BARCELONA -- La intensidad y dureza que se vivió en el derbi liguero de Cornellá se trasladaron multiplicadas al Camp Nou en el primer asalto de su eliminatoria de Copa, y que el Barcelona prácticamente sentenció ante un Espanyol que en ocasiones superó el límite de lo permitido.
Existió una jugada especialmente, mediada la segunda mitad, que despertó la indignación en el terreno de juego y provocó un enfado pocas veces visto en Messi.
Ocurrió que tras una jugada en la que el argentino acabó sin más en el suelo, en el área del Espanyol, el portero blanquiazul Pau López le pisó la tibia y el tobillo de manera tan evidente como vergonzosa.
“Mejor no echar leña al fuego y no polemizar”, explicó el secretario técnico del Barcelona Roberto Fernández intentando restar trascendencia al suceso, pero la reacción de Messi llamó la atención por las pocas veces que se le puede ver enfrentado a un rival.
“Debería entrar un comité a valorarlo por las imágenes”, se escuchó decir al acabar el partido en el que el portero del Espanyol fue protagonista especial, tanto por sus paradas como por sus desplantes, agresiones e insultos.
Pau, que se ha ganado el puesto en la titularidad, se las tuvo primero con Arda Turán por considerar que el turco, cuando él se lanzó a por un balón, no apartó el pie. La jugada acabó con amonestación para el portero y para Luis Suárez, por enzarzarse en una tangana de la que participaron ya varios futbolistas.
Aquella jugada, en el último suspiro de la primera mitad, fue la que desembocó, después, que la dureza generalizada pasase a ser malos modos. Y en ello tuvo el meta especial peso. Primero pisando sin necesidad, pero con alevosía y malos modos el tobillo de Messi y después empujando e insultando a Luis Suárez.
Salvador de su equipo en más de una ocasión, Pau se equivocó en el lanzamiento de falta que Messi convirtió en el 2-1 al lanzarse demasiado hacia la escuadra, cuando el balón entró, como un obús, casi por el centro… Pero más, mucho más, se equivocó en sus acciones antideportivas.
Y que, probablemente, le supondrían en Inglaterra un fuerte castigo. En España, al no ser consignado por el árbitro en el acta, Pau López no recibirá ninguna sanción mientras que probablemente Diop, si se consigna su expulsión como insulto, sí será castigado.
Las imágenes, de todas maneras, deberían ser el peor castigo y la penitencia el recibir la crítica que, sin duda, se le vendrá encima al joven meta catalán del Espanyol.