Si no se sufre no sabe igual y el Atlético de Madrid ya sabe sufrir…para saber gozar. Felicidades al nuevo monarca del balompié ibérico
Históricamente, al Atlético de Madrid, el drama le ha acompañado en la previa de sus alegrías y también en la antesala de sus grandes tristezas y decepciones. La temporada 2020-2021 de LaLiga en España no fue la excepción, sufriendo hasta la última jornada para proclamarse campeón de España por décima primera ocasión en sus 118 años de fundación.
La campaña de los “Colchoneros” hay que dividirla en dos partes: la primera dominando de cabo a rabo y sacándole como líder más de 10 puntos de ventaja al Real Madrid y Barcelona.
Para la segunda parte, a partir de enero, tuvo que “sudar sangre” y algo más para soportar y salir bien librado del arreón de sus principales perseguidores, que apretaron el paso recortando muchos puntos en la cima.
Pese al repunte de Culés y Merengues, Diego Simeone y su “guardia pretoriana” nunca cedieron el liderato. Se aferraron a él y, cuando la tragedia tocaba a su puerta, consiguieron los resultados necesarios para mantenerla cerrada a cal y canto.
El quedar fuera de la Copa del Rey en enero y de la Champions League en febrero, fueron traspiés (dolorosos, más no mortales) que le “aligeraron” el calendario para centrar toda su atención en el campeonato doméstico, que dicho sea de paso, no conquistaba desde 2014.
El “Cholo”, criticado muchas veces por su rigidez táctica, en este curso mostró evolución como DT al utilizar de buena manera la línea de 3 en el fondo con Savic, Felipe y Hermoso.
Lo que ha construido el señor Simeone en 10 años al mando ha sido fantástico: 2 Ligas, 2 Europa League, 1 Copa del Rey, 1 Supercopa de Europa y 1 Supercopa de España. Hay un antes y un después de su llegada, incluidas para bien, las finales de Champions perdidas ante el Madrid en 2014 y 2016.
Junto con don Luis Aragonés “El Sabio de Hortaleza”, probablemente los dos mejores directores técnicos en la historia de los “Rojiblancos”. El legado de ambos perdurará por siempre.
No se casó solo con el 3-5-2, también usó el 4-4-2 de años anteriores, adaptándose a que tenía disponible debido a los lesionados y positivos por Covid-19 durante todo el certamen.
Además recuperó la mejor versión del belga Yannick Carrasco, potenció las facultades de Marcos Llorente y Ángel Correa y confió ciegamente en Luis Suárez como su delantero estrella.
Hablando del uruguayo, echado a la malagueña por el Barcelona el verano pasado, sus 21 goles y, sobretodo, los últimos dos para darle el triunfo a su club ante Osasuna y Valladolid, lo reivindican como futbolista que ha demostrado ser todavía un “9” de élite.
Mención aparte merece el portero esloveno Jan Oblak (quinto Premio Zamora de LaLiga en las últimas 6 temporadas) al recibir solo 25 tantos en 38 juegos. Además atajó penales in extremis que valieron puntos de oro molido cuando peor lo pasaba el equipo en este 2021.
Con todo y que no tuvo enfrente a las mejores versiones del Madrid y Barça, este Atlético tiene mucho mérito por ser el único en arrebatarles el trofeo dos veces en las últimas 17 ediciones de la Primera División de España.
Antes en el Vicente Calderón, hoy en el Wanda Metropolitano y en Mahadahonda. Si no se sufre no sabe igual y el Atlético de Madrid ya sabe sufrir…para saber gozar. Felicidades al nuevo monarca del balompié ibérico.