BARCELONA -- Leo Messi, 16 goles, es el máximo anotador en la historia de los derbis. Diego López, record de imbatibilidad en la historia del Espanyol, será el encargado de frenar la voracidad del crack argentino.
Es, este cara a cara entre ambos una de las claves para explicar, en parte, lo que ocurra en el Barça-Espanyol que cerrará el domingo futbolístico que en el entorno azulgrana se sospecha comenzará con malas noticias procedentes de Japón, porque nadie (o casi nadie) duda del triunfo del Real Madrid en la final del Mundial de Clubes.
El Barça puede, contra su corazón, traspasar al Madrid el escudo conmemorativo de campeón del mundo pero debe, por obligación, recortarle en la Liga ganando un derbi que devolverá al plano a la MSN y pondrá en el escenario un duelo esperado de forma especial.
“He sufrido mucho a Messi; es quien más goles me ha marcado” reconoció Diego López, quien de manera inesperada se ha convertido en ídolo blanquiazul.
La última jornada superó el record de imbatibilidad de Kameni y espera en este derbi “cortar la racha” que le martiriza personalizada en la Pulga. Diez goles le ha marcado Leo a Diego: seis cuando defendía la portería del Villarreal y otros cuatro la del Real Madrid. Las previsiones, a la vista de todos esos datos, no pueden ser más descorazonadores para el veterano guardameta gallego, aterrizado el último día de mercado en el Espanyol y catapultado a la categoría de héroe.
“La gente se fija más en estos partidos y por encima del resultado, que es importante, lo que debemos hacer es dejar el campo habiendo competido al máximo” resaltó el meta periquito, quien no es ajeno al especial rendimiento de Messi en esta clase de partidos… Desde su estreno, en el que fue su debut, el 16 de abril de 2004, Leo ha disputado 25 partidos contra el Espanyol, ganando 17 de ellos y marcado 16 goles.
Habiendo perdido sol0 uno, el 21 de febrero de 2009, el crack argentino fue quien abrió la última goleada, el 5-0 del 8 de mayo de 2016 y quien se presenta, al mando de la MSN, como el principal peligro para ese histórico Diego López.
Lo que probablemente desconozca el portero blanquiazul es que Messi, en el verano de 2005, estuvo cerca de ser cedido al Espanyol. Y que una actuación sublime en el Joan Gamper frente a la Juventus que dirigía Capello lo evitó. Aunque esa es otra historia que, hoy por hoy, poco le debe interesar a Diego López, el portero de los guantes de oro de un Espanyol que se prepara para frenar a su gran verdugo: Leo Messi.