BARCELONA -- La expedición del FC Barcelona partió este lunes con destino a Estados Unidos, donde el miércoles y el sábado disputará sendos partidos amistosos frente al Napoli en Miami y Michigan, con la inesperada y destacada ausencia de Leo Messi, lesionado en el entrenamiento matinal… y la sombra de Neymar Jr. alrededor del club.
Dos años después de que el futbolista brasileño disputase en Miami su último partido como jugador del Barça en el primer Clásico celebrado en Estados Unidos, días antes de abandonar el club a traición para fichar por el PSG, su posible regreso al Camp Nou se mantiene en el primer plano y se aventura que, a seis días de que el campeón galo inicie el campeonato local en el Parque de los Príncipes frente al Nimes, esta semana debería ser decisiva para resolver el asunto.
“Todavía quedan varias semanas para que se cierre el mercado y puede haber alguna incorporación más”, proclamó el presidente Bartomeu ante las peñas del Barcelona, en un discurso muy estudiado, por cuanto lo dijo antes de concretarse el fichaje de Junior Firpo y dejando en el aire si se refería simplemente al lateral de origen dominicano… o quizá su insinuación iba más allá.
PREPARACIÓN
Mientras el caso Neymar sigue centrando la actualidad en el mercado de fichajes, Valverde desplazó a 26 futbolistas a Estados Unidos, estrenándose Junior Firpo en una convocatoria en la que se incluyó a Coutinho y Arturo Vidal (los dos últimos en volver de vacaciones), a la que se sumaron Iñaki Peña, Riqui Puig, Carles Pérez y Abel Ruiz como representantes del filial y de la que también formó parte Rafinha Alcántara, el futbolista del que hace semanas se aventura su salida del club.
“En el centro del campo hay muchos jugadores y ya veremos qué pasa. No sé si puede haber alguna salida” reconoció el entrenador azulgrana tras el partido) frente al Arsenal, dejando la puerta abierta a cualquier posibilidad y más preocupado en cómo afectará el viaje a Estados Unidos a su plantilla.
“Desde el punto de vista del club, la gira es importante tanto a nivel económico como social, pero tiene un componente que nos obliga a adaptarnos. Por las distancias, las sesiones... No es fácil” reconoció Valverde, mostrando la incomodidad deportiva que le supone a nivel personal en cuanto a la preparación del comienzo oficial de la temporada.