BUENOS AIRES -- Michel Deller tiene 56 años y hace gala de un trato exquisito en la distancia corta. Su sonrisa habla de un tipo seguro de sí mismo, mientras su figura casa con el estereotipo del empresario que gusta de relajarse jugando al golf en las horas libres que le puede birlar a sus obligaciones.
Se trata del máximo accionista de los shoppings Quicentro y San Luis en Ecuador, dueño de la franquicia Kentucky Fried Chicken en ese país, de varias inmobiliarias importantes, y una de las más grandes fortunas de Sudamérica. Sin embargo, recién accedió a la popularidad y el gran público le conoció cuando se vinculó al fútbol. Hace 11 años, cuando Independiente del Valle se llamaba Independiente José Terán. El club al cual, junto a un grupo de amigos y socios, Deller ha transformado en un más que serio candidato a ganar la Copa Libertadores de América en la presente edición.
Independiente del Valle, fundado en la localidad de Sangolquí (80.000 habitantes) en 1958, es el último escollo de Atlético Nacional de Medellín, que busca levantar su segunda Copa Libertadores 27 años después de haberla ganado por primera vez.
Deller espera con serena ansiedad el desenlace mientras se permite una humorada, de la que luego se disculpa reiteradamente alegando que “siempre es bueno reírse de uno mismo”. “Si ganamos la Copa y nos toca enfrentar a Real Madrid en el Mundial de Clubes, será el momento de quitarnos las camisetas y gritar “¡¡uuuhhh!!” frente a las cámaras, como lo hace Cristiano Ronaldo”.
-¿Por qué una persona con su poder y visión de negocios se metió en el fútbol, con lo volátil y cambiante que es?
- Siempre he tenido mucha pasión por el fútbol. Nosotros nos encontramos en una situación muy especial cuando con un grupo de amigos decidimos coger (sic) el Independiente. Es que en las últimas décadas el fútbol ecuatoriano, sin lugar a duda, creció muchísimo. De manera exponencial. Nosotros veíamos la posibilidad de quedar con una mayor estructura, principalmente formativa, y tener un club que trabajara en la parte social, en el desarrollo intelectual y humano de los jugadores, de nuestros jugadores, transmitiendo al mismo tiempo distintos valores a la comunidad y al país. Decidimos que ese era nuestro rol y vimos que había espacio para un club diferente. Un club que proponía algo diferente. Luego, nunca hay que minimizar lo que hacen los otros. Simplemente, esa era nuestra propuesta.
- Suena muy bien todo eso, pero es un plan que necesita de paciencia y mucho tiempo.
- Dios nos ha acompañado y nos ha dado mucha suerte pues todo lo que nos habíamos propuesto se está cumpliendo. Tenemos un equipo canterano que llega a jugar la Copa Libertadores y tengo entendido que se trata del equipo más joven en la historia de la competición que va a jugar la final del torneo. Para nosotros es un orgullo que sea canterano y el más joven de La Copa. Porque te demuestra el potencial del futbolista ecuatoriano si es que le das la oportunidad y si se le va formando de una manera adecuada. Esa es la esencia del proyecto y por eso entramos en esto. Se han dado las cosas y muy bien en estos 11 años que tenemos en el club. Tanto, que por eso todo esto ha sido ridículo.
-¿Ridículo?
- A ver. Hace 11 años cogimos (sic) un equipo en la segunda categoría. En el primer año ascendimos a la serie B del fútbol ecuatoriano. El segundo año casi descendimos. En el último partido creo que hasta el minuto 20 del segundo tiempo estábamos descendiendo. Salvamos la categoría en la B, y en el tercer año ascendimos a la A. Pero ya con una identidad. Basarnos en jugadores jóvenes. En aquel momento ascendemos con Juanito Cazares en el equipo, a quien ustedes recuerdan en Argentina. El cuarto año, ya en la Serie A, casi descendemos. Lo mismo que en el quinto. El 6to año y el 7mo peleamos el campeonato. Y hemos peleado el campeonato durante los últimos 4 años. Haciendo muy buenos papeles en la Copa Libertadores y en la Copa Sudamericana. Las cosas del fútbol hicieron que hace 3 años nos quedáramos afuera en la Libertadores habiendo ganado 5-4 en Chile a Unión Española. De esas cosas que te dejan agarrándote los pelos por la frustración. Estábamos clasificados hasta el minuto 88, cuando San Lorenzo le metió el tercer gol a Botafogo y nos dejó afuera. San Lorenzo, que luego acabó siendo el campeón.
-¿Cómo han llegado hasta aquí?
- Tenemos claro hacia dónde vamos. Con un grupo muy comprometido de dirigentes y un gran cuerpo técnico. Una pequeña pero muy estructurada organización formativa que trabaja con conceptos europeos. Priorizando la parte humana, y un talento que creo que debería ser la envidia de todos los clubes latinoamericanos.
-¿Mérito del director deportivo?
- Ahí hay otra cuestión curiosa. Siempre hemos sido los mismos. Los dirigentes somos un grupo de amigos. No teníamos originalmente un director deportivo. Ahora sí. Se llama Luis Roggiero y es un apasionado del fútbol, aunque sabe más de matemática, je. Su rol es ayudarnos con la información, y manejar las cosas de tal manera que todas las decisiones que tomemos en el directorio sean racionales e inteligentes. El fútbol se lo dejamos a los que saben. En este caso al ‘profe’ (Pablo) Repetto, los coordinadores de las formativas, y los directores técnicos de todas las categorías.
-Pero el modelo de conducción... En algo se han inspirado...
- Nos hemos guiado bastante por el modelo que tiene una academia de Qatar. La Aspire Academy, con quienes tenemos una linda relación y nos han apoyado muchísimo. Igual, el modelo no es lo más relevante. Lo más importante es la parte humana. La parte personal. Que los jugadores crezcan de la manera adecuada en la parte física, mental, y futbolística. Que se formen como personas de bien y que tengan estos conceptos de solidaridad, unión y superación como lo ha demostrado todo el equipo profesional por ejemplo contra Boca Juniors en la semifinal de La Copa Libertadores.
-¿Qué tan orgulloso le hizo sentir esa forma de ganar la clasificación para la final?
- Mucho. Creo que el equipo le ha dado muchos mensajes a mucha gente que nos minimizó, pero que acabará comprendiendo que acá hay cosas mucho más importantes que simplemente los billetes para comprar a un determinado jugador.
-Hablando de jugadores, Librado Azcona, su arquero, con las actuaciones que ha tenido, ahora está a punto de dejar el club.
- Nosotros no tenemos problema en que el jugador se vaya dependiendo de que tengamos la oportunidad de dejar un relevo a su altura. En el caso de Daniel, es evidente que ha tenido campañas gloriosas. Es nuestra manera de describirlo y de comprenderlo. Por eso debemos conversar con él. El plan original era que él se quedara hasta finales de diciembre. Ahora tendremos que ver qué pasa.
-Si tuviera que elegir una imagen para contar la situación que vive junto al resto de directivos, ¿cuál sería?
- Esto ha sido imposible de describir. La imagen más cercana a lo que sucede es que nosotros estamos agarrados al guardafajo (sic) de atrás de un bus, y este bus va a toda velocidad por una autopista, con nosotros ahí detrás, en el aire. Tratando de no caernos. Estos chicos son ese bus junto al cuerpo técnico. Uno sólo puede decirles “gracias” por el viaje más fantastico y fantasioso que alguien pueda imaginar.