<
>

Real Madrid: los números detrás del irregular momento de Mbappé

play
Liverpool vs. Real Madrid, el juegazo del miércoles en la Champions League (2:38)

Los Reds tiene récord perfecto en el nuevo formato de la Champions. Real Madrid ganó dos y perdió el mismo número de partidos. (2:38)

Vinícius estará lesionado entre tres y cuatro semanas, por tal motivo Mbappé tendrá aún más presión para cargar con la ofensiva del Real Madrid


0, 0, 1, 0, 0, 0, 0, 1: Esos son los últimos ocho partidos de Kylian Mbappé en el Real Madrid, y los goles que ha marcado en ese tiempo. Es su peor racha goleadora a nivel de clubes desde 2021, y es una racha que tiene a algunos aficionados madridistas impacientes preguntándose: ¿por esto se hizo tanto alboroto?

El fichaje de Mbappé el pasado verano fue la llegada más sonada del Madrid desde Cristiano Ronaldo, 15 años antes, con más de 70,000 aficionados abarrotando el Bernabéu para darle la bienvenida. Se trataba de una superestrella ya hecha, a punto de alcanzar su plenitud, que llegaba procedente del París Saint-Germain como agente libre para llevar al campeón de España y de Europa al siguiente nivel.

Al menos, esa era la idea: Mbappé haría aún mejor a un buen equipo, marcando goles a raudales mientras el Madrid se paseaba hacia otro título de liga. En lugar de eso, Mbappé se encuentra a un tercio de su primera temporada en el Real Madrid -y a punto de viajar el miércoles a Anfield, para enfrentarse al Liverpool- enfrentándose al tipo de dudas con las que nunca antes había tenido que lidiar.

En la rueda de prensa del entrenador Carlo Ancelotti previa al partido de LaLiga del domingo en Leganés, cinco de las 13 preguntas versaron sobre Mbappé. Los periodistas preguntaron por su posicionamiento en el campo, su participación en los entrenamientos e incluso, de forma irresponsable, especularon sobre su salud mental.

La ausencia de Mbappé en las dos últimas convocatorias de Francia no ha hecho sino intensificar el escrutinio. El seleccionador nacional, Didier Deschamps, imploró a los medios de comunicación que "dejaran en paz [a Mbappé]" a principios de este mes, pero sus vagas explicaciones sobre la ausencia del capitán de su equipo no ayudaron; dijo que Mbappé quería jugar, pero que él había decidido lo contrario.

Con razón, Ancelotti ha dicho que "es cuestión de tiempo" para que Mbappé se recupere. Un gol en la victoria por 3-0 del domingo en Leganés, desde un nuevo papel en el lado izquierdo del ataque, fue un paso en la dirección correcta y oportuno antes de jugar contra el Liverpool en la Champions League. Al Madrid le vendría bien una victoria en Anfield, después de haber perdido dos de sus cuatro primeros partidos en la nueva fase de la Champions League. Y a Mbappé le vendría bien un buen partido para acallar las críticas.

Antes de ese partido, echamos un vistazo a las estadísticas de Mbappé esta temporada para evaluar su bajo rendimiento, y si hay razones suficientes para creer que su mala forma a principios de temporada podría ser sólo un bache.


Marcando goles

Olvídate de todas las demás estadísticas, al menos por un momento, porque el éxito o el fracaso de Mbappé en el Real Madrid vendrá determinado por la cantidad de goles que marque. La temporada pasada, Jude Bellingham (19) y Vinícius Júnior (15) fueron los máximos goleadores del Madrid en LaLiga. Superarlos sería el mínimo, pero si Mbappé supera cómodamente esas cifras -digamos que con 25-30 goles, como lo hizo en sus últimas cuatro temporadas en el PSG- las quejas sobre su ritmo de trabajo, o la frecuencia con que fue sorprendido en fuera de juego, pronto se olvidarán.

Hasta la fecha, Mbappé ha marcado nueve goles en 17 partidos con el Real Madrid en todas las competiciones, y siete en 12 en LaLiga. Eso lo convierte en el segundo máximo goleador del Madrid por detrás de Vinícius, que tiene 12 en todas las competiciones y ocho en LaLiga. Y lo que es más importante, mientras que Vinícius está superando sus goles esperados (xG), convirtiendo más ocasiones de las que habría que esperar, Mbappé está haciendo lo contrario. Sus siete goles en liga han llegado con una xG de 8.83. En la Champions League, es incluso peor, marcando una vez cada cuatro partidos, con una xG de 2.68.

Los remates de Mbappé no suelen ser tan desviados. En el PSG, superó su xG en seis temporadas consecutivas en la Ligue 1, de 2018 a 2024. Ya sea por los nervios, el deseo de impresionar, su posicionamiento, la oposición u otros factores menos tangibles, no está siendo tan clínico ahora y sus números de disparos respaldan esa evaluación. En 12 partidos de LaLiga, Mbappé ha efectuado 57 disparos, el máximo en la liga española. En las cinco ligas más importantes de Europa, sólo Erling Haaland (62), del Manchester City, ha disparado más. El máximo goleador de LaLiga con 15 goles, Robert Lewandowski, del Barcelona, ha efectuado 10 disparos menos que Mbappé en dos partidos más.

De los 57 disparos de Mbappé, sólo 27 han ido a puerta, un porcentaje de acierto del 47.4%. Eso sitúa a Mbappé en el puesto 125 de los 461 delanteros de las cinco principales ligas europeas que han jugado cinco o más partidos, en cuanto a su porcentaje de disparos a puerta. Sólo en LaLiga, 21 delanteros han sido más certeros en sus disparos que Mbappé esta temporada, entre ellos Borja Iglesias, del Celta de Vigo (58.8%), Lewandowski (57.4%) y Vitor Roque, del Real Betis (55.6%).

Dadas esas cifras de gran volumen, la tasa de conversión de Mbappé de disparos a gol es, naturalmente, pobre, del 12.3%. Esto convierte a Mbappé en el 48º delantero más letal de LaLiga esta temporada, y en el 230º entre los delanteros de las cinco principales ligas europeas. Para ponerlo en contexto, Alexander Sørloth, del Atlético de Madrid, que no ha sido un rematador consistente esta temporada, tiene un porcentaje de conversión mejor (17.9%). Lewandowski tiene un impresionante 31.9%. Por lo demás, Haaland tiene un 19.4%, Nicolas Jackson, del Chelsea, un 25%, y Harry Kane, del Bayern Múnich, un 30.4%.

Tampoco es que Mbappé dispare regularmente desde lejos. El 84.2% de sus disparos han sido dentro del área, y el 73.7% de ellos con su pierna derecha. Pero llegar a posiciones de gol no siempre ha sido fácil. Mbappé no ha sincronizado bien sus carreras, sobre todo en la derrota por 4-0 en el Clásico de octubre ante el Barcelona, cuando batió un récord indeseado al ser sorprendido ocho veces en fuera de juego. Fue el récord de su carrera, y la cifra más alta registrada por un jugador de LaLiga en los últimos 15 años.

Creando oportunidades

Por supuesto, ser el centro delantero del Real Madrid no consiste sólo en marcar goles. El predecesor de Mbappé en la camiseta número 9 del Madrid fue Karim Benzema, un jugador que construyó su reputación sobre el juego de combinación desinteresado y elevó el listón de lo que podemos esperar razonablemente en la posición. Y Mbappé no es Benzema.

Esta temporada, Mbappé ha creado la respetable cifra de 13 ocasiones -una estadística que combina pases clave y asistencias- en LaLiga. Eso se compara con las 44 del barcelonista Raphinha, uno de los primeros candidatos a mejor jugador de la temporada. Su compañero en el Madrid, Vinícius, ha creado 29 ocasiones, más del doble que Mbappé. Antoine Griezmann y Lamine Yamal han creado 26. En total, 14 delanteros de LaLiga -de 127 que han jugado al menos un minuto esta temporada- han creado más ocasiones que Mbappé. Si nos centramos en las "grandes ocasiones creadas" para los compañeros de equipo, definidas como situaciones en las que se espera razonablemente que un jugador marque, Mbappé sólo tiene dos en LaLiga. Está muy por detrás de Raphinha, con 14, Yamal, con 12, y Griezmann y Vinícius, con siete.

Las estadísticas de pases de Mbappé son sólidas, lo que refleja el dominio de la posesión del Madrid en todos menos dos de sus partidos esta temporada. Ha completado 300 de los 351 pases intentados en LaLiga, con una tasa de finalización del 85.5%; sólo cinco delanteros de LaLiga han completado más. Si nos fijamos en una estadística más útil, los pases progresivos (pases que hacen avanzar el balón más de 10 metros o hacia el área de penalti), ha dado 51, sólo por detrás de Griezmann, Iago Aspas, Yamal y Raphinha, aunque completando sólo el 17% de ellos, ocupando el puesto 23 entre los delanteros de LaLiga en esa categoría.

Más que el pase, una de las grandes virtudes de Mbappé siempre ha sido su capacidad para desbordar con el balón en los pies. Esta temporada, en LaLiga, ha registrado 113 acarreos progresivos (es cuando un jugador desplaza el balón al menos cinco metros hacia la portería) en campo contrario. Sólo cuatro jugadores -Vinícius, Abde Ezzalzouli del Real Betis, Yamal y Nico Williams del Athletic Club- tienen más.

Trabajo sin balón

Es fácil -y probablemente injusto- reírse de algunas de las estadísticas defensivas más llamativas de Mbappé esta temporada; sólo hay que intentar mantener la cara seria.

En 12 partidos de LaLiga, ha hecho una entrada. En 1,025 minutos sobre el terreno de juego, no ha despejado ningún balón, no ha interceptado ningún balón y no ha bloqueado ningún disparo. Sólo ha ganado tres duelos aéreos. Sólo ha recuperado el balón 17 veces, frente a las 45 de Raphinha, las 44 de Yamal y las 31 de su compañero Vinícius. Si sumamos el número de "intervenciones defensivas totales" de Mbappé -en realidad, todas las categorías anteriores combinadas-, ha realizado 18 en LaLiga esta temporada, lo que le sitúa en el puesto 78 entre los 127 delanteros de la liga. Sus 18 intervenciones defensivas se comparan con las 80 de Raphinha, las 62 de Griezmann y las 56 de Lewandowski.

No es de extrañar, entonces, que una crítica constante y creciente de Mbappé ha sido en torno a sus contribuciones cuando el Madrid no tiene la posesión. Un flujo constante de capturas de pantalla y clips de vídeo se han compartido en las redes sociales, mostrando a Mbappé retrocediendo hacia su portería, mientras sus compañeros de equipo corren para hacer frente a otro ataque de la oposición.

Mbappé ha presionado a un jugador contrario que está en posesión 49 veces esta temporada. Eso le sitúa en el puesto 52 entre los delanteros de LaLiga en términos de presión; de ellos, 31 se produjeron en lo que se clasifica como "alta intensidad", y sólo cuatro de ellos dieron lugar a que el Madrid recuperara el balón. En comparación con las 140 presiones de Vinícius (más del triple), de las que 106 fueron de alta intensidad y dieron lugar a 46 recuperaciones. Incluso Lewandowski, a sus 38 años, supera aquí a Mbappé, con 70 presiones y 18 recuperaciones resultantes.

Además de las estadísticas individuales de Mbappé, también existe la percepción de que su falta de voluntad para replegarse ha sido contagiosa y ha afectado al equipo en su conjunto. Él y Vinícius son dos de los tres delanteros, junto con Aspas, del Celta, que más tiempo han pasado andando en LaLiga esta temporada. Mbappé ha pasado el 76% de su tiempo en el campo caminando o trotando, aunque también ha registrado 35 sprints por partido, lo que le sitúa en el puesto 22 de los delanteros de LaLiga, más cerca de donde se esperaría encontrar a un jugador de un físico tan explosivo.


La actuación de Mbappé el domingo contra el Leganés no fue espectacular. Jugó 83 minutos en Butarque, marcó un gol y le anularon otro por fuera de juego. Su gol, un sencillo remate a bocajarro, vino de un pase de Vinícius, la primera asistencia a Mbappé en LaLiga esta temporada. Y lo hizo desde un nuevo rol, al menos con el Madrid, ya que Mbappé empezó en la banda izquierda del ataque, con Vinícius por el centro.

Es un cambio posicional que Ancelotti había descartado previamente como improbable dada la eficacia de clase mundial de Vinícius en la izquierda. El técnico apuntó al cansancio de la estrella brasileña tras el parón internacional para explicarlo esta vez, diciendo que jugar como extremo cansa más, y Mbappé estaba más fresco que su compañero. Tal vez debamos tomarle la palabra a Ancelotti, o tal vez fuera una excusa para justificar que Mbappé jugara finalmente en el puesto en el que ha desplegado su mejor fútbol.

"Empecé en una posición diferente", dijo Mbappé tras el partido. "Pero como dije el primer día que llegué aquí, puedo jugar en diferentes posiciones (...). Es la historia de mi carrera. Puedo jugar en la derecha, en la izquierda, como delantero. No me importa. Lo que quiero es jugar bien, ayudar al equipo y marcar goles".

Ahora que Vinícius estará lesionado entre tres y cuatro semanas y no podrá viajar a Anfield, Mbappé tendrá aún más presión para hacer exactamente eso contra el Liverpool.