En esos partidos, Gago fue titular y completó los 90 minutos, mientras que Gallardo ingresó desde el banco en dos ocasiones y fue reemplazado en otra. Hubo un cuarto encuentro, donde River ganó 3-1, pero Gallardo, que estaba entre los relevos, no ingresó.
Uno como DT y otro como jugador
También vale recordar aquella final de CONMEBOL Libertadores en Madrid donde River ganó por 3-1. Gago ingresó en el segundo tiempo -se retiró lesionado, ya sin cambios, en el alargue- y el Muñeco era DT de River.
El presente de ambos
Gallardo llega con River en un andar irregular, aunque competitivo. Apuesta por una mezcla de experiencia y juventud, y sigue siendo fiel a su estilo: presión, intensidad y búsqueda constante del arco rival. En su regreso, sabe que necesita volver a ganar partidos importantes. El clásico, sin duda, es uno de ellos.
Gago, en tanto, empieza a dejar su huella en Boca. Con una idea clara, consolidó un mediocampo dinámico y encontró variantes en ataque. Le falta todavía dar un golpe fuerte, un triunfo que lo instale definitivamente. Ganarle a Gallardo, en el Monumental, sería ese paso.