Lionel Messi, capitán de la Selección Argentina debutó ante Canadá en lo que será su última Copa América en Estados Unidos.
El 10 argentino tuvo en sus pies la llave que destrabó el partido y lideró la victoria en el inicio del torneo, en un encuentro bastante disputado.
En la primera mitad estuvo algo impreciso como casi todo el equipo, aunque tuvo algunos chispazos de su fútbol. Un pase largo a Marcos Acuña para dejarlo en posición de definir en el área, un remate que pasó cerca del palo y otra habilitación para Julián Álvarez, en el final de la primera parte.
En 3 minutos del segundo tiempo, Leo y Argentina hicieron todo lo que venían haciendo. Messi filtró un pase como casi solo él puede hacerlo para que Alexis Mac Allister quede frente al arquero y en el rebote le permita a Julián Álvarez convertir el 1-0.
Con la liberación del gol, el 10 y el equipo se sintieron más cómodos y activaron más las asociaciones internas en el último tercio del campo. A los 11 tuvo una buena opción, pero se le fue apenas larga y se la tiraron al córner cuando intento rematar.
A los 19 minutos tuvo una chance inmejorable para marcar el segundo. Dibu Martínez lo habilitó con un envío muy largo y Messi quedó frente al arquero, en primera instancia remató cruzado y el arquero contuvo con un remate largo que le volvió al 10, quién hizo un enganche delicioso y dejó tirados a Crépeau y a Cornelius, pero cuando buscó la definición por arriba le rebotó en el cuerpo al defensor.
A los 33 minutos tuvo otra clarísima. Un rechazo largo de Martínez lo dejó nuevamente de cara al arco. Trasladó en velocidad y buscó definir picándola ante el arquero, pero se le fue apenas ancha. En el momento de la definición tenía a Lautaro Martínez solo ingresando por el otro costado.
Unos minutos más tarde recibió un durísimo golpe de parte de Bombito, que hizo prender las alarmas en Argentina. Tras la jugada desperdiciada por Lautaro, se lo vio muy dolorido en el piso en su tobillo derecho. Recibió tratamiento médico y pudo continuar el partido.
En una pelota parada mostró su pegada e inteligencia, al intentar sorprender con un pase bombeado a Nicolás Otamendi, que no pudo controlar para definir correctamente.
Cuando el partido tenía un poco de incertidumbre solo por el resultado, volvió a dar un pase de magia para dejar solo a Lautaro para que ponga el 2-0 que llevó tranquilidad al debut argentino.
En la última del partido tuvo otra opción para marcar con su especialidad, el tiro libre, pero no le dio con potencia.
Leo selló un partido con algunos altibajos, pero con apariciones estelares que marcaron la importante victoria en el debut.