La Gira de 1925 marcó un antes y un después en la historia del fútbol argentino. Ese año, por primera vez, una delegación argentina viajó a Europa para medirse con equipos de ese continente. Pero no fue una Selección ni un combinado nacional. Se trató de un club: Boca Juniors.
Por esos años, en la génesis del fútbol, la idea de enfrentarse con los mejores del mundo venía siendo una materia pendiente en la región y en el país. Y se potenció luego de los Juegos Olímpicos de 1924 de París, donde Uruguay ganó con mucha autoridad la medalla de oro. Sin embargo la organización no resultaba tan sencilla. El fútbol todavía no era profesional y ponerse de acuerdo para realizar un viaje de varios meses por Europa era bastante complejo para la época.
Como a nivel nacional el acuerdo se dilataba, Boca, que en ese entonces se estaba haciendo cada vez más conocido, contaba con varias figuras y venía ganando títulos (se había consagrado campeón en 1923 y 1924 de la Asociación Argentina), tuvo una iniciativa interesante.
El club se postuló para organizar, financiar y realizar una gira por el Viejo Continente que incluiría partidos por España, Alemania y Francia. El calendario incluía enfrentamientos contra grandes de Europa como Real Madrid, Atlético de Madrid y Bayern Munich.
Luego de 13 encuentros en España, llegó el turno de desembarcar en Alemania. Así, el 9 de mayo de 1925, Boca debutó en tierras teutonas enfrentando nada menos que a Bayern Munich. Un encuentro entre dos equipos que pronto estarían entre los más grandes del mundo.
El partido terminó igualado 1-1. Boca se puso en ventaja a los 16 minutos de juego con un tanto de Manuel Seoane, mientras que el local selló el empate a los 36 minutos, con gol de Hutstteiner. Seoane era uno de los refuerzos que el club de la Ribera había fichado para la Gira. Y fue el goleador del equipo, con 12 conquistas. Además de la Chancha, que en ese momento jugaba para El Porvenir y luego triunfaría en Independiente, también se sumaron el arquero Octavio Díaz (Rosario Central), Cesáreo Onzari (Huracán), Luis Vaccaro (Argentinos Juniors) y Roberto Cochrane (Tiro Federal de Rosario).
El Xeneize llegaba a este juego con chapa de gran equipo y tras haberse ganado un enorme respeto por lo realizado en los enfrentamientos previos. Sin embargo, al parecer no todos pensaban lo mismo. La escala antes de arribar a Alemania debía ser en Francia, pero los dirigentes de los clubes de ese país decidieron suspender las presentaciones del conjunto argentino. Nunca se conocieron del todo los motivos, aunque algunos aseguraron que las caídas sufridas por el Xeneize en Bilbao desmotivaron a los organizadores.
Lo cierto es que los encuentros en España dejaron un saldo más que positivo para Boca: de 13 partidos jugados, los argentinos ganaron 10 y perdieron apenas 3. Derrotaron al Celta de Vigo (3 a 1), Deportivo La Coruña (3 a 0 y 1 a 0), Atlético de Madrid (2 a 1), Real Madrid (1 a 0), Sociedad Gimnástica (1 a 0), Osasuna, (1 a 0), Deportivo Espanyol (1 a 0 y 3 a 0) y al Combinado Catalán (2 a 0). Las caídas se dieron contra el Celta de Vigo (3 a 1), Real Unión de Irún (4 a 0) y Athlétic Bilbao (4 a 2).
Las crónicas de la época hablan de un intenso choque entre Boca y Bayern, con jugadas de riesgo en ambos arcos y un resultado que pudo quedar para cualquiera de los dos. Boca contaba con buenos futbolistas. Américo Tesorieri, Ludovico Bidoglio, Ramón Mutis, Segundo Médici, Alfredo Elli, Mario Busso, Domingo Tarasconi, Antonio Cerrotti, Dante Pertini, Carmelo Pozzo, Carlos Antraygues y Alfredo Garasini formaban el plantel, potenciado por los refuerzos.
La cancha, a diferencia de algunas en las que Boca había jugado en España, estaba en perfecto estado y era un escenario ideal para el buen fútbol. El choque se llevó a cabo en el Grünwalder Stadion, con las tribunas repletas de simpatizantes. Los buenos antecedentes con los que llegaba el club argentino generaron un revuelo para este partido estreno, con cientos de personas que viajaron desde ciudades vecinas. Mucha gente se quedó afuera del estadio que fue la casa del Bayern hasta 1972.
La gira continuó con otros encuentros por Alemania, donde el xeneize ratificó su poderío derrotando al Nord West (3 a 0), al Spielvereinigung (7 a 0), al Combinado de Frankfurt (2 a 0) y al Eintracht Frankfurt (3 a 0).
Pero ese debut entre Boca y el Bayern fue el que perduró a pesar del paso de los años. Tanto, que el 27 de febrero de 2018, en su cuenta de Twitter, el club alemán escribió: “Ya es hora de un desempate, ¿verdad, Boca?". El posteo hacía referencia a este histórico partido de 1925, y fue enviado con motivo del 118° aniversario del club bávaro.
Hasta la fecha no se concretó ese desempate, seguramente porque no es una tarea sencilla coordinar la agenda de cada institución. Sin embargo, hubo un par de enfrentamientos entre ambos equipos. El 30 de agosto de 1967, el Xeneize le ganó 1-0 por el torneo Joan Gamper, disputado en el Camp Nou de Barcelona.
El último cruce fue en la Copa Intercontinental 2001, en Tokio, cuando los alemanes se impusieron 1-0 por con gol del ghanés Samuel Kuffour en el tiempo suplementario. Un choque con un arbitraje polémico que hasta el día de hoy se discute. Y por el que también se espera una revancha.