BARCELONA -- Jordi Alba seguirá en el Barça. Se modificará el actual contrato que le ligaba al club azulgrana hasta junio de 2020 y se redactará uno nuevo que se extenderá por cinco temporadas, hasta 2024 y que, prácticamente, asegurará la permanencia del lateral catalán hasta su retirada, al cabo de 12 años de su fichaje desde el Valencia y habiendo entonces cumplido los 35.
A falta de que el club lo haga oficial, situación que se espera suceda en próximos días, la renovación de Jordi Alba ha supuesto el mayor contratiempo de los últimos tiempos para la directiva de Josep Maria Bartomeu, quien en enero solventó intervenir directamente en el asunto vistas las diferencias existentes entre las demandas de los asesores del jugador y lo ofertado por los ejecutivos del equipo, que provocaron un encendido enfado del futbolista y amenazaba con su abrupta salida.
En los últimos meses, de hecho, se conoció la disposición que por su fichaje mostraron clubes como Juventus o Manchester United y a los que el propio Alba no cerró las puertas debido a, según sus palabras, el “poco interés del Barça” por ofrecerle unas condiciones que entendía a la altura de su trascendencia en el equipo azulgrana.
Alba seguirá en el Barça y lo hará viéndose recompensado con un salario de crack. Siempre sin contar la figura, obvio, de Leo Messi, también un escalón por debajo de los Suárez, Coutinho, Busquets, Dembélé, Ter Stegen o Piqué pero a la altura del escalafón ocupado por Rakitic (a quien el club se niega a mejorar sus condiciones) y Umtiti.
Aunque desde el club no se han dado a conocer, ni se espera que se haga, las nuevas condiciones contractuales del lateral catalán, este alcanzaría un sueldo anual, fijo, cercano a los 10 millones de euros, con diversos plus por rendimiento que le llevarían por encima de los 11 en el mejor de los casos.
Canterano que abandonó el club a los 15 años para fichar por el Cornellá y recaló en edad juvenil en el Valencia, Jordi Alba jugó cedido en el Gimnàstic de Tarragona en la temporada 2008-09 y se asentó las tres siguientes en el primer equipo del Valencia, hasta que coincidiendo con la Eurocopa de 2012 (siendo fijo ya en los planes de Vicente del Bosque), fue fichado por el Barça como heredero de Abidal y por 14 millones de euros.
CRACKS ASEGURADOS
Desde su regreso al Camp Nou su trascendencia para Vilanova, Martino, Luis Enrique y Valverde ha sido absoluta, sumando en estas siete temporadas 280 partidos oficiales y convirtiéndose en uno de los jugadores de referencia de un Barça que no se entendería sin su presencia.
Con la renovación de Jordi Alba el Barça se asegura la continuidad de sus futbolistas de referencia en los últimos años, atendiendo a las anteriores renovaciones de Messi y Luis Suárez (2021), Ter Stegen (2022) o Umtiti y Busquets (2023), manteniendo también hasta 2021 el contrato de un Rakitic cuya permanencia no está hoy por hoy nada clara.
El club azulgrana, además, tiene perfilado el relevo generacional con la presencia de Athur, Dembélé, Sergi Roberto, Lenglet o Semedo, siendo una incógnita qué puede ocurrir a medio plazo con Coutinho, atado el fichaje de De Jong y confiando en el futuro de Todibo…