Leopoldo Luque, médico personal de Diego Maradona, habló en una entrevista difundida en Radio La Red y contó un poco más en detalle lo sucedio en los últimos días y lo que viene para el técnico de Gimnasia y esgrima La Plata: "cuando en el post operatorio le dije que se tenía que quedar me dijo que no y se puso agresivo. Vimos un cuadro de abstinencia con sudoración y euforia", relató y marcó que Maradona "no es un paciente muy interesado en su salud. La neurocirugía podría correr riesgo si se iba a su casa".
Yendo un poco más profundo sobre el diagnóstico en sí, el doctor Luque amplió: "No lo pongo en principio como un cuadro de adicción, es un paciente que vive en extremos y cuando él quiera va a dejar de hacer eso que le hace mal". Y agregó: "Diego en el último tiempo tomaba una copa y el hacía mal" y que "No es un gran consumidor de alcohol por sus antecedentes, y los fármacos que toma".
Contó que "son días agitados y estresantes" y que, a día de hoy, "el estado de salud actual de Diego es bueno". De todas maneras, advirtió que "el deterioro que tuvo fue visto. Todo el mundo notó lo del partido". Y agregó que: "A Diego lo veía peor, pero no me recibía mucho en su casa, aunque Diego nunca llegó a la instancia de peligrar su vida o la de terceros".
En cuanto a su evolución el médico reveló que "una de las ideas más fuertes es que se lo traslade a una casa en Nordelta". Y agregó: "Hoy Diego con mucha lógica me dice 'qué hago acá'. Tiene mucha lógica porque se siente bien". Y consultado sobre la posibilidad de volver a trabajar fue contundente: "A mí Leopoldo Luque, como médico y persona, a nadie hay que quitarle el trabajo, y más si lo apasiona. Si le da una vida, una rutina. Es mi sugerencia. Muchas personas puede opinar diferente. Que no, que no tenga presiones, que esté relajado, no puede tener presiones... Diego donde menos sufre presiones es en una cancha. Esa es mi impresión”.
Sobre la reaparición del Doctor Cahe al lado de Diego, Luque desarrolló: "No sé cómo llegó Cahe, pero cuando me sonó el teléfono me puso contento, vino y estuvimos charlando. Tiene la trayectoria de haber trabajado más de 30 años con Diego". Pero también fue claro consus propios sentimientos: "En este momento estoy a cargo del Titanic, con miles de personas que hablan, aparece todo el mundo opinando", expresó.
"Hay médicos que no se animan ni a decirle 'Hola Diego'. Yo diferencio mucho el amor y el respeto que le tengo con lo que hay que hacer por su salud", enfatizó Luque.
Luque también dejó claro que él no tenía comunicación previa con la familia de Maradona: "La comunicación se gestó ahora, y es muy buena. Hablo mucho con Verónica y Giannina. Con Dalma he hablado en persona. La familia vio que mi finalidad es ayudar a Diego", resumió.
